Desde la industria y el campo

Visiones opuestas por la importación de maquinaria

Mientras que desde la Cámara de fabricantes nacionales manifiestan su preocupación por la creciente importación de maquinaria importada, desde el ruralismo afirman la importancia de una apertura inteligente para crecer.

Fierros. Para algunos se debe preservar a toda costa la mano de obra local. Para otros, una apertura planificada haría crecer la economía. Foto:Archivo

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“Hay algunas luces rojas sobre la importación de maquinaria agrícola”, alertó Raúl Crucianelli, presidente de la CAFMA, entidad que agrupa a más de 220 fabricantes nacionales, “Después de años de estancamiento, nuestro sector está empezando a funcionar bien, pero la importación de equipos afecta al funcionamiento de nuestra actividad. Pasar de una importación totalmente controlada como había sido en otro momento a un descontrol de importaciones sería lamentable”.

Según el directivo, también se da una competencia desleal porque los importados acceden al mismo crédito que los fabricantes nacionales. “Eso no corresponde. Los impuestos de los argentinos tienen que estar afectados a créditos para mano de obra de los argentinos”, advirtió.

En nuestro país hay más de 300 fábricas de maquinaria agrícola nacional, a las que se suman ensambladoras de firmas multinacionales, que importan agropartes y terminan de armar los equipos en nuestro país. Se considera producción nacional cuando se incorpora 60% o más del valor de la máquina de fabricación local . En la región, hay una tendencia a llevar ese porcentaje al 65%. “Ese control debe hacerlo el Estado”, señaló Crucianelli, “y eso es posible, porque no hace falta gran infraestructura ni es nada complicado. El crédito subsidiado con impuestos argentinos debe estar destinado sólo a fabricantes de industria nacional. La otra opción es que paguen las tasas que corresponden sobre un precio de importación que no es esté “corregido”, es decir, que se estén importando a valores por debajo del que normalmente tienen esas máquinas a la venta”.

Apertura inteligente

Por su parte, el titular de la Sociedad Rural Argentina, Luis Miguel Etchevere, se manifestó en las antípodas de las declaraciones del industrial. Consultado por Cable y Diario de Santa Fe en el lanzamiento de la muestra “Tecnópolis federal” , el ruralista se manifestó a favor de una apertura “inteligente”. “No vemos que las importaciones sean significativas porque la maquinaria agrícola argentina es de altísima calidad”, sostuvo. “Es más, hay varias fábricas que están trabajando afuera y exportando”, agregó. Según el paranaense, Argentina es líder mundial en la tecnología de la Siembra Directa, técnica que es elogiada incluso por la FAO (Naciones Unidas por la Alimentación), “porque justamente reduce las emisiones de gases de efecto invernadero al consumir menos combustibles fósiles. Pero de todas formas vale la pena aclarar que no vamos a ir por el mundo solamente vendiendo, porque en la economía el comercio que sirve es el de ida y vuelta, y esto no quiere decir que haya que abrir de un día para el otro indiscriminadamente, pero las economías crecen cuando las negociaciones son de ida y vuelta. Los países nos dicen que en Argentina producimos alimentos de primera calidad (lácteos, carnes, vinos, etc.), pero automáticamente nos preguntan qué nos van a vender a nosotros a cambio. Por eso hay que empezar a pensar en un comercio inteligente, hay integraciones que tardan años, pero tenemos que hacernos la idea de competir”, sostuvo.

Cambios de clima

En otro orden de cosas, manifestó que es necesario estar preparados para los desafíos climáticos que se vienen. “El campo es una multiplicidad de actividades. A partir de la actualización del tipo de cambio y de la apertura al mundo con la idea de volver a exportar, hubo una reacción por parte de los productores muy positiva que incrementó la inversión y la producción”. Según expresó, este año vamos a tener cosecha récord, y se están reteniendo los vientres. “Ya el año pasado crecimos un millón de cabezas de ganado y este año volvimos a crecer un millón de cabezas más. Hay muchas actividades productivas que están incrementando su volumen y mejorando la producción”. También alertó sobre lo que se viene. “Por otro lado, también hay aspectos climáticos que están perjudicando: la realidad es que el cambio climático vino para quedarse, los fenómenos Niño y Niña como consecuencia del calentamiento global son cada vez más intensos y más seguidos, en este momento hay 18 provincias en emergencia”.

A nivel gremial, manifestó que en estos momentos “estamos llevando a las autoridades todas las necesidades de los productores para resolver la coyuntura”, pero que es necesaria una toma de conciencia de toda la sociedad respecto de este cambio climático, no solo por parte de los productores. “A partir de esto vamos a tener estos fenómenos de excesos de lluvias y de sequías, entonces está en nosotros y las autoridades hacer las obras de infraestructura necesarias para poder mitigar sus efectos. En el medio, las declaraciones de emergencia y el financiamiento para que no queden más productores en el camino porque cada vez es un desafío más grande producir a cielo abierto con un clima loco”, finalizó.