EN ARROYO LEYES

Tres noches de puro folclore

La vigésima edición del festival Teófilo Madrejón se desarrolló este fin de semana en el distrito costero.

Silvia Mugica

Desde el viernes hasta anoche tuvo lugar en el Campo de Deportes de la Asociación Vecinal Arroyo Leyes (Ruta Provincial Nº 1 kilómetro 14,5) el tradicional encuentro folclórico.

En la primera jornada, los fuegos de artificio dieron la bienvenida a los Centros Tradicionalistas Centinelas de la Costa, Por Mi Gaucha Juventud y Lanceros de la Federación, con la Patrona de Arroyo Leyes Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. Luego, las estrofas del Himno Nacional Argentino fueron interpretadas desde el escenario Carlos Monzón por María Marta Reñé.

La conducción estuvo a cargo de María Elena Leguiza y Santiago Rinaldi. En la apertura, la danza fue protagonista de la mano de la Academia de Danzas Horizonte Argentino (Asociación Vecinal Arroyo Leyes) con el Grupo de Danzas invitado, General Paz (General Paz, Buenos Aires).

Desde Esperanza, Ángel el Recitador trajo sus glosas: “El impenetrable” y “Sueño del padre” fueron algunos de sus recitados, acompañado por Javier González y Javier López.

Nuevamente, los bailarines coparon el escenario, con el cuadro de danzas estilizadas a cargo del Grupo de Danzas La Huella de Calchines, dirigido por Emanuel Bianco.

Trayendo clásicos temas del cancionero popular llegó Luciano, quien, desde Recreo y acompañado por Marina Soledad, Javier Ojeda y “El Mago” Fabián interpretó “Zamba para olvidarte” y “Las dos puntas”, entre otros.

María Luz Samela se sumó con “Te vengo a preguntar” y “Yo soy hijo de esta tierra”, entre otros temas, acompañada musicalmente por Julio Luna y Néstor Vallejos.

“Barranca arriba” y “Pueblo del sol”, entre otros temas, fueron los seleccionados por el Grupo Acuarela. Avel Córdoba y Rubén Raffo, de Santa Fe, matizaron con sus composiciones la primera luna.

También llegó el Grupo La Bordona, de la Biblioteca Popular de Santa Rosa de Calchines. Junto a Emanuel Bianco, los más chicos interpretaron con sus instrumentos temas como “Solita y sola”, “Laguna Totora” y “Yo vendo unos ojos negros”. Agustina y José Cisterna, Sol Molet, Victoria Schmit, Delfina Hernández y Brandon Ceballos impregnaron el escenario de talento.

Jugando de “local”, el solista Orlando Gauna acompañado por Leonel Manfrin dejó su huella con temas de su autoría, como “Tengo tu amor” y “Arroyo Leyes”.

Luego, el puñado de canciones traído por Sergio Andreu se hizo presente junto al acompañamiento musical de Adriano Almada. “Canción de las cosas simples” y “El antigal” fueron parte del repertorio.

Cerrando la primera jornada, el Grupo Mixtureros marcó su paso por el Teófilo. Martín Jovellano, Alejandro Bagnaroli, Javier Ramonda y Leonardo Vanrrell interpretaron, entre otros clásicos, “Amores como el nuestro” y “Candombe para José”.

Segunda luna

Uno de los números de la segunda noche fue la Academia de Danzas Horizonte Argentino que, bajo la dirección de Sofía Hek y José Arteriza, entregó su colorido con un cuadro de danzas sureñas.

Poco después, la presencia de Alberto Maidana Luna mantuvo el silencio de la concurrencia con recitados como “Allá en la pampa del cielo” y “Cuatrero”. Con un emotivo mensaje, la Academia de Folclore para personas discapacitadas de la Asociación Civil Uncadein (Un Camino de Integración), de Santo Tomé, acaparó la atención de la platea de la mano de su creadora, Natalia Baigorria, profesora de folclore y psicopedagoga, junto a los profesores Florencia Patiño y Hugo Guerzovich.

Nuevamente, el baile brilló sobre el escenario de la mano del Grupo de Danzas de Adultos San José (San José del Rincón) y su cuadro de danzas cuyanas.

El primero en desplegar con su voz el cancionero popular fue Sergio Echagüe, que con una acertada selección de zambas, valses peruanos y carnavalitos mantuvo encendida la llama de la alegría en la gente. Arroyo Leyes compartió otro de sus representantes musicales, en esta oportunidad, el grupo Turmalinas, integrado por Loana y Nahiara Ayuso, en voz; Emiliano Rotschy, en teclado; Manuel Descalzi,en violín, y Valentín Rodríguez, en guitarra.

El dúo Arpegio abrió su presentación con la chacarera “La tentación”. Jorge Farías, Luis Gonzáles junto a Juan Zárate, artistas oriundos de San Jorge, continuaron la fiesta con zambas y rasguidos dobles.

Desde San Carlos, el grupo Turay, integrado por Carla Vallejos, Damián Miranda, Javier Díaz y José Luis Morales compartió la cueca “Qué mala suerte tengo” y la “Chacarera para mi vuelta”, entre otros temas.

Representando a San José del Rincón, Pedro Romero interpretó “Sin rencores ni reproches” y “Amor juraste”, entre otros, acompañado instrumentalmente por Santos Coronel y Horacio Gallo. Luego, dirigidos por Norma Moyano y Carlos Martín, el Ballet Folclórico General Paz (Buenos Aires) compartió con virtuosismo un cuadro chayero.

Desde Colastiné Norte, el chamamé dijo presente de la mano de Corazón Litoraleño. Integrado por Pablo, en voz; Quique, en acordeón, y Pablo, en teclados, el grupo trajo temas como “Granja San Antonio” y “La Ruperta”, entre otros, y a puro sapucay se despidió del fervoroso público.

En medio de un clima festivo que se sostuvo hasta el final, Walter Stoffel, Marcos Castillo, Benjamín Menéndez, Iván Reynoso, Pedro, Marcos y Franco Tolaba, integrantes del grupo Los Towal, cerraron la jornada con mucha energía. Música del noroeste como sayas, tinkus y carnavalitos entretuvieron a la concurrencia. Los músicos, oriundos de Monte Vera, dejaron con ganas de más fiesta a los que se quedaron hasta el último minuto de show.

Hasta la próxima

El ingreso al predio de los Centros Tradicionalistas de Arroyo Leyes y San José de Rincón junto a la imagen de la Virgen marcó el inicio de la última luna. La Academia de Danzas Horizonte Argentino entregó un cuadro de danzas del Noroeste argentino, homenajeando al carnaval. Los últimos minutos de baile lo compartieron con la gente, al bajarse del escenario y elegir a varias personas del público para danzar en ronda junto a ellos. Ahí nomás, prolongando esa algarabía, llegó el Grupo de Danzas General Paz, embajadores musicales que desde Buenos Aires trajeron un cuadro de danzas instrumentales.

El primero de los artistas en compartir su canto fue Sergio Buscemi, “El gaucho malvinero”. Con temas como “Héroes santafesinos” y “Volver en guitarras”, el santotomesino acercó su mensaje.

Nuevamente, la danza copó el escenario gracias a la destreza del Grupo de Danzas Calchines (Santa Rosa de Calchines), con un cuadro de danzas de proyección.

Otro de los artistas que vienen acompañando desde hace años al festival es Lito Carmona, quien con sus recitados “La semilla”, “Quiero expresar lo que siento” y “Carancho” dijo presente en esta nueva edición, acompañado por su hijo Marcos.

De la mano de un repertorio festivalero, la santotomesina Antonela Prochetto hizo poblar la pista de baile con temas como “Sacha puma” (escondido) y “Salamanqueando pa' mí” (chacarera doble), entre otros, junto a León Collasius y Sergio Buscemi.

Desde Colonia Rivadavia, llegó el grupo Los Farolitos del Chamamé. Con temas como “El matrero”, “Km 11” y “Don Gualberto”, Natalia Ottonelli junto a Erik Alzugaray y sus hijos, Matías y Mauricio Farioli, hicieron a más de uno soltar algún sapucay al viento.

Otro de los números celebrados fue el Grupo Cantares (San Jorge): Jorge Funes, Mauricio Cinalli, Mario Benito, Roque Pautazzo y Dante Álvarez supieron sostener con altura el clima reinante.

Minutos más tarde, la voz de Yamila Zabala se lució sobre el escenario con temas como “Cuando ya nadie te nombre” y “Punta Cayastá”, con la compañía musical de Lucas Goncebat, Federico Sosa, Lucas Patiño, Emanuel Escandel y César Bustos.

Con temas de su propia autoría, Adrián Collino se acercó, acompañado por Nicolás Castillo y Javier Jarich, e interpretó temas de su último trabajo, “Identidad”.

En representación de San José del Rincón, el solista Jorge Blanche, junto a Alcides Sánchez y Santos Coronel se encargó de darle continuidad a la alegría reinante con temas como “La otumpeña” y “De mis pagos”.

Cerrando la última noche, el grupo Mate Cocido trajo un puñado de canciones litoraleñas con las que “estiró” la fiesta hasta altas horas de la madrugada. “Soy el chamamé”, “Chamarrita de una bailanta”, entre otros temas fueron interpretados por Manuel Caña, Sebastián Caffaratti, Gastón Arias y Leandro Goldsack. Ya sobre el final, con las primeras horas del lunes asomando, fue anunciado que el premio “Canoita de Oro” de este año fue para el cantautor Orlando Gauna.

Premios Revelación

En la primera noche fue para el grupo La Bordona; en la segunda, Los Towal y en la tercera, el ganador fue el grupo Cantares.