La Paradoja según Frigerio

“Una ley que nadie quiere”

El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, sostuvo esta mañana que el gobierno “no va a dudar un instante” en hacer lo que tenga que hacer, en alusión a la decisión de vetar la norma, en caso de que el Senado apruebe la ley que retrotrae las tarifas de luz, gas y agua. “Me cuesta entender qué hay detrás de esta paradoja que va a ocurrir hoy, donde aparentemente están los votos para convertir en ley algo que nadie quiere”, sostuvo Frigerio en diálogo con Radio Mitre.

Para el ministro del Interior hay “esperanza de que esta situación tan irracional que está ocurriendo hoy sea sólo un mal trago y que a partir de mañana podamos seguir construyendo un mejor futuro para la gente”.

“Si sabemos que esta ley no se va a poner en práctica, ¿por qué no discutimos algo para la gente que sí podría ser una solución parcial”, preguntó el titular de la cartera política. Y cuestionó a la oposición porque “lo que se está planteando es que el Congreso es el ámbito donde se fijan tarifas”.

Explicó que diputados y senadores de la oposición se toman atribuciones “que no les corresponden”. Explicó que “los gobernadores tampoco quieren este antecedente de que el Congreso se ponga a hacer algo que no le corresponde.

El funcionario admitió que “puede ser que lograr diálogo sea más complicado a partir de ahora” y elogió la capacidad de la administración macrista de gobernar con minorías parlamentarias. “Somos el gobierno más débil en los últimos cien años en apoyo legislativo, no hay antecedentes de una cosa así. En dos años y medio logramos que la parte más racional del peronismo nos apoyara”, recordó.

El titular del Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda aseguró que “se va a analizar la vía judicial” si el Senado sanciona hoy esa ley que limita las subas de tarifas, aunque eso supondría en principio que Macri promulgue la norma. Aclaró de todas maneras que “tenemos que dar señales al mundo de que no vamos a dudar un instante en lo que tenemos que hacer”.

  • Sabemos que hay una parte de la oposición que quiere que a la Argentina le vaya mal para que les vaya mejor a ellos”

Rogelio Frigerio

Ministro del Interior

Perjuicio a los santafesinos

El ex secretario de Energía, Emilio Apud, explicó que durante el gobierno kirchnerista la regulación nacional sobre Edenor y Edesur impidió actualizar tarifas en Capital y Gran Buenos Aires, cosa que sí hicieron (porque no están en esa jurisdicción nacional) las empresas provinciales como la EPE santafesina o la Epec cordobesa. Así, el valor Valor Agregado de Distribución (el costo de las distribuidoras, como la EPE) llegó a ser en el caso de las empresas provinciales un 700 % más caro que el de Capital y Gran Buenos Aires. Esa diferencia aún es del 400 % según calcula Apud.

El artículo 17 del proyecto que votó Diputados y ahora apoyan el PJ y el kirchnerismo en el Senado establece que “la presente ley no afectará las regulaciones vigentes en las Provincias, los Municipios y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en función de sus facultades jurisdiccionales respecto de los servicios públicos de su competencia”.

Es decir que para el caso de las facturas eléctricas, la norma nacional -votada en muchos casos por legisladores santafesinos de la oposición- sólo favorece a usuarios de Capital y Gran Buenos Aires con costo en los impuestos que se pagan en todo el país y aún cuando esos usuarios tienen todavía hoy un costo de distribución 400 % más barato que el de los santafesinos o cordobeses.

Si la provincia acuerda un mecanismo para emparentar sus facturas con la regulación “nacional”, entonces la provincia deberá afrontar el quebranto entre lo que ya cobró a los santafesinos y lo que la empresa mayorista de energía no le va a devolver.

¿Qué pasa si..?

No se aprueba. El proyecto de ley no puede volver a tratarse este año; así lo dispone el artículo 81 de la Constitución Nacional.

Se modifica. Si es con mayoría absoluta, vuelve a Diputados que puede convalidar cambios o insistir con su texto también por mayoría absoluta. En caso de que el Senado haga cambios con dos tercios de los votos, Diputados debería volver a revisar el texto también con dos tercios o los cambios de la Cámara Alta pasarán como texto al Ejecutivo para definir si promulga o veta.

Se aprueba. Pasa al Ejecutivo que debe definir si promulga la norma o la rechaza. Es una atribución constitucional; para insistir, el Congreso tendría que aprobar por dos tercios de cada Cámara el texto, lo que promulgaría la norma.