Por la flotación cambiaria
Por la flotación cambiaria
Hubo desinflación sin atrasar el tipo de cambio
Lo expresó Federico Sturzenegger. En el último año, el dólar fluctuó en torno a un valor muy estable.
Redacción de El Litoral
El presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, realizó un balance de sus dos años al frente de la autoridad monetaria. Aseguró que desde la política económica aplicada por la gestión de Mauricio Macri, se logró la “desinflación sin atrasar el tipo de cambio. El tipo de cambio se ha movido durante este período con total flexibilidad. El resultado ha sido una desinflación pronunciada sin que ésta se vea acompañada de apreciación en el Tipo de Cambio Real Multilateral (TCRM)”, lo que significa, a su juicio, que se logró la “desinflación, sin atrasar el tipo de cambio”.
“Durante el último año (el dólar) ha fluctuado en torno a un valor muy estable. La flotación cambiaria garantiza la absorción de shocks externos y resguarda el balance macroeconómico. Es para nosotros un pilar central de nuestro programa económico y gran artífice de que la economía vaya por su quinto trimestre de crecimiento al 1% desestacionalizado sin verse afectado por vaivenes de afuera”, detalló Sturzenegger.
Especificó luego que “la flotación cambiaria es una defensa contra los flujos de capitales de corto plazo. El tipo de cambio flotante ha sido un poderoso antídoto contra los flujos de capitales de corto plazo”, enfatizó.
“Cada vez que el tipo de cambio se aprecia, se habla del tema de las Lebac. Pero cuando el tipo de cambio se deprecia y resulta que las Lebac no eran tan buen negocio como parecía, el tema desaparece del debate público por un tiempo. Hasta el nuevo ciclo. Pero esto que es cíclico en los medios, no lo es en los mercados. Los que arriesgan saben que el tipo de cambio puede barrer con la ganancia de meses en días. Y esto los mantiene a raya”, reseñó.
“Tomando 2016 y 2017 hasta noviembre, a través de la cuenta corriente y la cuenta capital de la economía argentina ingresaron 310.000 millones de dólares brutos (exportaciones de bienes y servicios, turismo en el país, intereses cobrados, colocación de deuda, entrada de capitales y demás), mientras que la entrada neta de capitales para inversiones de portafolio fue de U$S 11.000 millones”, precisó.
“Como ven -explicó- esta es una cifra que no tiene la magnitud relativa que se le suele asignar. Pero lo interesante también es que estos flujos se mueven de manera contraria a los movimientos del tipo de cambio, dándole una sorprendente estabilidad al TCRM”. También afirmó que “la coordinación con la política fiscal ha sido una cuestión abordada y planificada desde el principio de nuestra gestión. Las metas de inflación fueron establecidas en forma consistente con las transferencias que se preveían que el BCRA debería efectuar al Tesoro mientras se llevaba adelante la convergencia fiscal gradual”.
Inflación “normal”
Sturzenegger enfatizó que con esta política económica se avanza “hacia una inflación de país normal. Hace unas semanas dije que Argentina en unos 4 ó 5 años tendría una inflación normal. Una inflación normal hoy en el mundo es una inflación del 2%. Tantas frustraciones hemos acumulado con el tema inflación, tantas alquimias hemos experimentado a lo largo de los años, que muchos interpretaron esa frase como una claudicación en la lucha contra la inflación, pensando que esto demoraba nuestro objetivo de llegar a una inflación de un dígito”, subrayó.
Récord de reservas
El Banco Central informó que las reservas internacionales registraron un nuevo récord al llegar a 55.502 millones de dólares, tras haber aumentado 85 millones respecto al día hábil anterior que también había marcado un máximo histórico de 55.417 millones de dólares.
La variación de las divisas frente al dólar, los títulos externos y otros instrumentos financieros que forman parte de las reservas arrojaron un monto positivo de 51 millones de dólares.En el mercado de cambios, el BCRA no tuvo participación. Por último, se realizaron pagos de servicios a Organismos Internacionales por 66 millones de dólares y un pago por operaciones cursadas a través del sistema SML por un millón de dólares.