PIDEN PATRULLAJE

Hoy barrio El Pozo se moviliza por seguridad

  • Ayer, viernes, contaron siete robos en seis horas y a manos del mismo grupo de personas.
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Raid delictivo. “Por mucho tiempo mantuvimos la costumbre de sentarnos en la puerta, de ser un barrio tranquilo”, dijeron los vecinos.

Foto: Flavio Raina - Archivo El Litoral

 

De la Redacción de El Litoral

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Un grupo de vecinos de barrio El Pozo se manifestará hoy a las 18, frente a la Subcomisaría 7a., para pedir más seguridad. La razón es el raid delictivo que dos hombres y un nene de 11 años protagonizaron ayer, desde la madrugada y hasta el mediodía. “Siete robos en seis horas” detallaron Graciela Díaz y su esposo Aldo, comerciantes del barrio.

Todo comenzó a las 5, cuando el trío intentó ingresar a la vivienda de esa pareja y escapó al ser descubierto por los dueños de casa. Desde entonces, hasta el mediodía, robaron en la panadería Los Dos Chinos y en la heladería Grido, del centro comercial de El Pozo; rompieron un vidrio e intentaron entrar a un negocio de indumentaria, pero fueron descubiertos por el dueño que vive junto al negocio. “Eran los mismos tres que vimos en casa y que escaparon”, dijo Aldo.

Cuando el grupo reapareció al mediodía, en el supermercado ubicado en la entrada al barrio, el comerciante redujo a uno de los hombres y el otro adulto y el nene escaparon. “En esa corrida, el nene le arrebató el celular a una señora y la billetera a otra que empezó a gritar. Los vecinos lo corrieron y lo alcanzaron en la plaza del barrio”, agregó Sandra.

El reclamo de los vecinos se basa en la demora de las fuerzas de seguridad. Según su relato, llamaron al 911 pero no llegó ninguna patrulla. Intervino un policía que pasaba en moto por la calle. “Fue oportuno, porque la gente estaba enfurecida y había perdido la dimensión de que es solamente un nene”, destacó Sandra Flores, otra vecina de la Manzana 3.

Durante la tarde, los vecinos se reunieron con el nuevo comisario de la Subcomisaría 7a., quien tomó el cargo hace dos días. “Nos dijo que tiene sólo un móvil y le falta personal, y encima brinda apoyo a los operativos de Alto Verde, cuando nosotros necesitamos una respuesta ágil y más patrullaje”, destacó Sandra Flores.

Buscan respuestas

El barrio reconoció al nene y a los dos hombres como clientes frecuentes de los comercios que robaron. Desde allí, apuntan a los dos asentamientos que se desarrollaron en las inmediaciones y que vieron crecer en los últimos meses.

Están ubicados en el extremo este de El Pozo, sobre calle Guillermo Estévez Boero. Uno de ellos es el llamado “Manzana 21”, a orillas de la laguna y junto a la parada del colectivo. El otro está al sur, en las inmediaciones del aliviador de la Ruta 168. “No queremos que se haga una caza de brujas, porque mucha de esa gente trabaja honestamente; hay que reforzar la prevención”, dijo Sandra. “Las condiciones en las que están viviendo esas familias, sin asistencia social y con falta de opciones, hacen que muchos apelen a los robos como alternativa”, destacó la pareja.