el invitado

Salto de calidad triguero

Santiago del Solar

@santiagodelsola

Los empresarios agrícolas, luego de la eliminación del ROEs y derechos de exportación, nos volcamos nuevamente con entusiasmo a producir trigo. En apenas un año la producción argentina pasó de 11,3 a 18,3 millones de toneladas (¡un 62% más!) y se duplicó la facturación de la cadena de valor triguera. Pocas industrias pueden decir que tienen semejante capacidad de reacción.

Pero ahora llegó el momento de buscar acompañar el aumento de volumen físico con más valor para nuestra producción. Tenemos que trabajar en el salto cualitativo. Para eso es necesario dejar de conceptualizar al trigo como un commodity, porque, de hecho, no lo es: el trigo requerido para elaborar pan lactal es diferente al necesario para producir masa para tartas, galletitas o recursos forrajeros. Queremos ser el “supermercado del mundo”. Esa es una visión posible e inspiradora, pero sin la acción correspondiente seguirá siendo solamente una ilusión.

Argentina viene insistiendo con una política ambigua. Por un lado, se alienta al productor a sembrar diferentes calidades de trigo, apuntando a más proteína y calidad panadera, y luego el reconocimiento de ese esfuerzo no se refleja en los diferenciales de precios que paga la molinería. Y en la exportación los diferenciales son solo ocasionales, no una regla general, y menos aún una estrategia de inserción comercial.

Para poder dar el salto cualitativo, es indispensable que los empresarios agrícolas comiencen a recibir el valor agregado en cada uno de los segmentos de calidad presentes en la cadena triguera. De lo contrario, el mensaje que está dando el mercado en la actualidad es siembren pensando solamente en maximizar rindes.

Los empresarios agrícolas tenemos plena capacidad para producir y segregar en chacra, de manera profesional, también para trigo. Trasladando de manera transparente los premios pagados por las distintas calidades a los productores, vamos a alentar la segregación, generar competencia y, en definitiva, aumentar el valor agregado de nuestro trigo en su conjunto.