El 43% de los usuarios de medicina prepagas evalúa pasarse a un plan más económico tras el último aumento aplicado por las compañías este mes.
El 43% de los usuarios de medicina prepagas evalúa pasarse a un plan más económico tras el último aumento aplicado por las compañías este mes.
Así se desprende de una encuesta realizada por el sitio especializado Mi Obra Social, que agregó que, con la suba del 10% a partir del 1° de diciembre, una familia tipo (matrimonio de entre 36 y 42 años con dos hijos de entre 6 y 12 años) tendrá que pagar $ 6615 por la cobertura privada más accesible del mercado.
Según el relevamiento de MiObraSocial.com.ar, la decisión de casi la mitad de los casi 500 encuestados en noviembre consideró que se cambiaría de plan o de empresa con el solo objetivo de cuidar sus ingresos y aunque esto implique bajar el nivel de las prestaciones.
Para incrementos mayores -en febrero se espera otra suba-, el porcentaje de los interesados en achicar los gastos es aún superior. Si el aumento fuera de un 20%, la proporción treparía al 79 por ciento.
Aun con estos resultados, Ignacio Cámpora, socio fundador de MiObraSocial, explicó que "cuando suceden aumentos de tarifa, notamos muchos usuarios consultando alternativas, pero pocos concretando el cambio". Y tranquilizó a quienes estén evaluando cambiar: "En ningún momento, se va a perder cobertura, algo que genera mucho miedo, sobre todo, en momentos de crisis sanitaria como la actual".
Así, con el nuevo esquema de tarifas aplicado desde este mes, una familia tipo (matrimonio de entre 36 y 42 años, con dos hijos de 6 a 12 años) necesitará $ 6615 para acceder a las prepagas más económicas que están disponibles hoy en el mercado y que, por lo general, brindan coberturas con foco regional.
En cambio, para una cobertura nacional de segmento medio, la cuota arrancará en aproximadamente $ 11.900, mientras que, para una de segmento alto, hay que hablar de montos superiores a $ 17.000.
A pesar de la alta inflación y el freno de las actividades económicas que afectó el bolsillo de gran parte de la población, un 71% está dispuesto a hacer un gran esfuerzo para mantener una cobertura privada, evitando así obras sociales y el sistema público.
Otro dato relevante según el informe es que generó un gran malestar entre los usuarios la forma en que conocieron los aumentos. El 55% lo hizo a través de los medios de comunicación, solo a un 20% fue informado por su prepaga y el resto no estaba al tanto. La última aprobación anunciada, de hecho, mencionaba un 15% de aumento, tal como las compañías habían requerido al Gobierno por el alto impacto de la inflación y la devaluación en sus propios costos.