Contraluces y algo más
La imagen fue tomada en un campo en la zona de Diamante, Entre Ríos. La autora explicó: “me gustó mucho el contraluz que hacía la máquina con el sol, al atardecer y el efecto que generaba mientras pulverizaba”. Además del impacto visual, buscó “expresar cómo se trabaja en nuestros campos, un gran recurso con el que contamos”. La escena se produjo al atardecer, una oportunidad inmejorable por la luminosidad natural. La fotógrafa destacó “el efecto que se logra con la luz en ese momento, en sintonía con las luces encendidas de la máquina”. Aficionada a capturar paisajes, en este caso halló, además, una muestra del “esfuerzo humano, motor importante para el desarrollo del campo y del país”.
Foto: Mónica Marinaro
