Tomás Rodríguez
El domingo 25 de mayo de 1989, el conjunto dirigido por el “Indio” Jorge Raúl Solari al batir, en Caballito, a Deportivo Armenio, 2 a 1, se consagrara campeón local, con anotaciones de Rubén Darío Insúa (ex San Lorenzo de Almagro) y Pedro Fernando Massacessi, mientras a los 50’ había puesto en ventaja al local, Lorenzo Frutos (también formado en el Ciclón), quien luego estuvo en Unión.
Tomás Rodríguez
La notable victoria lograda por el escolta del torneo del círculo superior afista, Independiente, frente al entonces líder, Boca Juniors, en la propia Bombonera, por 2 a 1, el 2 de abril de 1989 posibilitó que el certamen tuviera la pimienta emocional para las últimas nueve jornadas.
Después de aquél triunfo ante Armenio el 25 de mayo de ese año, Independiente, tras varios años de postergaciones, recuperó la mística extraviada un quinquenio atrás, Debe destacarse que en este torneo, los partidos igualados al término de los 90 minutos debían definirse por tiros del punto penal, el que se imponía por esa vía recibía una unidad extra, además del empate, mientras el ganador del partido, se hacía acreedor a tres puntos.
Al término de la primera rueda comandaban la competencia Boca Juniors y Racing Club (el único Grande que venció al campeón y al cual éste no pudo vencer en la cancha), con dos puntos de ventaja sobre Independiente.
Cuando Independiente supera a Boca por segunda vez en la temporada (en la doble visera, 2 a 1, goles de Ricardo Bochini y el paraguayo Rogelio Delgado, con 65.000 personas, el segundo encuentro con mayor cantidad de público en su estadio), de huésped, con una magnífica actuación del portero Eduardo Pereira evitando varios tantos y aprovechando las cualidades del “Bocha” cuando a los 41’ saca provecho de un pase de Rubén Insúa, tras un rebote en el colombiano-argentino Fernando Navarro Montoya, con tiro corto, adelanta al equipo rojo, anotando su segundo gol y otra vez frente al equipo xeneize, ratificando que fue el “verdugo” de los auriazules en la década del ‘80.
Al minuto del complemento, Bochini habilita a Insúa su imperfecto y desviado envío se encuentra en el camino con la pierna del “Beto” Alfaro Moreno que vence por segunda vez al portero anfitrión. Sobre la pitada final descontó Walter Perazzo para Boca.
La excepcional labor de Bochini recibió una estruendosa ovación cuando el “Indio” Solari lo sacó a 5’ del final, reconocimiento a su magnífica actuación.
Desde entonces, Independiente (84) de los nueve partidos finales, ganó ocho y superó por definición de penales en el clásico de Avellaneda a Racing , obteniendo una diferencia de 8 puntos sobre el segundo Boca (76, solamente perdió con el campeón) y 16 unidades al tercero, Deportivo Español (68), de notable campaña.
La frutilla del postre de Independiente ante Deportivo Armenio en el estadio de F. C. Oeste fue la culminación de una trayectoria y un rendimiento de menor a mayor, sorprendiendo a todos al recuperar la mística y adjudicándose en forma meritoria el certamen que lo tuvo como el principal protagonista, prueba de ello que le ganó a Boca Juniors y River Plate los cuatro partidos disputados.
¡Qué lejos están!
El Independiente F.C. fue fundado el 1 de enero de 1905 en Perú y Victoria (actual Hipólito Yrigoyen), en el barrio Monserrat de Buenos Aires, por cadetes de 14 a 17 años de la tradicional “Ciudad de Londres” (la más vasta y surtida de Sud-América), quienes aportaban mensualmente 25 centavos y luego se incorporó el personal superior ($ 0,50) para la compra de pelotas y camisetas. Su primer presidente, Arístides Langone.
El club, radicado luego en Avellaneda, es el primer equipo argentino bicampeón de la Copa Libertadores de América: 1964-1965. Ganó todas las finales de ese certamen sin recurrir a los penales.
Además fue el primer equipo argentino en jugar la Copa Intercontinental (1964); habiéndose adjudicado la misma dos veces en 1973 (Juventus) y 1984 (Liverpool).
Durante la década del ’50 del siglo pasado su delantera completa integró la selección argentina que le ganó por primera vez a Inglaterra (Rodolfo Micheli (goleador de la Copa América de 1955 en Chile), Carlos Cecconato, Ricardo Bonelli, Ernesto Grillo y Osvaldo Cruz) y también a España. En el orden mundial es el segundo club en tener un estadio de cemento, con doble visera, y el primero en América Latina.
Asimismo es el equipo que tiene la tercera mayor racha de invictos en el profesionalismo: 37 partidos en la sexta década del Siglo XX.
Por otra parte, fue la primera institución deportiva de Argentina en fundar establecimientos extra-deportivos: jardín de infantes, escuela primaria, colegio secundario, biblioteca, salón de baile y hasta un jardín botánico.
La actual conducción pretende regresar a las inolvidables jornadas de gloria y alegría de los hinchas rojos, con títulos y volver a ser “Rey de Copas”, desde la época de Manuel Seoane, Raimundo “El Cometa Mumo” Orsi, Vicente “Capote” de la Mata, Arsenio Erico (el más grande artillero de todos los tiempos, incluyendo 120 goles en tres torneos 1937-38-39), Antonio Sastre, Ernesto Grillo, Rubén Navarro, Miguel Santoro, Raúl Savoy, Mario Rodríguez, Raúl Bernao, Luis Artime, José Omar Pastoriza, Hugo Villaverde, Enzo Trossero, Albeiro “Palomo” Usuriaga, Sergio “Kun” Agüero, Alcides Silveyra, Ricardo Pavoni, Jorge Burruchaga, Percy Rojas, Ricardo Bochini, Daniel Bertoni, Héctor Yazalde, Norberto Outes, Diego Forlán, Gabriel Milito y tantos otros.
Aquellos campeones
Arqueros: Eduardo Pereira y Sergio Bernabé Vargas.
Defensores: Néstor Rolando Clausen, Hugo Eduardo Villaverde, Pedro Damián Monzón, Rogelio Wilfrido Delgado, Guillermo Daniel Ríos, Juan Carlos Erba, Gustavo Marcelo Reinoso y Elvio Vázquez.
Volantes: Rubén Darío Insúa, Miguel Angel Ludueña, Ricardo Enrique Bochini, José María Bianco, Pedro Fernando Massacessi, Sergio César Merlini, Ricardo Omar Giusti, Marcelo Fabián Morales y Néstor Fernando Villarreal.
Delanteros: Carlos Alejandro Alfaro Moreno, Marcelo Jorge Reggiardo, Adrián Carlos Czornomaz, Mario Humberto Lobo, Claudio Aníbal Osterrieth y Martín Félix Ubaldi.
DT: Jorge Raúl Solari.