En la condición de local

Habla Guillermo Aguilera y escucha con atención todo el plantel santafesino. Fue en el entretiempo, luego de los cuarenta minutos que definieron prematuramente el cotejo disputado en la cancha principal de Santa Fe Rugby Club. Foto: Luis Cetraro

César Miño

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En la primaveral tarde de ayer se puso en marcha en diferentes puntos del país el Campeonato Argentino de Rugby 2016, que por sabia decisión de la UAR llevará la denominación de “Ángel Guastella”, en homenaje al querido maestro del deporte nacional que falleciera recientemente en San Miguel de Tucumán.

En Sauce Viejo, el Seleccionado Superior de la Unión Santafesina debutó con una inobjetable victoria ante su par de la Unión del Sur, por 36 a 5, posicionándose de manera inmejorable en la zona Ascenso.

Con una producción que fue de menos a más y resultó lo suficientemente convincente, el plantel conducido por Guillermo Aguilera liquidó el pleito en los cuarenta minutos iniciales, con lo cual en el deslucido complemento sólo le bastó con solidificarse en defensa, para eclipsar los intentos de su modesto adversario.

Tras un inicio no demasiado expresivo, con la sapiente conducción de Estanislao Bay, Santa Fe fue construyendo una actuación que sin descollar, resultó lo suficientemente apta como para establecer diferencias nítidas ante un rival que más allá de sus buenas intenciones, no tuvo respuestas adecuadas para encauzar un contenido que de manera inexorable, le resultaría adverso en casi todo el partido.

La argumentación santafesina se inició con un predominio territorial que comenzó a evidenciarse al promediar la etapa inicial, ya que hasta allí imperó cierta paridad (inclusive, hasta pareció costarle menos a los bahienses conseguir la pelota desde las formaciones fijas).

Los anfitriones habían sumado a partir de un paciente movimiento de los forwards, rubricado con la capacidad de Gonzalo Del Pazo. Sin embargo, en su primera incursión en campo adversario, Sur construyó la que quizás fue su mejor acción de todo el cotejo, perforando la defensa local por el centro del campo de juego, merced a un sencillo movimiento nacido desde un scrum en mitad de cancha.

Un par de minutos después, una imperfección bahiense resultó letal, ya que fue aprovechada por la indiscutida categoría de Estanislao Bay, quien construyó “a piacere” un ensayo bajo los postes visitantes, que en cierto modo comenzó a direccionar el contenido del partido.

Luego llegó el tercer try, apoyado por Exequiel Benítez, luego de una buena acción colectiva; mientras que sobre el cierre, hubo otra conquista con el sello de “calidad Bay”, sentenciando el 26 a 5 parcial, que sinceramente, dejó la sensación de que sería indescontable, pese a que aún restaban 40 minutos.

El complemento

Sobre el inicio mismo del segundo tiempo, Santa Fe se dio un gusto que pocos seleccionados poseen: reemplazar a Bay por Nicolás Ariel Bruzzone, lo que por supuesto también es sinónimo de calidad y, además, de experiencia superlativa.

Tras un penal del efectivo Kerz, rápidamente llegó el quinto ensayo, apoyado por otro de los forwards destacados: Franco Davicino, sellando -goal mediante- el 36 a 5 que sería el marcador definitivo.

El resto del partido es como que estuvo de más: en un contexto con demasiadas imperfecciones y en medio de una gran cantidad de variantes, prácticamente no hubo nada más para destacar. Quizás la excepción sea la solvencia defensiva demostrada por los santafesinos, cercenando una y otra vez los tibios intentos bahienses.

A la hora de las conclusiones finales, debería insistirse ante todo que el Seleccionado Superior de la Unión Santafesina de Rugby arrancó de buena manera su ilusión de transformarse en protagonista principal de la zona Ascenso.

Al repasar sus principales argumentos, surge desde lo colectivo, el acomodamiento que fue alcanzando tras los minutos iniciales del juego y el orden defensivo que tuvo en los momentos en que Sur consiguió incursionar su territorio. Aspectos que cobran especial importancia, atendiendo al escaso tiempo de preparación que se dispuso, lo que por supuesto atenta contra la cohesión que se necesita en todo deporte de conjunto.

Desde lo individual, anteponer ante todo la jerarquía de Estanislao Bay; la solvencia y multiplicidad desde el pack de Gonzalo Del Pazo, Pedro Marozzi, José Canuto y Franco Davicino; mientras que por el lado de los backs, vale puntualizar la sobria tarea del fullback Leandro Rivero.

En cuanto a ítems deficitarios, los que ayer se disimularon por las características del adversario, podrían señalarse la poca injerencia que tuvo la tercera línea y el escaso de volumen de juego en el centro de la cancha, aspectos que puede resultar de imprescindible necesidad cuando lleguen rivales de mayor jerarquía.

Ataca Pablo Villar, pese al incipiente tackle de Víctor Laumann. Junto al apertura de CRAR, aparecen Estanislao Bay y Leandro Rivero, dos de los destacados del partido. Foto: Luis Cetraro

 

El resto

En lo que respecta a los demás partidos de la jornada inaugural del grupo Ascenso del Argentino 2016, vale comenzar con el disputado en La Tortuguita, el predio que Paraná Rowing Club posee en uno de los ingresos a la vecina capital, donde Entre Ríos consiguió una victoria clave ante Mar del Plata, por 29 a 26, con el arbitraje del sanjuanino Juan Gómez.

Por su parte, en las instalaciones que CURNE posee en la ciudad de Resistencia, Noreste consolidó un triunfo más que expresivo ante Alto Valle, por 64 a 13, con el control del bahiense Alvaro del Barco.

* La segunda jornada, prevista para el sábado próximo, contendrá estos cotejos: Alto Valle recibirá a Santa Fe; Entre Ríos a Noreste y Sur a Mar del Plata.