La esposa del empresario

Confesó que planeó el crimen con su hija

Télam

Una mujer quedó detenida por el crimen de su esposo, un comerciante asesinado el jueves en la localidad riojana de Chamical, luego de haber confesado que junto a su hija, que también fue apresada, habían planeado el hecho que fue cometido por el novio de la joven, que está prófugo.

El fiscal Enrique Stoler informó a Télam que la mujer, identificada como Iris Paigés (60) había quedado demorada como sospechosa y ayer, al recibir visitas de personas con las que comparte su religión, de “quebró” y confesó su responsabilidad en el asesinato de su marido Francisco Ávila (60).

Ávila y Paigés, dijo Stoler, “eran de religión evangelista, y al ser visitada por dos personas del mismo credo por una ayuda espiritual en la comisaría, se quebró ante ellos y confesó que en complicidad con su hija, Silvia Romero, le habían encargado el crimen del comerciante al novio de esta última, de nombre Juan Palacios”.

Tras esta confesión, Paigés quedó detenida por orden del juez, Alejandro Aquiles, en la causa caratulada “homicidio agravado por el vínculo”, mientras que Romero quedó detenida en la ciudad cordobesa de Villa Dolores, donde reside con Palacios, sindicado autor material del crimen, que permanece prófugo.

“Palacios habría llegado a Chamical en una moto, ingresado al domicilio, y aprovechado que el hombre dormía, lo habría asesinado, limpió todo, la maniató a una silla a Paigés, y habría emprendido inmediatamente el regreso a su pueblo”, relató el fiscal. En el marco de las primeras tareas investigativas, quedaron detenidos tres ciudadanos colombianos y un cuarto hombre, oriundo de La Rioja, pero con el giro que tomó la pesquisa fueron liberados.

Ávila, propietario de un vivero y también se dedicaba a la venta de muebles de madera y techos para quinchos, fue encontrado el jueves cerca de las 3 asesinado en su casa de Chamical, a casi 250 kilómetros de la capital de La Rioja, luego de que Paigés alertó del hecho a un familiar que, a su vez, llamó a la Policía.