Protocolo de evacuación

Cómo actúan en el Túnel Subfluvial ante una situación de emergencia

  • La mayor debilidad es la ausencia de salidas de emergencias. La fortaleza, el entrenamiento permanente de sus equipos de asistencia, con guardias las 24 horas, los 365 días del año. Un colectivo tuvo un desperfecto técnico ayer, debieron remolcarlo y suspender el tránsito.
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Simulacros. Una vez por año, se organiza este tipo de experiencias abarcando distintos tipos posibles de siniestros para ajustar la respuesta de cada una de las áreas involucradas.

Foto: Archivo El Litoral

 

De la Redacción de El Litoral

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Un colectivo de la empresa Etacer fundió su motor ayer mientras atravesaba el Túnel Subfluvial. La gran cantidad de humo que emanó disparó el alerta y activó el protocolo de emergencia que el Ente ya viene aplicando y perfeccionando desde hace varios años.

El hecho no tuvo graves consecuencias, salvo la interrupción de la circulación por varios minutos, pero puso en foco una vez más la importancia de contar con un plan de contingencias en una estructura vial de estas características, cuya principal debilidad es -precisamente- no contar con ninguna salida de emergencia más que las mismas que utiliza el tránsito en forma habitual.

Para contrarrestar esta falencia, la capacitación constante de todo el personal, con roles concretos, y la implementación de guardias las 24 horas, los 365 días del año, es la principal herramienta que se dispuso desde la Dirección del Ente y, específicamente, desde el grupo de Higiene y Seguridad.

En este sentido, una vez por año se realizan simulacros sobre distintas posibilidades de accidentes que permiten poner en práctica todo el protocolo e intercambiar experiencias con otras áreas de atención de emergencias, como bomberos, ambulancias y la Agencia de Seguridad Vial.

Tipos de hechos

El Ing. Pablo Serra es el director por Santa Fe del Ente del Túnel Subfluvial y participó en el diseño de los protocolos. Contó que hay tres tipos contingencias, y que para cada una hay responsables y cosas para hacer. “Hay accidentes de tránsito con afectación de vidas humanas; accidentes con daños materiales pero sin afectación de personas e incidentes en el tránsito que no llegan a ser un accidente”.

Cuando pasan hechos como el de ayer, lo primero que se hace es interrumpir la circulación para evitar que haya más afectados y activar la guardia de tránsito, apostando un inspector de cada lado. Se verifica y dimensiona el siniestro rápidamente, se llama al 911 (de Paraná, por la cercanía y distribución de antenas) y se pide lo necesario para la asistencia: bomberos, ambulancias, rescatistas.

“Tenemos en claro que nuestra principal debilidad es que no tenemos salidas de emergencias, entonces tenemos que tomar más precauciones como, por ejemplo, que no entren más personas de las necesarias porque no pueden salir y que la gente no se meta en lugares vulnerables porque a veces profundizan el problema del accidente”, explicó Serra.

El rol clave del cajero

La demanda de tránsito actual -que ronda los 12 mil vehículos diarios- exige una capacidad de gestión, tanto de mantenimiento como de atención de cualquier incidente que implique una problemática para la circulación.

La guardia permanente está integrada por unas 20 personas, entre operadores y cajeros del peaje. “Ante un siniestro, el cajero se transforma en un auxiliar de emergencia; por ejemplo, corta el tránsito. El peaje y la barrera son herramientas esenciales de seguridad para dominar un siniestro. Ésta es una ventaja que tenemos sobre todo el resto de las autopistas, donde los peajes sólo actúan como punto de cobro; nosotros podemos regular el tránsito a partir de una orden que recibe el cajero del operador de cerrar la caja, bajar la barrera y explicar a los automovilistas lo que está sucediendo. Y si es necesario auxilian, por ejemplo, en caso si hay que hacer una maniobra de RCP”.

La 168, trampa sin salida

Sin caminos alternativos, el tramo de la Ruta Nacional Nº 168 que une el Túnel con el puente Oroño, con guardarraíl continuo, puede convertirse en una trampa ante un siniestro.

“Cuando se produce un accidente, enseguida se congestionan los dos carriles porque no hay un camino alternativo y hay puentes que no tienen banquina. Tenemos que entender que estamos atravesando el valle aluvional del río y tenemos agua y puentes por todos lados. Los guardarraíles continuos son un problema porque, si bien se pueden sacar, ante un accidente, tenés minutos y no llegás. Es una gran debilidad y estamos intentando que Vialidad entienda que necesitamos alternativas para cruzar”, explicó Pablo Serra, director por Santa Fe del Túnel.

11.447

mil vehículos

por día circulan por el túnel aproximadamente; 10 mil son automóviles.

17

es la hora

de mayor tránsito.

38.111

vehículos

circulan los fines de semana.

El dato

Baja siniestralidad

Según los indicadores que mide la Asociación Mundial de Carreteras, el túnel subfluvial Raúl Uranga - Carlos Sylvestre Begnis tiene la más baja siniestralidad de túneles bidireccionales del mundo de los últimos 15 años. De hecho, hace 9 años consecutivos que no se registra una víctima fatal en un accidente en el viaducto; en 2004 (después de 35 años de funcionamiento) se produjo el primer muerto. En total, hubo cinco muertos con tres siniestros, dos ocurrieron en 2004 y uno en 2008.