Y al séptimo partido...

El mayor tesoro de Lionel se llama Lionel

El joven DT, que pisó en puntas de pie sin hacer ruido, se fue haciendo fuerte. Su misión final: la Copa América de Brasil.

Darío Pignata

(Enviado especial a Madrid, España)

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Si el fútbol argentino popularizó para todos los tiempos lo de “Paso a Paso” con “Mostaza” Merlo, en el caso de Lionel Scaloni su fórmula fue dedo a dedo. O uña a uña.

Ya se sabe cómo entró, por qué entró y cómo se quedó con el buzo de entrenador.

Debió soportar —como casi todos— el gran tsunami de bronca y desaprobación de un tal Diego Armando Maradona cuando el ex 10 dijo: “No sé si tiene el título de DT y encima nosotros dejamos al fútbol argentino sin el Tata Martino, que se fue a México”. Y hace algunos horas, cuando parecía calmo, el volcán Maradona volvió a entrar en erupción: “¿No lo citó al Kun Agüero?... Este muchacho no debe tener TV...”, dijo Diego en virtud de la gran cantidad de goles ingleses de su pariente.

Scaloni sabe que le van a seguir pegando. Y que su fuerte no son los medios, ni un gran nombre, ni declaratorias que hagan topic.

Como si fuera un parque viejo de diversiones, a Scaloni le tiran “tres tiros por un peso”.

Desde México, de la nada, Ricardo La Volpe compró la fichita: “Si yo fuera Sampaoli, le digo que es un mala leche”.

Y como si fuera poco que peguen los de afuera, también pegan los de adentro, por caso César Luis Menotti, el Director de Selecciones de la AFA. “Yo no hubiera llamado a Messi para estos partidos, que son de prueba. Lo veo cansado, no era el momento de Lionel”. Y luego, disparó peor —como si se hubiera puesto de acuerdo con Maradona— cuando dijo: “Quiero creer que Agüero estará en la Copa América de Brasil”.

Ejemplos, sólo ejemplos de lo que es vivir después del papelón de Sampaoli. Está claro que Scaloni entiende el juego y lo acepta. Todo esto es mejor que acomodar conos con pibitos en Ezeiza.

Más allá de las opiniones “pesadas” (Maradona, Menotti...), el ambiente del fútbol argentino le fue abriendo el crédito a Scaloni con este puñado de partidos donde presentó credenciales.

Es que refrescó caras e ideas. Para adentro y afuera su gran banca es “Chiqui” Tapia. Eso está claro.

Pero lo que tendrá al Wanda Metropolitano como testigo será su mejor jugada en su ciclo: lo mejor de Lionel es Lionel. La mejor carta de Scaloni es tener a Messi, volver al “10” en su estado natural, con la celeste y blanca.

Sin Higuain, Romero y Kun, la idea instalada de “Club de Amigos” se fue desarmando. Y con las lesiones de Otamendi y Di María, mucho más; al menos para este juego del gran retorno de Messi.

Voy a contar algo de lo que El Litoral fue testigo ayer en estas cuatro imponentes torres en Madrid Norte donde se levanta el cinco estrellas de la Selección. En el lugar, donde antes estaba la villa deportiva del Real Madrid, la Selección recuperó la idea de “equipo de la gente”. Saludaron, dieron fotos, autógrafos y posaron.

Cuando El Litoral posó con Lionel Scaloni, el DT había salido a caminar bajo el sol de Castellanas como uno más. Hay humildad, perfil bajo y simpleza en el mensaje. Este enviado de El Litoral hizo de nexo para que el querido Sergio Torres acercara sus discos nuevos a varios jugadores de la Selección. La idea era darle el material en mano a Angelito Correa, pero a las 20 se cortaron los celulares. Era la hora de la cena.

Hay un modo Scaloni en las comidas: mesa larga, todos juntos y sin teléfonos. Como era antes.

El joven DT, el Lionel que tiene a Lionel, está en la vieja receta de “formar el grupo primero, después el equipo”.

Messi no será un problema; todo lo contrario. “Te lo juro que el pibe nunca pide nada... en serio. Es uno más”, me confió Claudio Gugnali que lo disfrutó con Sabella.

Está la idea —claramente comprobada en Rusia— que con Messi solo a la Argentina no le alcanza. Por eso en la charla exclusiva con El Litoral, el presidente de la AFA habla de “hay que armar un equipo que lo acompañe a Messi”.

El primer objetivo fuerte es en junio para la Copa América de Brasil. Hoy, cuando Lionel (Scaloni) ponga a Lionel (Messi), se dará el primer paso para reconstruir lo que Sampaoli rompió como un elefante adentro de una cristalería. En mil pedazos.

Está de vuelta el “10”, el mejor del mundo. El que va por la Liga, otro Pichichi, otra bota de oro, más marcas y sueña en la Champions. Vuelve Messi “sólo porque ama esta camiseta”, dijo Tapia. Que pidió cuidar más a los ídolos en el país.

Desde el edificio más alto de Madrid (54 pisos, imponente la vista del Eurostars), Scaloni quedó cerca de mirar las estrellas. Lo encandiló la luz que más brilla en el Planeta Fútbol. Con apenas nueve años de diferencia, el Lionel entrenador de 40 recupera al Lionel jugador de 31. Es el mayor tesoro que encuentra el nuevo entrenador de la Selección Argentina en el fondo del mar, después que Sampaoli hundió el Titanic en Rusia.