Orgullo santafesino

Sig Ragga tocará en Las Vegas

Será esta noche en la entrega anual de los Grammy Latinos. El grupo está nominado en las categorías Mejor Álbum de Música Alternativa por el disco “La promesa de Thamar” y Mejor Canción Alternativa, por “Antonia”.

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El grupo está integrado por Gustavo “Tavo” Cortés, Ricardo “Pepo” Cortés, Nicolás González y Juanjo Casals.

Foto: Gentileza producción

 

Lisandro Plank

Esta noche, el grupo santafesino Sig Ragga se estará presentando en vivo en el Mandalay Bay Convention Center de Las Vegas en el marco de la 18ª entrega anual de los Grammy Latinos. Para esta nueva edición, el grupo integrado por Gustavo “Tavo” Cortés -en voz y teclados-, Ricardo “Pepo” Cortés -en batería y coros-, Nicolás González -en guitarra y coros- y Juanjo Casals -en bajo y coros-, está nominado en las categorías Mejor Álbum de Música Alternativa, por su último disco “La promesa de Thamar” y Mejor Canción Alternativa, por el tema “Antonia”, canción que abre la mencionada producción. En la antesala de una de las presentaciones más importantes en la extensa trayectoria de la banda santafesina, Tavo Cortés dialogó con El Litoral para dar cuenta de cómo palpita una oportunidad tan importante como extraña para los músicos.

—¿Cuál fue su reacción al ser convocados para tocar en vivo en un escenario de semejante magnitud?

—Si ya el hecho de ser nominados, desde la primera vez y todas las veces que ocurrió, nos sacó de lugar, imaginate ahora esto; es algo que es difícil de dimensionar. De hecho, hasta yo hago cierto ejercicio mental de no pensar demasiado, porque también tiene su costado que me apabulla ¿no? Esa cuestión de tener tantos ojos encima y en un contexto que también es muy distinto a lo que nosotros estamos acostumbrados, es algo difícil de digerir. Y por más que sólo vamos a tocar “Antonia”, que es canción que está nominada, lo vamos a hacer en un contexto muy extraño para nosotros. Porque es un lugar bastante comercial y glamoroso, al que tenemos que ir vestidos de gala y todo ese tipo de cosas que nosotros no acostumbramos hacer; todo eso te saca de lugar y estar en Las Vegas también... no sé, la imagen que tenemos nosotros de eso es a través de las películas así que para nosotros es todo un sacudón.

Lógicamente, fue un momento de mucha alegría, por lo que representa, por la oportunidad de que nos conozca un montón de gente, pero bueno, obviamente que pusimos todo en una balanza y dijimos “tenemos que estar”, porque nosotros trabajamos de esto, tenemos la suerte de trabajar de lo que nos gusta, lo cual no es poco pero para eso también tenemos que manejarnos profesionalmente. El hecho de hacer ciertas concesiones, cuidándonos, tratando de preservar siempre lo que hacemos, tomando siempre muchos recaudos y tratando de que no se tergiverse lo que hacemos, es muy importante para nosotros; pero bueno, hay muchas cosas que siempre uno por ahí tiene que hacer aunque no está de acuerdo y creo que eso también es parte de la madurez, de las contradicciones en las que vivimos todos y que no se puede hacer todo tal como uno quisiera... ahora nos queda sacar lo positivo sabiendo que esto representa un gran paso para el grupo.

—La canción que van a tocar es “Antonia”, ¿cómo fue su proceso de creación y por qué lo eligieron como el tema de apertura del disco?

—“Antonia” es una canción que yo compuse cuando me enteré de que mi amigo “el Nico” -guitarrista de la banda-, con el que compartimos toda la vida juntos, iba a ser papá. Para mí, fue como un shock importante porque él es como un hermano más para mí. Y fue tremendo verlo de golpe convertido en papá y en la espera de Antonia le compuse la canción. Creo que también fue como un momento de inflexión. Porque así como los otros discos estuvieron un poco cargados por la pérdida de mis viejos, de mi mamá en el primero y el segundo con mi papá, Antonia vino a traer un nuevo momento de nuestra vida, que tiene más que ver con los nacimientos. Y así como Antonia también llegaron otras vidas a nuestro entorno, y la canción terminó condensando también a la hija de mi hermana, al hijo de Juanjo (bajista de la banda) después, así que es como todo un nuevo momento para nuestras vidas y para el grupo. De alguna forma todo esto inauguró otro estado de ánimo, otra energía para nosotros y por eso terminó siendo la canción que abre el tercer disco que lo compusimos atravesando ese momento de cambios positivos para nosotros.

—Después de un año en el que giraron con “La promesa de Thamar” por diferentes puntos del país y del continente ¿cuál es el balance que realizan de tocar un disco tan complejo en vivo?

—Creo que es algo que seguimos trabajando y que se va actualizando en cada show y cada vez que tocamos las canciones, porque en comparación con las otras, obviamente son muy nuevas y las seguimos madurando, y está bueno que así sea. Además, esto de tocar mucho sirve para ir puliendo cada vez más los detalles y poder ir mejorando en ese sentido. Nosotros también consideramos que es un disco complejo, pero también los discos anteriores fueron un desafío para llevarlos al vivo, más aún si consideramos que cada canción tiene muchos elementos y nosotros somos cuatro nada más. Entonces el hecho de autograbarnos, de trabajar con pistas y en algún punto ensamblar esa especie de orquesta que es como virtual nos hace viable el hecho de llevar los discos al vivo. También nos da mucha libertad no estar sujetos a que somos cuatro y por el contrario, poder inventar la música que queramos y si tenemos deseo de que tengamos 200 tracks sonando, lo hacemos. Tuvimos mucho tiempo pensando y debatiendo eso, acerca de cómo llevarlo adelante, si estaba bueno, si estaba bien, hasta cuestiones morales incluso, y después nos dimos cuenta de que teníamos que hacer lo que se nos cantara y ahí está un poco la identidad de lo que hacemos; porque nosotros componemos de esa manera y lo hacemos así porque es lo que nos gusta y lo que nos gustaría escuchar y tiene esa naturaleza; y a la vez, lo volvemos viable y posible de escuchar en vivo de esa manera. Por suerte, el balance de cada show con las nuevas canciones es positivo en cuanto a cómo lo vive la gente que nos sigue y en cada devolución que obtenemos en los lugares que vamos a tocar.

—Volviendo a la celebración de los Grammys, ¿creen que el hecho de ser convocados para tocar en vivo les da más posibilidades de ser premiados?

—Sinceramente, no estamos pensando en eso. No tenemos ni la menor idea de qué pueda pasar en ese sentido. Yo creo que es muy difícil eso, esto de que nosotros participemos en el evento tocando no creo que garantice nada; algunos piensan que sí, nuestros allegados dicen: “¡Sí! Si van a tocar ahí es porque van a ganar”, pero bueno, ojalá realmente sea así (risas), pero ésta es la séptima vez que nos nominan, y de hecho en cada disco que sacamos nos nominaron y nunca ganamos nada. Pero yo particularmente ya estoy más que contento con tener la posibilidad de tocar ahí en vivo y de que la gente nos conozca haciendo lo que hacemos en vivo y ya con eso estamos muy conformes.

—¿Cuáles son los proyectos para el 2018?

—Para el 2018, ya estamos encarando el cuarto disco, para el cual ya nos encontramos componiendo. Tenemos que ver cuándo nos abocaremos más intensamente en eso y cuando lo grabaríamos. Pero seguro que ya en el verano vamos a terminar de componer y empezar a grabar al mismo tiempo, que es una manera de trabajar que empleamos mucho. Ése, creo, será el proyecto más importante, que se avecina el cuarto disco aunque no podemos saber bien todavía cuándo va a salir. Por otro lado, también está dando vuelta la posibilidad de concretar algún material audiovisual, que sería registrar un show en vivo nuestro, que es algo que nunca pudimos hacer y que nos gustaría mucho, para que también la gente que no tiene la posibilidad de ver nuestro material en vivo pueda también ver ese costado del grupo, que es otra cosa. Y obviamente seguiremos trabajando en todos los detalles de cada show que tiene ver con el crecimiento y la madurez del grupo.