Pesadilla en barrio Candioti
Encapuchados de madrugada
Un grupo de sujetos tomó por asalto una vivienda de calle Necochea, en cercanías de la Plaza de las Banderas. Redujeron a una mujer de 70 años. Le llevaron gran cantidad de pertenencias.
El desorden que provocaron los ladrones en distintos ambientes en su búsqueda de dinero y objetos de valor.
Fotos: Danilo Chiapello
Danilo Chiapello
Una pesadilla en tiempo real fue lo que vivió una vecina de barrio Candioti Norte cuando despertó con ladrones dentro de su dormitorio.
La dramática secuencia se produjo el domingo a las 4.30 en una vivienda de calle Necochea, en cercanías de la Plaza de las Banderas, donde reside una mujer de 70 años (quien prefirió hacer reserva de su identidad).
“Yo estaba durmiendo y de golpe me despierto con dos personas en mi dormitorio. Estaban encapuchadas, con guantes y vestidas de negro. También tenían linternas”, dijo esta mañana la mujer en diálogo con El Litoral.
“Me redujeron con amenazas aunque no me ataron. Después me dieron vuelta la casa buscando dinero y otros objetos. Me preguntaron si tenía armas. Sospecho que eran personas jóvenes y tenían botines o ‘borcegos’, por las suelas que quedaron marcadas en distintas partes”, agregó.
La dueña de casa explicó que los intrusos “llegaron por la parte de atrás de la casa. Violentaron una reja y entraron. Después se fueron por la puerta del frente que da a calle Necochea”.
Mi casa es “Kosovo”
La actividad de los delincuentes dentro del domicilio tuvo una intensidad singular, a punto tal que la víctima dijo que “mi casa ahora parece Kosovo”.
“Estuvieron una hora exactamente, porque se fueron a las 5.30. Buscaban dinero, pero yo no tengo dinero. Igual ellos me decían que me quede tranquila, que no grite, que no levante la cabeza y que no hable”.
“Esto no fue un robo ‘al voleo’. Sin dudas que tenían todo planificado”, reflexionó la dueña de casa.
Trampa con dólares
El hostigamiento contra la víctima incluyó también una trampa.
“En un momento dado apareció uno de estos tipos con unos billetes de dólares. Me dicen ‘¡viste que había plata, decí donde hay más!’. Pero yo me sorprendí por eso. En el momento pensé: ¿Dios mío de dónde sacaron eso? Acá no hay dólares, les repetí. Deben haber visto mi cara porque enseguida desistieron. Después me di cuenta de que era una trampa.
Me bajaron de la planta alta y me dejaron encerrada en el baño. Cuando no sentí más ruidos me di cuenta de que se había ido. Para mí que alguien los estaba esperando”.
En cuanto a la situación del barrio, la mujer indicó que “esta zona está siendo muy castigada con el tema de los robos. Todas las semanas uno se entera que le entraron a algún vecino. Además de los asaltos que se producen en la calle. Está muy difícil la situación en materia deseguridad”, cerró.
“De ahora en adelante voy a tener que extremar las medidas de seguridad. En este barrio hay muchos hechos delictivos”, agregó la mujer.
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