El inmenso jardín de Nino Bravo hecho poema con su voz inmortal...

América, ese edén que Dios hizo antes de traer a Messi

“Como un inmenso jardín, eso es América...”, cantó para todos los tiempos el hombre que se hizo mito con su muerte. En la “ciudad ideal”, esperan por ese jugador ideal que Dios creó. Mañana a las 18.30, Argentina busca lo que se niega desde 1993.

Enrique Cruz(h)

(Enviado Especial a La Serena, Chile)

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La señalan como la “ciudad ideal”. Ya su nombre es tentador. La Serena, de por sí, invita a pensar en una ciudad tranquila. Y de hecho que lo es. Cuenta con 200.000 habitantes. “No somos 200.000, somos 200.100”, cuenta Jorge entre risas cuando el enviado de El Litoral lo consulta por la población de su ciudad. Y ante la pregunta sobre la capacidad del estadio, mientras Jorge dice enérgicamente “18.000 espectadores”, Santiago lo interrumpe con tono seguro y serio: “Error, entran 18.001”. Y se despiden los dos no sin antes dejar en el ambiente esa amabilidad tan particular de esta gente.

Noelia es una porteña que tiene al padre nacido en Malabrigo y está trabajando de voluntaria. Cuando este enviado llegó a realizar el trámite de acreditación, ella preguntó: “¿sos de Santa Fe?, mi padre también”. Y cuenta que llegó el viernes de la semana pasada, a trabajar gratuitamente como voluntaria. Ahora vive en Avellaneda, es hincha de Independiente, le gusta el periodismo y estudia abogacía, lo que se dice una “todo-terreno”.

Pero ya estamos aquí, pensando en cómo harán para mantener esa tranquilidad casi pueblerina de La Serena, con tantos miles de argentinos, paraguayos y uruguayos que llegarán en los próximos días para ver fútbol. El estadio es coqueto pero chico. Todos estarán sentados y allí juega Deportes La Serena, el equipo de la ciudad, que hoy milita en la Segunda División del fútbol chileno.

Uno se pone a pensar en las cosas extrañas que tiene esta Copa América. Por ejemplo, que los dos mejores jugadores hasta que apareció Messi —obvia referencia a Maradona y Pelé— no pudieron ganarla. Y sorprende, porque Pelé ganó su primer Mundial en 1958 y el último en 1970. ¿Cómo puede ser que en tanto tiempo no haya tenido la chance de ganarla?. Y con Maradona pasa lo mismo, porque su reinado arrancó bastante antes de aquél 1986 inolvidable y llegó hasta 1994, quizás con vaivenes y sacudones producto de todo lo que hizo y lo que le pasó. Pero si ambos supieron de tanta gloria mundialista, ¿cómo puede ser que no la hayan conseguido en un ámbito más chico como el americano?

Messi está tan tocado por la varita mágica, que hasta en eso también puede superar a los otros. Ya es el argentino más ganador de la historia y va en camino de otros records. El de Batistuta corre serio riesgo. Son “apenas” 11 goles de diferencia que le lleva, como máximo artillero del fútbol argentino jugando con la celeste y blanca. ¿Alguien tiene dudas de que lo superará?. Pero Messi, que jamás hace gala de estas cosas y escapa a cualquier tipo de polémica, quiere ganar este título con Argentina aun a sabiendas de que no es comparable con lo que pasó el año pasado en Brasil.

A propósito, esta triple corona y el gran año futbolístico han liberado a Messi a la hora de declarar. Más que liberación, Messi habla con mayor franqueza. Y reconoce que quiere ganar sí o sí la Copa del Mundo, inclusive redobla la apuesta: “Mis compañeros de Barcelona fueron campeones mundiales y quiero saber lo que ellos sienten”. Como si ellos, los que fueron campeones en 2010, no serían capaces de resignar todo lo conseguido con tal de ser, al menos por un día, Lionel Messi.

El Faro, Mansa, Peñuelas y Cuatro Esquinas son las playas tranquilas que cautivan en La Serena. Y la avenida del Mar es el centro del atractivo nocturno y bohemio, que ya anoche se llenó de turistas argentinos que disfrutaron de una buena cerveza, un vino o la tradicional papaya tan famosa por estas tierras, para aquellos que reniegan del alcohol. Pero se acerca la hora del fútbol y a eso hemos venido, a ver si este equipo del Tata Martino —tremendamente elogiado por integrantes de la selección paraguaya que compartieron el vuelo con el enviado de El Litoral— puede empezar a repetir aquella historia de hace 24 años con el Coco Basile a la cabeza, cuando el Cholo Simeone fue el “irreverente” que se puso la 10 de Diego y Leo Rodríguez —hoy representante de jugadores— el que asumió aquel rol de conductor que Maradona había dejado por la primera sanción por doping, recibida apenas unos meses antes de esa copa.

Messi dijo en la semana que “llegamos mejor que en el Mundial” y es cierto. Llega bien él, llega muchísimo mejor Agüero —un desgastado e inofensivo delantero el año pasado en tierras cariocas—, volvió Carlitos Tevez, Higuaín sigue estando filoso, aparece un Banega en el que Martino confía, está Javier Pastore —otro que refresca el ambiente de la selección— y habrá que ver si no tenemos que andar repitiendo viejos conceptos, como por ejemplo cuando el funcionamiento defensivo preocupaba el año pasado, hasta que Sabella dio el golpe de timón, metió a Demichelis y se acomodó la cosa.

Confieso que me llama la atención lo del arquero. Admito que con el nombre no se ganan titularidades, salvo que se llame Messi. Pero Sergio Romero fue figura en el Mundial y se suponía que no podían existir dudas. ¿Tendrá algo que ver la intención de Martino de que el arquero salga jugando desde atrás, sin arriesgar la pelota con envíos largos y que por eso lo ve mejor preparado a Guzmán, por su pasado en Newell's cuando el Tata lo dirigió?, ¿o será tan importante la inflamación que tiene Romero en uno de sus hombros?. En fin, si no ataja Romero, sería la gran sorpresa. No tanto quizás la entrada de Roncaglia y Banega, porque la idea es preservar a Zabaleta y Biglia, quienes no llegaron en un buen nivel físico a Chile y todavía no están ciento por ciento para entrar desde el arranque.

Si el entrenador de Paraguay fuese cualquier otro y no Ramón Díaz, estaríamos hablando de un equipo que buscaría achicar espacios del medio hacia atrás, que agruparía mucha gente en el fondo y que plantearía un partido de contragolpe, fricción y aprovechamiento de las pelotas quietas, algo tan común en el fútbol paraguayo. El Tata Martino conoce muy bien a Paraguay porque dirigió a la selección de ese país en el Mundial de Sudáfrica, con muy buen suceso. Es un choque de estilos, obviamente. Pero es posible que Ramón busque imprimir una impronta diferente, de más protagonismo. Es el fútbol que le gusta y que pregonó siempre el riojano. Se supone que no lo cambiará.

Cuando Nino Bravo inmortalizó aquella famosa frase: “...Como un inmenso jardín, eso es América, cuando Dios hizo el edén, penso en América...”, posiblemente haya pensado en todo menos en el fútbol. Pero hoy, con los chilenos afilados y confiados, con Neymar, Messi, la difícil Colombia de José Pekerman, los seis técnicos argentinos y tanto clima futbolero que se respira, hay un edén que quizás no pasó por la mente ni por la privilegiada voz de Nino Bravo, pero que se instala en una Chile que sueña con la gloria, una Brasil que busca revancha y nosotros, con este Messi inspiradísimo y con muchas ganas de ganarla. Porque Pelé y Diego no pudieron.

La confesión íntima de Messi

Lionel Messi aseguró que en algún momento le “gustaría saber que se siente ser campeón del mundo”, en la antesala al debut de la Argentina en la Copa América de Chile ante Paraguay, por el Grupo B. “Ser campeón del mundo es el objetivo final en el fútbol y todavía sueño con eso. Muchos compañeros del Barcelona ganaron la Copa y aún sueño con saber que se siente ser campeón mundial”, precisó el rosarino en una entrevista al magazine británico Short List. En relación a la Copa América, Messi dijo que el equipo argentino debe dejar atrás el subcampeonato mundial en Brasil 2014 y pensar en ganar el certamen de Chile. “Tuvimos grandes equipos desde la última vez que ganamos un trofeo (sin contar los Juegos Olímpicos) y aún así no pudimos ganar un torneo. En Brasil estuvimos cerca, aunque la Copa del Mundo quedó atrás. Nuestro objetivo es la Copa América”, subrayó el astro del equipo catalán.

Por otro lado, Messi se refirió a su supuesta rivalidad con el portugués Cristiano Ronaldo, al argumentar que se trata de “un invento de los medios”. “No tenemos rivalidad. Es algo que inventaron los medios. Los dos queremos lo mejor para nuestros clubes, no es Messi vs Ronaldo, nunca lo fue”, sostuvo el delantero. En otro orden, Messi señaló que jugará en Barcelona “hasta el momento que el club quiera”, dado que el club le dio “una oportunidad en un momento en que nadie lo hizo” y que nunca tuvo deseos de jugar en otro club.

Una marea albiceleste

• El embajador argentino en Chile, Ginés González García, vaticinó ayer la llegada de 35.000 argentinos, la mitad de los estimados por el gobierno chileno, y detalló las recomendaciones para aquellos que viajen a presenciar la Copa América que se desarrollará hasta el próximo 4 de julio. “Ningún país aportará tantos hinchas como Argentina en esta Copa América”, afirmó González García, quien agregó que el gobierno chileno aguarda recibir cerca de 35.000 argentinos durante el certamen sudamericano. “El estado chileno estima que vendrán 70.000 turistas y que la mitad serán argentinos. Es cierto que no hay esa cantidad de entradas pero mucha gente aprovechará para viajar en familia y hacer turismo”, explicó el ex ministro de Salud de la Nación, quien también recomendó que los viajantes se vacunen debido a un recient

Como en cada acontecimiento destacado

El Litoral, presente en Chile

El enviado especial del diario, Enrique Cruz (h), ya está instalado desde ayer en la ciudad de La Serena, donde mañana debutará la Selección Argentina en la Copa América. Así, en cada edición del vespertino, como así también actualizado al instante en la página web (www.ellitoral.com) estará no sólo la información más completa del equipo nacional, sino además la mirada santafesina, con comentarios y entrevistas de personas destacadas, más las anécdotas y el color de la competencia.