Debido a este tema, El Litoral, dialogó con el secretario general de la Coordinadora que nuclea a 79 cajas en todo el país, Gustavo Beveraggi, quien manifestó que la intención es que se abra un diálogo para que se comprenda la particular situación de un sector que “invirtió” en títulos de deuda pública ya que hoy tiene un capital comprometido que es “muy incidente porque afecta la sustentabilidad del sistema”.
Beveraggi sostuvo que “lo que estamos haciendo es visualizar la problemática a nivel nacional como tenedores de títulos de deuda pública, no solo en la instancia de la ley que se trató el pasado miércoles vinculada a deuda emitida bajo ley extranjera, sino lo que va a continuar que es la deuda emitida bajo la ley argentina. Ante ello, queremos hacer conocer públicamente que los tenedores de deuda no son todos fondos buitres o grupos especulativos sino que somos también, instituciones residentes en el país que hemos invertido en título de deuda pública. Nosotros no especulamos con la deuda pública sino que invertimos”.
Agregó luego que “para nosotros el comprar deuda pública es participar de un crecimiento del país, de un desarrollo genuino del Estado del cual nosotros también somos partícipes. Pretendemos que el Estado también tenga una atención sobre esta situación porque sino a la sociedad se le vende una historia de que la deuda la tienen la gente de afuera, que son todos especuladores y que no les interesa qué pasa dentro del país. Y no es así.
Porque puede ser que eso ocurra en algún caso pero también estamos nosotros que hemos invertido. Es decir, el Estado en un momento necesitó un dinero y nosotros de lo que tenemos acumulado, una parte se la hemos prestado para que pueda desarrollar sus actividades. Y hoy querríamos que eso sea atendido pero el tratamiento en el proceso de reestructuración de deuda, para que el día de mañana cuando volvamos a tener estas opciones en el menú de alternativas sigamos optando por esta cuestión. Si no es como que se destruye una relación de confianza inversor-tomador de deuda, para el futuro”.
Beveraggi explicó que “somos 79 cajas profesionales en todo el país. Somos el segundo sistema federal en alcance detrás de Anses, porque nosotros estamos presentes en muchas provincias donde ya no quedan cajas púbicas porque han sido transferidas a la Nación y hoy componen Anses”.
Ante una consulta aclaró que “los montos de la inversión realizada son muy difíciles de medir porque algunos instrumentos están emitidos algunos en pesos, otros en dólares, otros en euros... además para tomar el monto hay que conocer la cotización del día del bono pero sí se puede hablar de porcentaje. En el común de las cajas, los títulos públicos representan entre el 70 y el 80 por ciento de la inversiones que tenemos y, de ese porcentaje, aproximadamente un 30 por ciento estaría bajo ley extranjera y el resto bajo ley argentina. Dadas estas cifras, para nosotros la deuda pública es muy, muy incidente porque afecta la sustentabilidad del sistema. Cualquier quita o programación indebida que se produzca afecta a la capacidad de sostenimiento que tienen nuestros sistemas y esto repercute en la posibilidad de pagar beneficios hoy y la posibilidad de pagar beneficios a futuro porque estamos hablando de fondos previsionales con protecciones normativas y regulaciones no sólo a nivel nacional sin también internacional y hasta protegidos por la Constitución Nacional”.
Remarcó seguidamente que “no es un fondo financiero, no son fondos comunes, son fondos que tienen un resguardo especial porque constituyen la confianza puesta por un trabajador para su beneficio previsional futuro. Y no está relacionado con el hecho de que invierto y puedo llegar a tener mayor o menor suerte en cómo me vaya en la inversión que hice de un capital excedente. Nosotros no tenemos capitales excedentes, tenemos capitales concretos. Por cada 100 pesos que me da un afiliado en calidad de aporte, yo tengo una promesa institucional de un pago previsional futuro sobre los 100 pesos. Si yo a esos 100 los invertí como título y la Nación me dice “de los 100 que recibí, ahora te voy a devolver 70”, ¿cómo hago yo para prometerle a mi afiliado el cumplimiento completo?”.
Y subrayó: “De esto es lo que estamos tratando de que se tome conciencia y conocimiento público para entender por qué nuestro reclamo de una especial atención hacia la deuda que tenemos”.
Más adelante se le consultó por el resultado que han obtenido luego de reunirse con legisladores nacionales y señaló que “el nivel de respuesta ha sido muy bueno porque nos hemos encontrado en la generalidad de los bloques y de los legisladores una visión adecuada de la problemática”.
Puntualizó luego que “entendemos de que es necesaria una reestructuración de la deuda. Nos parece que tornarla posible de sostener a la deuda, también es necesario. Pero consideramos que hay que hacer una distinción entre los distintos tipos de fondos y de tenedores que tiene esa deuda. Más allá de que también conocemos de que las normas del pari passu o de la igualdad de tratamiento según las normas internacionales están garantizados para todos los que tienen posesión de deuda, puede que se busque otra alternativa a esto y podamos sentarnos a dialogar con quienes tendrán a cargo la oferta final, porque lo que ha tratado la ley no ha sido el formato de oferta de reestructuración. La ley lo que hizo fue habilitar al Poder Ejecutivo para el inicio del diálogo y las negociaciones pero no está oferta concreta de si va a haber una quita de capital y en qué porcentaje o una consideración de reestructuración de plazos. Eso viene ahora”.
Finalmente Beveraggi recalcó que “estamos muy confiados de que, en ese marco de diálogo, podamos encontrar una solución a la problemática que estamos planteando. De acuerdo con lo que nos han transmitido los legisladores con quienes hablamos a ellos también les han referido a que nos convocarían en fecha próxima a los efectos de tener en consideración nuestro reclamo”.