El gobernador del estado de Nueva York, el demócrata Andrew Cuomo, informó este viernes que el saldo diario de muertes por coronavirus fue de 109 decesos en su jurisdicción, cuatro más que en la víspera, y recordó que "ningún funcionario local puede abrir o cerrar" su región, tras la posible reapertura en junio anunciada esta mañana por las autoridades de la Gran Manzana.
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Leve repunte de las muertes en Nueva York, entre roces políticos por la desescalada
Archivo 18:08
Pese a este leve incremento, se registraron 225 internaciones en las últimas 24 horas, el índice más bajo desde el inicio del brote, lo que supone el tercer día consecutivo con menos de 300 hospitalizaciones por Covid-19, anunció Cuomo en su rueda de prensa diaria.
Con respecto a las proyecciones de reapertura de la ciudad de Nueva York, el gobernador se mostró tajante.
"Lo dijimos desde el principio, solo hay un estándar que viene determinado por los datos, no es una cuestión política", advirtió.
Nueva York el estado más golpeado por la pandemia, con un total de 358.154 contagios y 23.195 muertes, de los cuales 193.951 casos y 16.333 decesos se registraron en la Gran Manzana, epicentro nacional de la pandemia, según el último reporte oficial.
Pese a estas cifras alarmantes, el intendente de Nueva York, Bill de Blasio, aseguró esta mañana que la ciudad podría comenzar la reapertura "la primera o la segunda semana de junio" si lograban estar de manera sostenida por debajo de ciertos "umbrales" en sus indicadores de Covid-19.
Según detalló, la urbe deberá mantenerse "entre 10 y 14 días" -el tiempo estimado de incubación- por debajo de las 200 nuevas internaciones diarias y de los 375 pacientes en terapia intensiva, además de registrar menos de 15% de casos positivos sobre el total de residentes testados.
La metrópoli ya cumple con dos de esos requisitos, pero aún tiene 451 personas en cuidados intensivos, si bien De Blasio señaló que hace diez días eran 100 más, reportó la agencia de noticias EFE.
"Estar por debajo de esos umbrales de manera sostenida nos dejará claro que estamos listos para más progreso", afirmó el intendente, quien pidió prudencia ante la llegada del buen tiempo para evitar que haya una segunda ola de contagios.
Pero Cuomo, que tradicionalmente ha mantenido diferencias con De Blasio, insistió en que la última palabra la tiene la autoridad estatal, aunque luego se mostró abierto a considerar algunas particularidades concretas en las diferentes regiones.
En este sentido, el gobernador anunció que las poblaciones de Long Island y Mid-Hudson podrán unirse la próxima semana a las que ya comenzaron la reapertura a mediados de mes si siguen manteniendo una reducción de las víctimas mortales y realizan el rastreo de casos de manera telemática.
Con información de Télam
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