Línea directa

El mal servicio del transporte urbano

VECINOS DE Bº EL POZO

“Nuestras autoridades, que fueron votadas para representarnos y ocuparse de los problemas de la ciudadanía, tienen que proponerse solucionar los graves problemas que tenemos los usuarios de transporte urbano de pasajeros. Hoy estuvimos esperando, muchísimos vecinos de barrio El Pozo, el coche de la Línea 2, un día de semana, 45 minutos, para ir al centro (desde las 8 a las 8.45). Consultábamos al famoso Cuándo Pasa y decía: ‘sin próximos arribos'... Entraron como 5 coches con rumbo a Rincón... Así las cosas, por supuesto, en todas las paradas había un mundo de gente; inclusive en la fecha ya los coches empezaron a ingresar a la ciudad universitaria, donde había ‘una ciudad' de estudiantes esperando para tomar ese coche. Viajamos peor que animales y llegamos tarde a cumplir con nuestras obligaciones. ¿Hasta cuándo vamos a vivir así?, ¡cada día es peor! El que no tiene auto, moto, bicicleta, o no puede usarlos por equis motivos tiene que sufrir este tipo de garrones sistemáticamente”.

Caos de tránsito

JERÓNIMO

“Quiero agradecer al diario la posibilidad que nos da de expresarnos, para a veces quejarnos y otras veces para aportar ideas. El domingo por la noche fue un caos la salida de la Costanera Este, de ATE, de barrio El Pozo, toda la rotonda y esa parte de la Ruta 168. La verdad, una vergüenza, una hora y media adentro de los autos, con chicos, menores y con mayores. Se andaba a paso de hombre, había autos mal estacionados, gente que se mandaba a contramano en la rotonda. Solamente había dos inspectores que, pobres diablos, ponían lo mejor de sí pero no alcanzaba. A mí se me ocurrió una sugerencia al respecto: que la Municipalidad intervenga en lo que es la Ruta 168 desde El Pozo hasta el puente Oroño, que se haga una avenida, que se reduzca la velocidad y se pongan semáforos, para que esto no vuelva a suceder. Esto no puede haber tomado a la Municipalidad por sorpresa, porque ATE hace 10 años que está, la gente que tiene casaquintas hace 50 años que las tiene. El supercenter a la altura de El Pozo hace 20 años que está. Es decir, hace 10 años que quienes están en la Municipalidad son gobierno, de modo que esta situación no los toma por sorpresa. Que se haya producido ese caos vehicular es fruto simplemente de que no se previó. Como todo en Santa Fe: se corre detrás de los problemas. El que es inoperante, que renuncie, porque nos sale muy caro mantener el sueldo de alguien así. Muchas gracias por el espacio”.

Caños abandonados: delitos y basural

ROBERTO ANTONIO CAMPOS

“Me uno a los reclamos realizados por los vecinos, tanto en el diario como por televisión. Hace un año que hay 280 caños de cemento de desagües parados en Llerena y Alvear, en la ciudad de Santa Fe. Los mismos tienen que ser conectados a una red de desagües existentes en la zona. La Municipalidad los dejó allí sin ninguna explicación hasta la fecha de por qué no se hace la obra. Eso ha pasado a ser un nido de delincuentes que a toda hora del día asaltan a personas que transitan por el lugar. Estos delincuentes, la mayoría drogados y faltos de toda esperanza de que vuelvan atrás en sus fechorías. Vecinos ya han llamado a la Municipalidad e intentado tener una audiencia con el intendente y el Ing. Felipe Franco, sin tener novedad alguna a la fecha. Los caños siguen ahí paraditos, a la espera de que se sigan produciendo hechos nefastos. Hace pocos días, la policía secuestró allí una moto robada y documentación de una dama de las inmediaciones, que había sido asaltada pocos días atrás. Los hechos siguen, hay ratas y acumulación de basura, tanto en el interior como en el exterior de los caños. La Municipalidad sigue pasando por el lugar sin siquiera tomar las medidas de precaución para ver qué van a hacer con esos caños. Los vecinos de la zona estamos cansados de solicitar entrevistas a las autoridades, especialmente a Corral, y no las obtenemos. Por favor, esperamos una respuesta del señor intendente, a la brevedad. Gracias”.

Mano dura con la droga

CARLOS

“Un mensaje para las autoridades de todos los órdenes, que no pueden controlar el narcotráfico. Yo, si tuviera poder, al narco que es sorprendido con determinada cantidad de marihuana le daría cien años de cárcel. Para los señores que consumen, en todos lados, en los barrios: cinco años de cárcel. Entonces, así podría terminarse con el problema. En cambio, si se le quita la droga al delincuente y se lo deja ir, el problema no se termina más. Acá hay que poner mano dura, cien años para los más grandes, cinco para los más chicos, y así sucesivamente. Lo que pasa es que el gobierno mira para otro lado y la policía también... Tiene que haber una decisión política... Fíjense en barrio El Pozo: por las noches hay muchos jóvenes que deambulan drogándose, pero no pasa nada, porque total es todo libertad... Yo creía que Macri iba a cambiar todo esto, pero no cambió nada, sigue la joda, el libertinaje. Gracias a El Litoral por la posibilidad de comunicarnos”.