Incluye a políticos y empresarios

Honduras: Escandalosa denuncia por narcotráfico

Agencias EFE/DPA

La acusación de Estados Unidos de vínculo con el narcotráfico contra tres miembros de una poderosa familia empresarial y política ha desconcertado a los hondureños, que constatan la gran penetración que ha tenido el crimen organizado en las estructuras gubernamentales.

El Departamento del Tesoro de Estados Unidos en Washington, a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros, señaló el miércoles a tres empresarios como “traficantes de narcóticos” y congeló sus bienes de siete compañías en suelo norteamericano.

Los tres señalados son el banquero Jaime Rosenthal Oliva, su hijo Yani Rosenthal y Yankel Rosenthal, sobrino del primero.

Los tres son tres prominentes figuras políticas del ahora opositor partido Liberal, además de conocidas personalidades del mundo de las finanzas y el deporte.

Yankel Rosenthal es el presidente desde hace 10 años del club Marathón, uno de los cuatro más populares del fútbol profesional de Honduras. Además, fue diputado por el partido Liberal y sirvió varios meses como ministro Asesor de Inversiones del actual mandatario Juan Orlando Hernández, cargo al que renunció en junio pasado.

Jaime Rosenthal, el patriarca, era el jefe de la llamada “corriente rosenthalista” dentro del partido Liberal, donde fue varias veces precandidato presidencial, además de ostentar el cargo de Designado Presidencial (vicepresidente) durante el gobierno (1986-1990) del ya fallecido presidente José Azcona.

Por su lado, Yani Rosenthal fue precandidato presidencial liberal en los comicios internos del 2012 y fue ministro de la Presidencia, equivalente a jefe de gabinete presidencial en 2006-2007, durante el mandato del defenestrado expresidente Manuel Zelaya (2006-2009).

El martes, Yankel Rosenthal fue detenido en Miami, en el estado norteamericano de Florida, y el miércoles compareció ante una corte federal acusado de lavado de dinero.

Jaime Rosenthal y Yani Rosenthal también fueron acusados por el mismo cargo en una corte federal en Nueva York, informó la fiscalía estadounidense.

Según las autoridades, los tres fueron señalados como traficantes de acuerdo a la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico (Ley Kingpin) por suministrar “servicios de lavado de dinero y otros para apoyar actividades de tráfico internacional de narcóticos de múltiples traficantes de drogas centroamericanos y de sus organizaciones criminales”.

Los Rosenthal son dueños de un conglomerado bancario-financiero aglutinado bajo el nombre Continental, con actividades en Panamá, Estados Unidos y las Islas Vírgenes Británicas, según la acusación.

En Honduras, el conglomerado incluye medios de comunicación (periódico, radio y televisión), una empacadora y una fábrica procesadora de alimentos, una finca de cultivo de cocodrilos y un parque industrial para maquilas.

El gobierno hondureño, por medio de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS), señaló que el caso de Banco Continental como entidad utilizada para lavado de dinero es un “caso aislado” del sistema financiero y “no afecta” a las demás instituciones.

Asimismo, señaló que Banco Continental continuará sus operaciones normales y aseguró que el sistema financiero hondureño es sólido.

Por su lado la familia Rosenthal y el Grupo Continental, en un comunicado emitido rechazaron las acusaciones y pidieron que se les respete el derecho a la defensa.

Solamente el expresidente Zelaya reaccionó por medio de su cuenta en la red social Twitter cuando escribió “la sorpresiva captura de Yankel (Rosenthal) en USA estremece las filas del Gobierno de JOH (Juan Orlando Hernández)”.

Las demás figuras políticas del país se llamaron al silencio, pero las redes sociales son un hervidero en cuanto a señalar a empresarios, políticos y funcionarios vinculados a actividades criminales y que pueden ser procesados por Estados Unidos.