Ganó el mejor...

Al Unión que no se vence le tiraron chapa y goles

Fue un partidazo entre dos equipos diferentes. San Lorenzo, más técnico y ofensivo, fue un justo ganador ante un Unión de irrenunciable capacidad de esfuerzo y sacrificio.

Al Unión que no se vence le tiraron chapa y goles

El último gol de San Lorenzo, que selló el resultado más allá de que luego vino el descuento de Vadalá. Cauteruccio empuja la pelota ante la estéril estirada de Rolle. Nereo palpita el desenlace.

Foto: Télam

 

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a Buenos Aires)

Los protagonistas resaltaron el Unión del “palo y palo”. Pero está claro que ese contexto, el de “palo y palo” no es el indicado para enfrentar a un equipo de mayor jerarquía individual. En todo caso, el Unión del “palo y palo” fue un equipo digno, que como se dice comúnmente en la jerga futbolera, vendió cara su derrota. Eso escapa a cualquier discusión, porque es un ADN que tiene este equipo (el de dejar todo en la cancha, aunque no tenga mucho, a veces, para dar). Pero en una cancha como la de San Lorenzo y ante un equipo tan ofensivo, el “palo y palo” no era la mejor elección desde el punto de vista estratégico. Y de hecho que no lo fue en el primer tiempo, porque Unión no salió a cambiar ataque por ataque, sino que esperó a San Lorenzo en la mitad de la cancha y trató de cortar allí el circuito futbolístico que tuvo un eje incuestionable y figura del partido: Ortigoza.

El “palo y palo” se dio a partir de los 7 minutos del segundo tiempo. Obligado por las circunstancias, Unión tuvo que arriesgar. Ese “matar o morir” fue absolutamente entendible, pero también desnudó falencias defensivas que lo llevaron a sufrir tres goles. Se notaron ante un rival que recién pareció querer que se cerrara el partido en la parte final cuando entró Mercier por Cerutti (volante defensivo por delantero), pero que nunca resignó atacar porque en cancha siempre tuvo un “9” de área (Blandi o Bergesio), un delantero como Cauteruccio, un volante ofensivo como Blanco y en los últimos minutos del partido, otro “10” como Romagnoli.

No estuvo mal planteado de arranque el partido. Y la impresión que uno tuvo es que el gol de San Lorenzo llegó en un momento de control total del partido por parte de Unión. Esto fue un mérito, porque enfrente hubo un rival al que el fútbol argentino se desacostumbra. Netamente ofensivo, San Lorenzo jugó con tres delanteros a la vieja y desaparecida usanza (dos wines y un centrodelantero de área), más dos “llevadores” (Ortigoza y Blanco) que colaboraron con un incansable Mussis en la contención. Unión logró cerrar bastante bien los caminos hacia el arco de Nereo, más allá de algunos contratiempos en el primer tiempo (que se agudizaron en el segundo) de Zárate para marcar a un encarador y habilidoso Cerutti. El gran error de Unión se cometió en el gol de San Lorenzo, con una barrera que inexplicablemente se abrió para que la pelota pasara y se metiera ante un sorprendido Nereo Fernández. Iba casi media hora de un partido en el que San Lorenzo tenía más la pelota, pero no la usaba convenientemente. Y Unión, sin atacar mucho, amagaba con complicarlo en la medida en que encontrase esa precisión que muchas veces le faltó.

El gol de Blandi —cabeceando muy solo en otra acción defensiva inexplicable de Unión—, hizo que naciera otro partido. Un partido que Unión, desde el vamos, no convenía que se armara. Pero las circunstancias lo llevaron a que así fuera. Usted, lector hincha de Unión, se preguntará: ¿y entonces?, ¿cuál es la explicación por la que en ese mini-partido de poco

 
D8-B-11-12-2016_BUENOS_AIRES_SAN_LORENZO_Y.jpg

Ezequiel Cerutti, un nombre que en algún momento se mencionó en Unión, fue uno de los jugadores desequilibrantes que tuvo el partido. Y Nahuel Zárate lo sufrió.

Foto: Télam

¿Dos penales?

Unión protestó dos jugadas que fueron dudosas en el área de San Lorenzo. Una se produjo en el primer tiempo, cuando Godoy ingresó al área y lo pisaron. La otra se produjo en el segundo tiempo, ya en el final del partido, cuando Leo Sánchez abrió hacia la derecha, Mercier quiso dominar la pelota y luego de pegarle en el pie de apoyo, dio en su mano.

En esta jugada, el árbitro Laverni estaba bien parado y posiblemente advirtió la acción, pero entendió que no hubo ninguna intención de parte de Mercier de aprovecharse de su mano para sacar una ventaja.

más de media hora, Unión convirtió dos goles y San Lorenzo uno?, por esas cosas que tiene el fútbol, porque a Unión le llegaron muchísimo en esa parte final y San Lorenzo —convengamos algo: es el equipo más ofensivo del fútbol argentino— falló en la definición. De lo contrario, el resultado habría sido más abultado. Seguramente.

Los dos descuentos de Unión llegaron en momentos clave. Y además, en pasajes desfavorables en el trámite. El de Soldano le dio vida cuando faltaba más de un cuarto de hora. Y el de Vadalá (golazo) se dio en la jugada posterior al 3-1 de Cauteruccio que parecía definir el partido. Es cierto que Anselmo y Rolle tuvieron dos ocasiones, pero sería injusto ponerlo por arriba de otras que le pudieron dar una diferencia superior a San Lorenzo. El resultado está bien. San Lorenzo tuvo un conductor como Ortigoza y delanteros desequilibrantes como Blandi y Cauteruccio que marcaron diferencias a su favor tanto en la generación del juego como en la creación de situaciones claras de gol. Eso alcanza y sobra para justificar la victoria de San Lorenzo.

Para Unión, queda como aliciente el hecho de resaltar el amor propio y la voluntad para no dejarse caer ante la adversidad del trámite y del resultado. Pero perdió bien. Y enfrente tuvo a un rival que supo marcar las diferencias futbolísticas que hay entre los dos. San Lorenzo respalda sus ambiciones en un plantel de mayor jerarquía que el de Unión. Y eso se notó en la cancha, más allá del esfuerzo tatengue.

D8-C-DYN507.jpg

Se esfuerza De Iriondo para frenar a Cauteruccio, una de las figuras junto al “Gordo” Ortigoza, el más claro e inteligente de todos los que entraron al campo de juego del Nuevo Gasómetro.

Foto: DyN

síntesis

San Lorenzo 3

Unión 2

Cancha: San Lorenzo.

Árbitro: Saúl Laverni.

San Lorenzo: Torrico; Paulo Díaz, Angeleri, Caruzzo y Más; Ortigoza, Mussis y Blanco; Cerutti, Blandi y Cauteruccio. A.S.: Navarro. Estuvieron en el banco: Senesi, Merlini y Conechny. D.T.: Diego Aguirre.

Unión: Nereo Fernández; Brítez, García Guerreño, Sánchez y Zárate; Algozino, De Iriondo, Rivero y Godoy; Soldano y Gamba. A.S.: Castro. Estuvieron en el banco: Sandona, Mauro Pittón y Villar. D.T.: Juan Pablo Pumpido.

Goles: en el primer tiempo, a los 29 m Cauteruccio (SL). En el complemento, a los 7 m Blandi (SL), a los 28 m Soldano (U), a los 37 m Cauteruccio (SL) y a los 39 m Vadalá (U).

Cambios: en el segundo tiempo,a los 11 m Role (U) por Godoy; a los 20 m Vadalá (U) por Algozino; a los 31 m Bergesio (SL) por Blandi; a los 32 m Mercier (SL) por Cerutti; a los 39 m Romagnoli (SL) por Ortigoza y a los 40 m Anselmo (U) por Gamba.

Amonestados: en Unión, Leonardo Sánchez y Zárate.

Bajo la lupa

NEREO FERNÁNDEZ (5).- Poco y nada que hacer en los goles. Se le abrió inconcebiblemente la barrera en el primero y tanto Blandi como Cauteruccio lo “ejecutaron” en los otros dos.

BRÍTEZ (5).- Había jugado un primer tiempo aceptable pero se empezó a caer en el segundo, sobre todo cuando le hicieron el 2-1 en forma casi permanente en la parte final del partido.

GARCÍA GUERREÑO (5).- No tuvo la seguridad de otras tardes. Se olvidó de Blandi en el segundo gol, la pelota lo sobró y el delantero aprovechó para clavar el cabezazo. Pudo marcar un gol con el partido 0 a 0.

LEO SÁNCHEZ (5).- Terminó jugando de “9” y empujando, pero fue otro al que le faltó seguridad, a veces también complicado por los problemas de Zárate para clausurar su sector.

ZÁRATE (4).- La idea de Pumpido fue darle marca al sector, pero la realidad es que Zárate perdió mucho más de lo que ganó con Cerutti.

ALGOZINO (5).- Mucho despliegue y atención a la subida de Emanuel Más. Lo que le faltó fue involucrarse un poco más en el juego.

DE IRIONDO (5).- Otro que corrió muchísimo y hasta se advirtió cierto cansancio en el final del partido. Trató de encimar a Ortigoza pero se le hizo imposible.

RIVERO (6).- Trató de darle un poco de manejo al equipo y por momentos lo consiguió. Tuvo que ser permanente rueda de auxilio para De Iriondo, atento a las subidas de Blanco y Ortigoza para sumarse a los delanteros.

GODOY (5).- No estuvo tan preciso, al igual que Rivero, en las jugadas de pelota quieta. Se fue cayendo con el correr de los minutos.

SOLDANO (6).- Tuvo la cuota de gol que se está haciendo costumbre en los últimos partidos, las corrió a todas y tuvo pasajes en los que exigió.

GAMBA (5).- Es otro de los jugadores de Unión que se salva por el despliegue y no tanto por el juego.

ROLLE (6).- El equipo creció futbolísticamente a partir de su ingreso. Metió un lindo centro en el gol de Soldano. No llegó a cerrar en la jugada del tercer gol de San Lorenzo.

VADALÁ (6).- Otro que entró bien, metió un golazo (se sacó de encima la marca de Angeleri y la clavó) y hace méritos para jugar más de titular. Hasta ahora, lo hizo poco.

ANSELMO.- Pocos minutos en la cancha, pese a que tuvo una situación clara y la pelota rozó en un defensor y se fue al córner.