CENTENARIO DE LA CASA DE ESTUDIOS
CENTENARIO DE LA CASA DE ESTUDIOS
La UNL festejó con un recital inédito
Fue anoche en la explanada del Rectorado de la UNL con más de 100 artistas dirigidos por Nicolás Sorín. Participaron unas 10 mil personas. El repertorio estuvo integrado por canciones argentinas.

Tradición, diversidad e innovación fueron los pilares de un show en el que canciones argentinas y fusión fueron protagonistas.
El Litoral / Prensa UNL
La Universidad Nacional del Litoral desplegó anoche uno de los eventos culturales más destacados del año: el recital aniversario, que se concretó en la Explanada del Rectorado, en bulevar Pellegrini entre San Jerónimo y 9 de Julio. Dado que faltan pocos días para que la casa de estudios celebre su centenario, el recital tuvo un despliegue inédito: una banda estable, cantantes y músicos invitados, el coro de la UNL y una orquesta conformada por integrantes del Ensamble Sinfónico del Litoral y la Camerata Eleutheria interpretaron un repertorio formado por conocidas canciones argentinas, bajo la supervisión del director y productor Nicolás Sorín.
Todo arrancó poco después de las 21, ante una nutrida concurrencia, estimada en 10 mil personas. La primera de las canciones homenajeadas fue “Cerca de la Revolución”, de Charly García, de la mano de Rodrigo Negro González como vocalista invitado.
Luego el ex Catupecu Machu y actual Vanthra, Fernando Ruiz Díaz, se adueñó del show. Tras recordar que su papá y su abuelo estudiaron en la UNL, se lució con “Mañana en el Abasto”, “Heroína”, también de Sumo, “Lo que quiero es que pises sin el suelo”, de Catupecu, “En los sueños” y “Es todo lo que tengo y es todo lo que hay” de Lisandro Aristimuño.
Miss Bolivia y Natalia Pérez hicieron una particular versión de “Zamba para olvidarte”. El rock volvió de la mano de la cantante Lula Bertoldi y “Bajan” de Pescado Rabioso. Para terminar, la líder de Eruca Sativa se lució con un poderoso solo de guitarra de base funk, decorado por el toque swing de la sección de vientos.
Rodrigo González interpretó “Té para tres” de Soda Stereo. La paz continuó con una extensa y jazzera interpretación de “Hablando a tu corazón” de Charly García y Pedro Aznar, con la voz de Agustín Flaco Ferrero. El saxo de Carlos Michelini, las teclas de Danilo Cernotto y el bajo de Tony Monti engalanaron el tema.
“Barro tal vez” marcó la segunda aparición de Miss Bolivia, esta vez acompañada por la cantante Cintia Bertolino.

Miles de personas disfrutaron del recital 100 años de la UNL, con la renovada fachada del Rectorado coronando la postal de una noche histórica. Fotos: Manuel Fabatía
Despedida con todos
A esa altura, con un espectáculo consolidado y un público atento, llegó uno de los momentos más altos de la noche. Lula Bertoldi volvió a pisar las tablas para comenzar una versión a capella de “La Cigarra”. El ensamble siguió luciéndose, esta vez con “Tumbas de la Gloria” de Fito Paez, que sonó en la voz de Gustavo Cortéz de Sig Ragga. “Una canción que marca mi infancia y adolescencia, de las primeras que aprendí a tocar en el teclado”, afirmó antes de dejar su lugar a Lisandro Aristimuño.
El cantautor patagónico interpretó, en primer término, su hit “Entre tu nombre y el mío”. A continuación sobrevino otro de los momentos cumbres: el espíritu de Gustavo Cerati sobrevoló la noche durante la cálida versión de “Puente”.
Sobre el final, Sorín invitó a los músicos a volver al escenario, para comenzar a despedirse con una multitudinaria versión de “Inconsciente Colectivo” de Charly García. Con las locales Señorita Miraflores y Maca Revolt llevando las voces líderes, poco a poco el resto de los invitados se sumó, para terminar creando una auténtica versión coral de un clásico que refiere a la necesidad de “cantar de nuevo / una vez más”.
Ante el insistente pedido del público, y luego de darle el feliz cumpleaños a la Universidad, el final definitivo arribó con la canción que una hora y media atrás abrió la noche: “Cerca de la revolución”, esta vez, con menos nervios, más sonrisas y todos cantando.

Destacados músicos argentinos, todos bajo la conducción del prestigioso Nicolás Sorín, se sumaron a una noche que dejó postales inmborrables.