Crisis en Venezuela
Un grupo de militares se declaró en rebeldía contra Maduro y varios integrantes resultaron detenidos
Un grupo de militares del ejército venezolano se han declarado en rebeldía contra la “tiranía asesina” del presidente Nicolás Maduro, cuyo Gobierno ha declarado que la situación se encuentra controlada.
El grupo de militares aclaró que no se trataba de un “golpe de Estado” sino que se declaraba en rebeldía de la conducción del presidente Nicolás Maduro.
Foto: Captura internet
Redacción de El Litoral
DPA
El pronunciamiento fue encabezado por el capitán del ejército Juan Caguaripano de la 41 brigada blindada en Valencia, a unas dos horas de Caracas, según un video difundido en las redes sociales y medios locales.
Caguaripano se declaró en “legítima rebeldía” en contra de la “tiranía asesina” de Maduro, al tiempo que negaron que esta acción se tratara de un “golpe de Estado”.
Mientras tanto, el dirigente oficialista Diosdado Cabello aseguró en su Twitter que el “ataque terrorista” en Valencia había sido controlado “totalmente” y que existe “absoluta normalidad en el resto de las unidades militares del país”.
Esta mañana un grupo de militares rebeldes intentó tomar la Brigada Blindada 41º, mejor conocida como Fuerte Paramacay y situada en Naguanagua, estado Carabobo.
El dirigente oficialista venezolano Diosdado Cabello denunció que “terroristas” atacaron este domingo un fuerte militar en Valencia, norte del país, y aseguró que la situación ya fue controlada.
“En la madrugada atacantes terroristas entraron al Fuerte Paramacay en Valencia, atentando contra nuestra FANB (Fuerza Armada Nacional Bolivariana). Varios terroristas detenidos”, señaló Cabello en su cuenta de Twitter.
El líder político y miembro de la Asamblea Constituyente del presidente Nicolás Maduro, añadió que tras la incursión fueron desplegadas tropas para “garantizar la seguridad interna”.
Más temprano un grupo de militares disidentes envió un mensaje a la población venezolana en el que se declararon en rebeldía contra el gobierno de Nicolás Maduro. Allí los funcionarios aparecían encabezados por Juan Caguaripano, capitán de la GNB.
“Nos declaramos en legítima rebeldía (...) para desconocer la tiranía asesina de Nicolás Maduro. Aclaramos que esto no es un golpe de Estado, esta es una acción cívica y militar para restablecer el orden constitucional”, afirma Caguaripano.
El hombre aparece junto con otros 15 vestidos de camuflaje, algunos armados.
“Exigimos la conformación inmediata de un gobierno de transición y elecciones generales libres”, dijo supuestamente desde la 41º Brigada Blindada de Valencia.
Desde tempranas horas se escucharon detonaciones en el lugar. La sociedad civil salió a las calles para apoyar a los militares disidentes.
Varios de los rebeldes que ingresaron al Fuerte Paramacay fueron detenidos por funcionarios afectos al gobierno de Nicolás Maduro.
Remigio Ceballos, comandante estratégico operacional de la Fuerza Armada Nacional(CO-FANB), informó que siete disidentes, a quienes calificó de terroristas, fueron detenidos tras el ataque.
Desplazan a la fiscal y asumió un abogado chavista
El abogado Tarek William Saab juró ayer como fiscal general de Venezuela, horas después de que la plenipotenciaria Asamblea Constituyente destituyera a la titular del cargo, Luisa Ortega Díaz, una fuerte crítica del Gobierno.
“Venezuela no será Panamá, no será Guatemala, no será el Chile de Pinochet, de países que fueron intervenidos militarmente. Venezuela será siempre la cuna de libertadores, que salió a liberar pueblos. Saldrá al frente con la verdad y la justicia. Tendrá paz con decoro, con dignidad”, señaló.
Saab, de 54 años, fue juramentado por la presidenta de la Constituyente, Delcy Rodríguez, y al dirigirse a los miembros de la Asamblea acusó a Ortega de permitir la impunidad en las protestas contra el Gobierno, que después de cuatro meses han dejado más de un centenar de muertos.
El nuevo fiscal, un público simpatizante del Gobierno que era defensor del pueblo desde 2014, asumirá de inmediato la conducción del Ministerio Público, cuya sede fue ocupada en la madrugada por soldados que impidieron el ingreso o salida de los funcionarios, incluso de Ortega Díaz.
Saab dijo que Venezuela inicia una nueva etapa con la Constituyente al frente, la cual enfrentará las “amenazas de imperios, así haya sanciones contra nosotros”.
El nuevo fiscal afirmó que la “inacción” del Ministerio Público permitió que la cifra de muertos en las protestas llegara a 121 después de cuatro meses, al tiempo que criticó que en las manifestaciones opositoras se perpetraran “crímenes de odio”.
“Secuestro”
El líder de la Asamblea Nacional (Congreso) de Venezuela, el opositor Julio Borges, denunció que la destitución de la fiscal general Luisa Ortega Díaz por parte de la plenipotenciaria Asamblea Constituyente demuestra el “secuestro” de todas las instituciones del país por un solo partido.
“Nosotros rechazamos y desconocemos la destitución de la fiscal general. Lo que hoy se hizo es nulo, ilegal e inconstitucional, lo está sucediendo en el país es un secuestro de todas sus instituciones por un solo partido político”, dijo Borges en una rueda de prensa.
El líder opositor señaló que la única institución que podía remover a la fiscal y nombrar otro jefe del Ministerio Público es la Asamblea Nacional, que está bajo control de una mayoría opositora y cuyo destino se desconoce una vez instalada la Constituyente.
En su primera medida impulsada tras la apertura del viernes, la Constituyente removió a Ortega Díaz y juramentó en su puesto al defensor del pueblo, Tarek William Saab, un declarado partidario del oficialismo.
La medida fue precedida por una operación militar con soldados ocupando los alrededores de la sede de la Fiscalía General, que impidieron por la fuerza que Ortega Díaz ingresara al edificio.
“La Asamblea Nacional es la única con la capacidad de destituir o nombrar a la fiscal general. Este país no se va a rendir y no nos van a doblegar aplicando la fuerza bruta”, señaló Borges.
Los diputados seguirán sesionando en el hemiciclo del palacio Legislativo, vecino al salón Elíptico, donde se reúne la Constituyente, a pesar de las amenazas o posibles asedios, añadió Borges.
“Nosotros seguiremos haciendo nuestro trabajo y el lunes en la mañana estaremos allí como hemos hecho siempre. Nosotros seguiremos honrando la voluntad de los millones de venezolanos que nos eligieron el pasado 6 de diciembre (de 2015)”, señaló.
“Este no es un Gobierno fuerte, sino de un Gobierno absolutamente podrido sin moral que ha incurrido en violencia institucional”, agregó.
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