"Tenemos un grupo de empresas que exportan, que son proveedoras de empresas del exterior, otras que trabajan con firmas a nivel local y hay algunas que trabajan con los dos destinos.
"Tenemos un grupo de empresas que exportan, que son proveedoras de empresas del exterior, otras que trabajan con firmas a nivel local y hay algunas que trabajan con los dos destinos.
"Los que exportan se vieron muy afectados los dos o tres primeros meses de pandemia a nivel global, cuando afectó más al hemisferio Norte. En ese momento hubo caída de contratos y problemas de cobrabilidad".
Gustavo Lavatiatta está al frente del "Cluster Tic Santa Fe", que representa a empresas de base tecnológica en nuestra ciudad. El Litoral lo consultó sobre cómo ha impactado la pandemia en este grupo que lleva 9 años y que reúne a 35 Pymes santafesinas, empleando un 75 % de profesionales.
"El mercado local fue afectado a medida que las empresas locales fueron bajando sus niveles de ingresos y de facturación, y eso repercutió a los proveedores de tecnología.
"La situación se fue normalizando un poco, pero el problema es que las empresas que trabajan con el exterior, al no poder viajar no pueden renovar los contratos. Hay firmas que desarrollan aplicaciones que continuamente requieren renovación contractual y eso necesita de viajes".
Respecto de la paradoja de no poder realizar contratos a distancia entre empresas de base tecnológica en tiempos de internet, Lavatiatta explicó que "se pueden renovar los clientes consolidados, pero tenemos firmas que cambian los clientes por la naturaleza de su oferta. Además hubo contratos que se cayeron y se perdieron o no se pudieron cobrar en tiempo y forma, aunque se fueron recuperando".
Pérdida de empleo
"Se han perdido puestos, más que nada cuando a principios de año" las "empresas más grandes" tentaron a los profesionales locales. "Tenemos una migración a tecnológicas grandes; nuestras firmas en el clúster son Pymes; empresas como Mercado Libre fueron absorbiendo mucho personal. A principios de año ya habíamos perdido 20 % de puestos".
Al señalársele que las empresas locales no "repusieron" ese faltante, Lavatiatta respondió que "el sector siempre demanda. Se trata de incorporar personal pero no siempre existe oferta de gente capacitada. Tenemos más demanda que oferta.
"Además está el tema de la incertidumbre en la renovación de contratos; las firmas (locales) hasta que no tienen confirmados los contratos, no toman gente".
Faltan profesionales
"Hay oferta universitaria pero la demanda es mayor en todos los rubros. Ingenieros en sistemas, analistas, desarrolladores, diseñadores… las universidades no producen la escala que necesitan las empresas", comentó Lavattiata. También advirtió que hay minoría de mujeres porque "ellas" no suelen elegir las carreras que las pondría en escena en el sector. "En nuestro rubro no hay discriminación", afirmó.
Sin promoción y con teletrabajo
"Se derogó la norma vigente que era continuidad de la ley de Software; la nueva ley de Economía del Conocimiento se votó en Diputados por Unanimidad y se cajoneó en el Senado nacional", señaló Lavatiatta sobre la norma que llegó a impulsar exportaciones anuales del orden de los 9 mil millones de dólares por empresas nacionales de base tecnológica
Consultado si llevaron la inquietud a los senadores nacionales María de los Angeles Sacnun, Roberto Mirabella y Carlos Reutemann, el titular del "Clúster Tic Santa Fe" respondió que "todas las empresas del sector han tratado de trabajar con sus representantes locales (de cada provincia) para que impulsen la ley, pero en el Senado está todo paralizado".
Al insistirle sobre lo que responden los senadores nacionales santafesinos, Lavatiatta dijo: "No nos dicen nada. No hay respuesta. A eso se suma la ley de Teletrabajo. Tenemos mucha gente teletrabajando en forma histórica; no es de ahora por la pandemia, siempre tuvimos este trabajo que es proclive a que la gente pueda trabajar en sus hogares".
Expuso que "parece ser una ley hecha por gente que no trabajó nunca. Está destruyendo el trabajo que andaba muy bien; cuando se promulgue la nueva norma lo más probable es que la gente que trabaja en su hogar pase a las oficinas, porque es imposible de implementar".
Cepo y migración
"Muchas empresas tienen costos de comercialización en dólar billete pero cobran el cambio al dólar oficial. Eso hace que no cierre ningún tipo de operación.
"Una de las problemáticas es que con el desdoblamiento cambiario se incentiva que las empresas se instalen en países más amigables con el sector. Hasta ahora no han migrado las empresas que pertenecen al clúster, pero sabemos que en el sector hay muchas empresas que ya están planteando oficinas en otros países, sobre todo de Uruguay, Paraguay, Bolivia o Perú, que ofrecen mejor perspectiva impositiva y cambiaria".
Lavatiatta advirtió que, aún cuando el trabajo se haga aquí "es algo muy fácil y dinámico establecerse en el exterior", aunque "bregamos para que las empresas trabajen y facturen en Santa Fe, en nuestro país. Pero no tenemos un marco impositivo acorde, es prácticamente imposible".
A manera de ejemplo, detalló que "hubo empresas que aprobaron presupuestos en base a costos con la ley de Conocimiento vigente, pero hay cálculos impositivos que no sirven más y se agregarían los sobrecostos de la ley de Teletrabajo".
Nuevos productos y a pedido
"Tenemos empresas de desarrollo de software divididas en dos grandes grupos. Las que trabajan a pedido, denominadas software factory, que trabajan a proyecto de desarrollo específico. Muchas son contratos en el exterior; lo que hacen es vender horas de trabajo.
"Hay empresas que desarrollan un producto determinado, con una dinámica distinta. El producto se desarrolla durante muchos años y después se comercializa. Esto depende más del mercado donde se focaliza el producto y de cómo le vaya a la industria específica. Por ejemplo, si se desarrolla un software para la industria automotriz y ésta está paralizada, el proveedor de ese software cae con la cadena".