Se lamentó: “He matado poca gente”

El atacante de Estocolmo era de EI y había anunciado previamente el ataque

  • Un medio ruso publicó supuestos chats del atacante de Estocolmo en los que el día anterior a los hechos anunció su intención de atentar y luego se lamentó de haber matado a “poca gente”. Dos diarios suecos aseguraron que el sospechoso confesó su culpabilidad y su pertenencia al Estado Islámico.
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El ataque conmovió a una sociedad en la que la violencia es un fenómeno lejano.

Foto: Archivo El Litoral

 

Télam - EFE

“He atropellado a infieles” declaró el ciudadano uzbeko de 39 años detenido como principal acusado del ataque que el viernes pasado causó cuatro muertos, quien dijo haber recibido órdenes directas del EI desde Siria y reclamó el cese de los bombardeos en ese país, según informó el diario sueco Aftonbladet y reprodujo la agencia de noticias EFE.

Tanto ese medio como Expressen, identificaron al detenido como Rakhmat Akilov, de quien las autoridades solo confirman que había llegado al país en 2014 y que tras ser rechazada su solicitud de asilo dos años después, tenía una orden de expulsión y era buscado por la policía desde finales de febrero.

Además, el portal de noticias ruso Politonline.ru difundió una serie de chats que el autor del ataque en el centro comercial del Estocolmo habría mantenido con otros yihadistas rusoparlantes a través del canal Yihad del servicio de mensajería Telegram.

Según este medio, un día antes de atentar, el presunto atacante contactó con un radical tayiko al que anunció su intención de robar un “vehículo grande” para usarlo como arma contra la gente.

“Mañana por la tarde quiero encontrar un vehículo grande para atropellar a la gente”, escribió en un chat frecuentado sobre todo por tayikos que simpatizan con el Estado Islámico (EI) y también consulta sobre “cómo hacer una bomba” y le comenta que ya tiene “cerillas, acetona, gas para recargar mecheros, mecheros y tornillos”.

La conversación sigue el viernes, horas después del atentado, cuando a la pregunta de “¿como estás?”, el uzbeko lamenta haber matado a muy poca gente: “mal, he atropellado a unos cuantos en el centro de Estocolmo, el coche se desvió”.

El presunto terrorista dice que grabó un video del atentado y explica que está en el aeropuerto y que tiene intención de “escapar” de Suecia, pero el radical tayiko, en lugar de ofrecerle ayuda, le pide que cuelgue las imágenes en el chat.

Pese a que según el chat se encontraba en el aeropuerto, el supuesto autor del atentado fue detenido el mismo viernes en el suburbio de Märsta, donde fue apresado al comportarse de forma “extraña” dentro de una tienda, según informó Aftonbladet.

Mientras tanto, hoy al mediodía se cumplió en todo Suecia un minuto de silencia a modo de recordatorio de las víctimas del ataque del viernes.

En el exterior del ayuntamiento de la capital sueca, con las banderas a media asta en señal de duelo, se celebró una ceremonia en recuerdo de las víctimas, a la que asistieron las principales autoridades del país, así como representantes de la policía y del personal sanitario y de emergencia, en reconocimiento a su labor.

“No estáis solos, pensamos en vosotros, toda Suecia está con vosotros”, dijo en referencia a familiares y supervivientes del atentado el primer ministro, Stefan Löfven, quien afirmó que “nuestra democracia triunfará sobre el fundamentalismo”.

El debate sobre expulsiones

Suecia recordó hoy a las víctimas del supuesto atentado terrorista del viernes y se encuentra sumida en un debate sobre la política de expulsiones, después de que se conociese que el supuesto atacante, un uzbeko de 39 años, debía haber sido expulsado del país tras denegársele el permiso de residencia.

Según se supo el domingo, el sospechoso solicitó en 2014 el permiso de residencia en Suecia pero se le denegó en 2016. En diciembre pasado se le notificó que tenía cuatro semanas para abandonar el país, pero desapareció en febrero, cuando la policía empezó a buscarle.

“Si los datos que hemos recibido sobre esa persona son ciertos, tendremos que pedir que alguien asuma la responsabilidad. Sobre todo desde el Gobierno”, afirmó la noche del domingo el líder de los populistas de derechas Jimmie Çàkesson. También la líder conservadora Anna Kinberg Batra pidió responsabilidades al respecto.

Según las autoridades fronterizas suecas, en el país nórdico se busca a 12.000 personas a las que les fue rechazada la solicitud de residencia. También el hombre que en diciembre atacó con un camión en un mercado de Navidad de Berlín, el tunecino Anis Amri, había sido calificado como potencialmente peligroso por las autoridades y contra él se había emitido una orden de expulsión del país que finalmente no fue cumplida. Actualmente siguen bajo arresto dos personas, entre ellas el uzbeko de 39 años, que es sospechoso de terrorismo y asesinato. Nueve de los 15 heridos en el ataque permanecen hospitalizados, según las autoridades.