Si el 2019 terminó mal, el nuevo año comenzó peor para quienes viven en la zona de Guadalupe Oeste, al límite con La Esmeralda.
Varios inmuebles fueron desvalijados. Los vecinos reclaman mayor presencia policial.
Si el 2019 terminó mal, el nuevo año comenzó peor para quienes viven en la zona de Guadalupe Oeste, al límite con La Esmeralda.
Es que durante ese lapso se han sucedido varios robos y hechos vandálicos en distintas casas de familia.
Para colmo de males los vecinos aseguran estar por completo a merced de los delincuentes que se mueven con total impunidad, ya que la zona cuenta con escasa o nula presencia policial.
“Este es un barrio nuevo, hermoso, que era tranquilo. Algunos lo llaman Amdip. Pero hace unos cuatro meses vivir acá se ha vuelto imposible. Todos los días nos enteramos de un robo”, dice con angustia Abigail, quien tiene su casa en 25 de Mayo al 8300.
“En diciembre fue lo peor. Los primeros días desvalijaron una casa por completo. Los propietarios habían salido y cuando llegaron a la noche no tenían nada. Les llevaron hasta el aire acondicionado, además de todos los electrodomésticos, la ropa y dinero. increíble”.
“Al otro día se produjo otro hecho similar acá a la vuelta, por calle Rivadavia, donde a una familia le robaron un montón de cosas. Y así seguimos en una constante que nunca aflojó. Todas las semanas nos estamos enterando de un nuevo robo”, agregó.
“El 1 de enero supimos de otros hechos que ocurrieron en la zona de Gorriti al 2500. Es una oleada que no para”, dijeron.
“Y no se trata únicamente de robos. También hay mucho vandalismo. Rompen rejas, violentan portones. “A mí me llevaron hasta el cesto para residuos”, es el colmo, agregó otra mujer.
Llamó la atención a los vecinos unas extrañas marcas o pintadas que fueron observadas en algunas viviendas, en los momentos previos a cualquier hecho delictivo.
Uno de los denunciantes explicó que un día se sorprendió al ver que en el frente de su casa alguien había pintado con un ladrillo un triángulo. “Comuniqué la situación al 911 y me dijeron que lo borre de inmediato”.
Otro vecino recordó que hace unos días descubrió con asombro una especie de X hecha con restos de cinta aisladora, la que había sido pegada en la puerta de su casa.
Por último los vecinos indicaron que “hemos hecho las denuncias en la seccional 8va. pero nadie nos llevó el apunte. No entiendo por qué nos dejan tan de lado”.
“Encima de todo cuando alguien llama a la policía tardan mucho en llegar. La otra noche los llamamos y demoraron media hora en venir.
Como último recurso algunos vecinos están poniendo rejas y alarmas. “Ya no sabemos qué hacer. Entre los vecinos nos ayudamos, tenemos un grupo whatsapp pero sentimos que nada alcanza. Ahora estamos pensando en una alarma comunitaria.
“Por favor que alguien tome cartas en el asunto. Este es un barrio nuevo pero estamos desprotegidos”, cerraron.