La degradación de la “ley de leyes”

Un presupuesto casi inútil

En los últimos años, con decisiones a sola firma de la Casa Rosada, la norma se cambia tanto que no sirve para programación económica ni para esclarecer qué, cómo, cuánto y con qué finalidad gasta el gobierno.

De la redacción de El Litoral

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DyN

El Presupuesto 2016 no podrá ser una referencia para la toma de decisiones de los agentes económicos debido a la reiteración de la subestimación del gasto en el proyecto presentado por el Poder Ejecutivo, por lo que se limitará cumplir la función de “instrumento de administración”, que será periódicamente modificado por decisiones administrativas y decretos de necesidad y urgencia.

La Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (Asap) advirtió que la subestimación de gastos “impide realizar un análisis efectivo. Como ha venido ocurriendo a lo largo de toda la última década, existe una subestimación de los gastos, tal como se ve en las remuneraciones, los subsidios económicos y las partidas destinadas a la inversión pública, que distorsiona el resultado final e impide realizar un análisis efectivo de lo planteado en el proyecto presentado al Congreso”.

Para la Asap, “no existen razones técnicas que justifiquen diferencias entre lo sancionado y lo ejecutado superiores al 30 por ciento, tal como ha venido ocurriendo, por lo que revertir esta conducta depende de una decisión política por parte de las autoridades encargadas del tema”. “En ese sentido, el Presupuesto cumplirá con su rol de ser un instrumento de administración y tal como está planteado permitirá que los diferentes organismos que conforman la Administración Nacional puedan organizar su gestión cotidiana”, indicó al respecto.

Sin embargo, la Asociación precisó que “al mismo tiempo, se debilitará su función de herramienta de programación económica y social, al impedir que se genere un debate serio y necesario sobre cuestiones que afectan a todos los ciudadanos, como la magnitud del déficit y los mecanismos de financiamiento y dejar a los agentes económicos sin una referencia indispensable para su toma de decisiones”.

La entidad presidida por Rafael Flores reconoció que “está claro que el Presupuesto no puede ser nunca una herramienta exacta, ya que se están presentando estimaciones de recursos y gastos que se van a ejecutar hasta 15 meses más tarde”. No obstante, advirtió que “las diferencias que se han registrado en los últimos años entre lo presupuestado y lo efectivamente ejecutado, que han superado el 30 por ciento, no pueden de ninguna manera imputarse a un mal cálculo.

La Asap señaló tres opciones para la futura administración: “O respeta los lineamientos del Presupuesto presentado, con un fuerte ajuste en el ritmo de crecimiento del gasto público, o modifica estos valores en la discusión legislativa previa a la sanción del proyecto de ley, o mantiene la subestimación de recursos y gastos para luego ampliarlos a través de Decretos de Necesidad y Urgencia y Decisiones Administrativas de la Jefatura de Gabinete”.

El dato

Más déficit

El gobierno dispuso la ampliación del déficit financiero en $ 1.073,5 millones de pesos a través de una nueva modificación del Presupuesto de este año, financiada con una disminución de cuentas y documentos a pagar por ese monto. La decisión administrativa 891/15 publicada hoy en el Boletín Oficial es la trigésimo segunda modificación del Presupuesto 2015.