En el centro norte provincial

Las lluvias beneficiaron a los cultivos implantados

Aunque escasas, permitieron una muy buena infiltración en los suelos, beneficiando a todo lo sembrado y a las futuras siembras. El sur provincial manifiesta aún áreas con reservas hídricas escasas.

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Campolitoral

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Las condiciones de inestabilidad con precipitaciones durante la semana -que se caracterizaron por su baja intensidad y prolongación-, permitieron una muy buena infiltración en los suelos. Esta particularidad permitió que se cubrieran las necesidades de los cultivos, generando buenas condiciones y beneficiando a todo lo sembrado y a las futuras siembras, dice el informe del SEA que difunde la Bolsa de Comercio de Santa Fe.

Los montos pluviométricos registrados en los distintos distritos de cada departamento, fluctuaron entre 05 y 40 mm, con sectores puntuales de 42 mm.

Trigo

El cultivo siguió manifestando en un 94 % de lo implantado, un estado bueno a muy bueno con muchos lotes en estado excelente; un 5 % en estado bueno a muy levemente regular y un 1 % regular. Este último porcentaje debido a los diferentes eventos climáticos que se registraron hasta la fecha: caídas de granizo, descensos muy marcados de las temperaturas (heladas), áreas con mínimas precipitaciones (déficit hídrico) y temperaturas medias a altas, con variados grados de incidencia y daños, en diferentes sectores (zonas puntuales), del área de estudio. Las precipitaciones registradas recientemente, continuaron sosteniendo la condición del cultivo y cubriendo sus necesidades.

Hasta la fecha el estado sanitario del cultivo continuó siendo muy bueno, sin expresión de enfermedades ni de plagas.

En la semana, antes de la inestabilidad climática, comenzaron a moverse los equipos y cosechadoras para el proceso de cosecha, en los departamentos General Obligado y Vera, que en los próximos días tendría mayor ritmo.

Por otro lado, en la zona sur de la provincia, según la Oficina de Riesgo Agropecuario, las recargas del suelo fueron leves, y siguen predominando áreas con reservas hídricas escasas que afectan al trigo.

Girasol

El cultivo presentó un crecimiento y desarrollo normal, con buena disponibilidad de agua útil en los suelos, tras las nuevas precipitaciones registradas en toda el área, generando muy buenas condiciones en beneficio de los cultivares. Ante ello, un 95 % se encontró en estado bueno a muy bueno con lotes en excelentes condiciones y el 5 % restante en bueno con lotes puntuales regulares, por posición topográfica, aptitud de suelos y grados de enmalezamiento. El tema sanidad continuó en general siendo muy bueno, detectándose la presencia de mildiu, con diferentes grados y porcentajes de afectación en distintos lotes siendo de bajo impacto, hasta la fecha.

Maíz de primera

El proceso de siembra llegó a su fin, lo que representó aproximadamente unas 89.000 ha, con un incremento del 12,36 % en comparación a lo sembrado en la campaña del año anterior, lográndose un aumento de unas 11.000 ha. La siembra fue regulada en su ritmo por las condiciones climáticas que se registraron.

Durante la implantación, las buenas condiciones ambientales y la disponibilidad de agua útil en la cama de siembra y primeros centímetros del suelo, permitieron una buena germinación y posterior desarrollo normal.

En cuanto al estado sanitario del cultivo se encontró muy bien, sin inconvenientes hasta el momento.

Se viene el arroz

El proceso de siembra en el área arrocera tuvo un sesgo de desaceleración en la semana por las lluvias del viernes y sábado, que alcanzaron en promedio los 40 mm. Se logró hasta la fecha, un progreso del orden del 50 % sobre lo proyectado, representado 16.000 ha, con un adelanto del 25 % en comparación a la campaña del año anterior. La intención de siembra sería similar a la superficie sembrada en 2017/2018, unas 32.000 ha. La influencia muy beneficiosa de las precipitaciones registradas sobre lo implantado, comenzó a observarse, con un aumento de la germinación y crecimiento.

Algodón

En esta semana, se continuó con el proceso de siembra, hasta que llegaron las precipitaciones, y se interrumpió temporariamente. Luego se retomó, en la medida en que lo permitieron las condiciones climáticas y edáficas. Las bajas temperaturas de la semana retardaron la germinación de lo sembrado, pero no afectaron el crecimiento y desarrollo de lo ya germinado.