Buenos Aires
Piden enjuicien a acusado de matar y quemar a un jubilado
Télam
Una fiscal pidió hoy que se eleve a juicio oral la causa por el homicidio de un jubilado que el año pasado fue asesinado en su casa del barrio porteño de Monte Castro y luego prendido fuego en un colchón, durante un robo.
La solicitud fue formulada por la fiscal en lo Criminal de Instrucción número 40, Estela Andrades, en la investigación seguida por el crimen de Alfonso Curtosi (89), según informó la página Fiscales.
El hecho ocurrió la madrugada del 10 de agosto último, cuando, tras violentar una reja, dos hombres ingresaron a la casa que la víctima ocupaba en la calle Calderón de la Barca 1926.
Una vez dentro de la vivienda, sorprendieron al jubilado, a quien golpearon y apuñalaron para apoderarse de un certificado de plazo fijo, tarjetas de crédito, 30.000 pesos y un audífono.
Luego, los delincuentes colocaron a la víctima sobre un colchón, le prendieron fuego y provocaron el incendio de parte de la casa.Según la autopsia, el hombre fue incendiado cuando ya se encontraba muerto, presuntamente con el fin de borrar huellas.
El cuerpo de Curtosi fue encontrado al día siguiente por su hijo, quien había ido a almorzar como todos los domingos.
El hombre contó que su padre era jubilado, viudo y vivía solo y que cuando entró a la casa lo encontró bajo un colchón incendiado en un pasillo que comunica a los dos dormitorios de la vivienda.
Dato revelador
De inmediato llamó a la Policía y al lugar del hecho arribaron efectivos de la comisaría 43. Al concurrir a la escena del crimen, la fiscal Andrades ordenó el secuestro de una lata de bebida que había en el lugar junto a otros objetos y solicitó a la Unidad Criminalística Móvil la obtención de rastros sobre la reja de entrada y el envase.
La División Rastros de la Policía Federal logró levantar una huella dactilar de la lata que, se determinó luego, pertenecía a Aldo Lorenzo Buscaroli.
La fiscal solicitó el allanamiento del domicilio del sospechoso y su detención se concretó el 2 de septiembre de 2014, en tanto que continuó la búsqueda de un segundo partícipe del hecho.
Durante el procedimiento, se encontró un revolver calibre .22, que había sido sustraído durante el robo a una vivienda en la localidad bonaerense de Ramos Mejía, el 31 de marzo de 2014.
En la investigación, también se obtuvieron registros de cámaras de seguridad de vecinos, quienes aportaron datos de cómo los homicidas llegaron al domicilio de la víctima.
Sobre las pruebas colectadas, Andrades consideró completa la investigación sobre el rol de Buscaroli y solicitó al juez de Instrucción 21, Manuel de Campos, la elevación a juicio de la investigación.
Buscaroli está imputado como coautor de “homicidio criminis causae en concurso ideal con robo con efracción y encubrimiento”, éste último delito por la tenencia del arma, por lo que en caso de ser condenado recibirá una pena de prisión perpetua.
Además del requerimiento de elevación a juicio, la fiscal requirió la profundización de tareas investigativas para poder ubicar al prófugo.
