Una política de corto plazo
“Sin deuda no hay transición”
- El gobierno nacional terminaría su turno con una deuda pública que duplica el saldo de la balanza comercial. Las reservas y la emisión ya no alcanzan para cubrir el déficit.
Enrique Vanoli, titular del BCRA. Foto archivo El Litoral.
De la redacción de El Litoral
Ieral. Fundación Mediterránea
“En materia de inflación, problemas de competitividad, magro nivel de actividad, el escenario actual no se diferencia demasiado del 2014. Lo que sí distingue al 2015 de los anteriores es la necesidad imperiosa del gobierno nacional de salir al mercado a colocar nueva deuda, tanto en pesos como en dólares”.
Así comienza su análisis el economista Jorge Vasconcelos, del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Fundación Mediterránea). Señala el especialista que “el déficit fiscal es cada vez mayor” y que el uso de emisión y reservas “ya no alcanzan” para cubrir el financiamiento a la Casa Rosada.
“Ayudado porque se presume que la política económica habrá de cambiar a partir del 10 de diciembre y aprovechando la ‘ventana de oportunidad’ que abrió el gradualismo de la Reserva Federal de Estados Unidos, el gobierno recurrió a la muleta del endeudamiento para transitar lo que resta del año.
“Pero por la magnitud y el costo de estas operaciones, el mensaje es bastante claro para la próxima administración: esta dinámica no es sostenible más allá de unos pocos meses, por lo que no quedará más remedio que buscar reducir el desequilibrio fiscal y, al mismo tiempo, normalizar la situación externa (lo que implica buscar la mediación del juez Griesa) para no seguir pagando la elevadísima tasa de interés del 9 por ciento anual en dólares cada vez que el Tesoro sale en la búsqueda de divisas”.
Recuerda Vasconcelos que en las últimas semanas, el Tesoro nacional tomó nueva deuda en pesos por casi 15 mil millones -dos colocaciones de Bonac y de una nueva operación con el Fondo de Garantía de la Anses- a lo que sumaron los 1.415 millones de dólares obtenidos en los últimos días a través del Bonar 24.
Más adelante, estima que al rojo fiscal de 2015 -5,4 puntos del PIB- “se le agrega el déficit ‘cuasi fiscal’ que puede llegar este año a 2 puntos del PIB, por el costo de la deuda
del Banco Central (Lebacs y Nobacs), que crece a un ritmo vertiginoso”.
“Ésta es la contracara de la elevada emisión monetaria, que es parcialmente absorbida por el BCRA para evitar mayores presiones sobre la inflación y la brecha cambiaria. El stock
de Lebacs y Nobacs era de 110 mil millones de pesos a fin de 2013, pasó a 275 mil
millones a fin de 2014 y podría perforar la línea de los 500 mil millones antes de que
termine el año. Para el próximo gobierno, queda el desafío de evitar que su política
económica sea un rehén de la deuda del Banco Central”, concluye.
El dato
Apremio
Las reservas del Banco Central, netas de compromisos de corto plazo (encajes, deuda con China,etc), habían caído en 3,1 mil millones de dólares en el primer trimestre, para marcar un piso de 15,3 mil millones de dólares en la segunda semana de abril (pese a que las reservas brutas seguían estables en 31,4 mil millones de dólares). Y los vencimientos de deuda de aquí a fin de año, incluyendo el Boden 2015, suman 10,3 mil millones de dólares, mientras que el llamado “dólar ahorro” -de seguir la ventanilla abierta- insumiría unos 4 mil millones adicionales hasta noviembre.
Las cuentas que más cuestan
“Tampoco podrá apostarse a resolver todo con otro “festival de bonos” tras un eventual arreglo del tema “buitres”. La deuda externa de la Argentina no es tan baja como se cree”, señala Vasconcelos.
El economista recuerda que hay “letras intransferibles” que el Tesoro fue dejando en
la caja fuerte del BCRA a cambio de sus reservas, a los que se suman títulos de la Anses por $ 90 mil millones, a los que muchos consideran un “pagadiós” de la Casa Rosada a sus dos financistas internos.
“Los pasivos registrados en bonos, con organismos internacionales y el Club de
París suman 90 mil millones de dólares”, a los que “se le agregan compromisos pendientes con importadores y la deuda de corto plazo con China y Francia”, con lo que “estaríamos superando los 100 mil millones de dólares de deuda pública externa consolidada”.
A eso, el economista suma el fallo pendiente de Griesa y los del Ciadi, con lo que el stock de deuda alcanzaría dos veces las exportaciones de 63 mil millones de dólares previstas para este año.
“Mientras en Brasil la deuda externa del sector público es el 50 % de sus exportaciones, en la Argentina, hay que pensar en una relación de 2 a 1 cuando el país normalice su situación financiera externa. Y en Brasil, las reservas suman 370 mil millones de dólares, mientras aquí apenas superan los 30 mil millones (en términos brutos)”.
“Mejor -concluye- olvidarse de la idea de financiar el próximo ciclo de crecimiento de la Argentina en base a una alegre política de endeudamiento externo”.
En cifras
300
mil millones de pesos
será el déficit anual estimado de la Casa Rosada en 2015.
"El próximo gobierno recibirá las llaves de un Estado nacional que, cada 100 pesos de gasto, estará solventando sólo 78 pesos con ingresos genuinos (impuestos)”.
Jorge Vasconcelos
Economista Ieral
