“Lobo está”: la iniciativa de MIAA para mostrar lo difícil que es llegar a casa

El Mapa Interactivo del Acoso y el Abuso vuelca sus relatos en una dinámica lúdica que busca evidenciar cómo transitan las mujeres los diferentes espacios públicos. Su recorrido por la ciudad está condicionado por las violencias machistas y los impedimentos espaciales. “Buscamos despertar empatía, sobre todo en los varones.”

15_A_3AEA6D88-71FD-4A54-90A0-7BF0CD5AAEB2.jpg

Desarrollo de la actividad “Lobo está” en una jornada con perspectiva de género realizada por el Colegio de Arquitectos.

Foto: Gentileza MIAA

 

Ornella Pazzi

[email protected]

Con el mismo formato de “El juego de la Oca” y un nombre que invoca recuerdos de incertidumbre y ganas de correr rápido para llegar a “casa”, desde Mapa Interactivo del Acoso y el Abuso crearon “Lobo está”. Las coordinadoras del proyecto en la ciudad de Santa Fe, Yamila Riego y Mariana Salvador, trabajaron en conjunto con la creadoras del proyecto, originario de La Plata.

El objetivo de esta dinámica lúdica, es brindar una representación de la experiencia que viven cotidianamente las mujeres que transitan la calle y los diferentes espacios públicos de la ciudad, para generar consciencia y empatía en hombres y despertar memorias en las mujeres. Esto último es clave para que estas puedan repensar las experiencias machistas que atraviesan cotidianamente en la vía pública, ya que suelen estar naturalizadas.

“Lobo está” no es un juego, no busca que alguien gane, sino generar consciencia social. El participante debe salir de “casa” y transitar las calles de la ciudad para poder volver a la misma. En el transcurso su recorrido se encontrará con diferentes inconvenientes, espaciales y relacionados con el género, tales como: acoso, violencia, obras que no le permiten pasar por la vereda y cuadras no adaptadas para sillas de rueda. Todas estas son situaciones urbanas que niegan la accesibilidad a algunas personas.

Dentro del recorrido en el tablero, se encuentran diferentes casillas “MIAA”, que obligan a recoger una tarjeta y leer en voz alta el testimonio que se encuentra en ella. Todos los relatos son reales, obtenidos a través el mapeo, y tienen consecuencias. Estas pueden ser retroceder casilleros o perder turnos, es decir, impedimentos para volver a “casa”.

15_B_F2CC5FF1-0E0C-4FBD-BA9D-C00843C6435A.jpg

El tablero de “Lobo está” tiene el mismo formato que el Juego de la Oca.

Foto: Gentileza MIAA

Replicar la experiencia

El mapa es coordinado por miembros de Santa Fe en Bici. Este colectivo es organizador del Foro Argentino de la Bicicleta y para presentar el MIAA en el encuentro organizado en 2018 en Santa Rosa, La Pampa, decidieron desarrollar la experiencia lúdica “Lobo está”. En diálogo con El Litoral, Yamila Riego, coordinadora del mapeo en Santa Fe, comentó : “‘Lobo está’ surgió como una alternativa para no proyectar el mapa y explicarlo, sino presentar el proyecto y generar interés real. Buscamos despertar empatía, sobre todo en los varones”.

Luego de la primer experiencia en el Foro, la dinámica lúdica fue replicada más de 25 veces en diferentes espacios. Una de éstas se llevó a cabo en el marco de una jornada con perspectiva de género que se realizó en el Colegio de Arquitectos. Guillermo Giura (41), arquitecto, comentó respecto de la actividad: “Cuando uno se entera de algo en particular, creo que todos nos replanteamos nuestros privilegios. Aun así, debería haber una formación más general desde las escuelas. La generaciones más viejas son menos receptivas, pero los chicos tienen más internalizados estos planteos. Mientras más se trate la perspectiva de género, mejor”

En esta línea, las coordinadoras del proyecto piensan la posibilidad de proponer “Lobo está” en otros ámbitos, especialmente en el sector educativo. Para hacerlo posible sería necesaria la intervención de profesionales en materia de psicología y pedagogía que revisen y editen el contenido del tablero dependiendo de la edad de los menores a quienes se les presente el mismo, ya que cuenta con relatos crudos y símbolos explícitos.

Además, Riego señaló: “Hace falta la intervención de un profesional que controle pedagógica y psicológicamente el desarrollo de la actividad”.