editorial

El accionar de Los Monos repercute en Santa Fe

  • Se suman evidencias sobre las implicancias del accionar de la banda narco rosarina en la capital de la provincia.

La noticia sorprendió a todos. La Justicia provincial absolvió a los tres principales acusados por el crimen del líder de Los Monos, Claudio “Pájaro” Cantero, ocurrido el 26 de mayo de 2013. Se trata de Luis “Pollo” Bassi, Milton Damario y Facundo “Macaco” Muñoz. Los mismos que hace poco más de una semana fueron baleados mientras efectivos del Servicio Penitenciario los trasladaban desde Rosario a Coronda.

Esta situación abre, a partir de ahora, una serie de profundos interrogantes: ¿tan endebles eran las pruebas contra los acusados, como para que los jueces adoptaran esta decisión?, ¿por qué terminaron siendo juzgados por un homicidio y no por tráfico de drogas?, ¿lo ocurrido es fruto de la llamativa pasividad que durante demasiado tiempo mostró la Justicia Federal en la ciudad de Rosario ante el crecimiento de la banda de Los Monos?, ¿corren peligro las vidas de los tres absueltos?, ¿de qué modo reaccionarán los allegados a Claudio “Pájaro” Cantero?, ¿los narcos intentarán hacer justicia por mano propia?, ¿cómo afecta lo sucedido a la Justicia santafesina y a los organismos de seguridad?, ¿cuál es el escenario que se les plantea a los vecinos de Rosario?

Lo que a estas alturas de las circunstancias resulta evidente es que el accionar de estos grupos narcos trascendió los límites rosarinos y se extendió no sólo en el resto de la provincia, sino también en provincias limítrofes.

Durante los últimos días, se supo que el padre de Martín “Fantasma” Paz -un joven cuyo asesinato derivó en la investigación que llevó a juicio a 40 miembros de la banda de Los Monos- estuvo viviendo primero en un edificio de la ciudad de Santa Fe y luego en un country ubicado en el norte de esta capital, donde no sólo sería dueño de una vivienda, sino también de varios terrenos.

Una fiscal lo llamó a declarar, pero nunca se presentó. Según un informe de la Dirección Nacional de Migraciones, este hombre habría salido del país rumbo a Chile junto a su hija. Por ahora, todo es incertidumbre.

También se supo que existen al menos tres empresas vinculadas con la familia Paz que funcionan en las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé. Una de ellas se dedica a la venta de electrodomésticos y muebles; otra, funciona como transporte de mercadería y fletes; mientras que la tercera presta servicios de remolque, reparación y compraventa de vehículos.

Si bien todas estas firmas fueron legalmente constituidas, se investiga el movimiento y el origen de fondos para determinar si pueden tener algún tipo de relación con el narcotráfico.

Tantas son las sospechas sobre los vínculos de Los Monos con Santa Fe, que esta semana el diputado provincial Carlos del Frade presentó en la Legislatura un pedido de informes al Ejecutivo provincial, para saber “si el Servicio Penitenciario y el Ministerio de Seguridad tienen información sobre el posible vínculo entre el ex jefe de la barra brava de Colón, Quique Leiva -detenido en Coronda-, con el empresario Luis Paz”.

El legislador aseguró públicamente que cuenta con información de fuentes policiales, según las cuales en algún momento el ex jefe de la barra de Colón y parte de sus hombres habrían brindado algún tipo de servicios a grupos narcotraficantes rosarinos que hicieron pie en el Gran Santa Fe durante los últimos años.

Hasta el momento, no se conocieron respuestas a estos interrogantes. Pero de ser cierto estas hipótesis, quedaría demostrado que cada uno de los personajes en cuestión podría estar relacionado con esta intrincada trama criminal.