Tras las definiciones concretadas este viernes, resulta oportuno concretar una especie de balance de los ítems más salientes del Dakar 2021, desarrollado íntegramente en Arabia Saudita. Comenzando obviamente por el francés Stephane Peterhansel, quien treinta años después de su primera victoria en Motos, añadió un 14º título a su colección: el octavo en Autos, convirtiéndose así en el único piloto que gana en tres continentes.
"Monsieur Dakar" demostró que domina la prueba como ninguno, imponiéndose a otros candidatos al título. Al término de la tercera etapa, Peterhansel se apoderó de la vanguardia en la general y al día siguiente, comenzó la gran lucha con su tres compañeros de podio del año anterior. La mala fortuna le jugó una mala pasada al español Carlos Sainz, dando paso a un duelo entre el Mini número 302 y el Toyota Hilux de Nasser Al-Attiyah. Pero al príncipe qatarí no le alcanzaron sus sólidos argumentos para lograr superar al notable deportista galo.
En la meta de Jeddah también hubo un argentino que hizo historia: Kevin Benavides, que tras consagrarse en Motos, se transformó en el primer piloto latinoamericano en adjudicarse una de las dos categorías más importantes de la mítica competición.
En su quinta participación, el salteño logró el sueño de coronarse... Su estreno data de 2016, cuando culminó al pie del podio; mientras que luego llegaron grandes decepciones: sobre todo en 2018, cuando acariciaba el título y se le escapó por un fatídico error de navegación nada menos que en su ciudad natal. Este año, sufrió una dura caída que le dejó la nariz rota y el tobillo magullado, lo que no impidió que se hiciera con las riendas en la etapa 5.
Kevin tuvo que bajar del trono al día siguiente, pero supo esperar muy bien su momento, retomando el líderazgo, tras la caída de su compañero de equipo Ignacio Cornejo… El primer ganador sudamericano de la categoría tuvo que defender el puesto en un emocionante final, en el que se vio acechado por el británico Sam Sunderland (KTM) hasta los últimos kilómetros de la penúltima etapa; así como también por el estadounidense Ricky Brabec (Honda), quien culminó segundo tras adjudicarse la última especial. Honda logra así su primer doblete en el podio desde la victoria de Cyril Neveu, seguido de Edi Orioli, en 1987.
Tampoco debería obviarse la actuación del también argentino, Manuel Andújar, que tras prevalecer en Quads, emuló lo conseguido por los hermanos Alejandro y Marcos Patronelli, por lo que es la sexta ocasión en la que la bandera albiceleste flamea en lo más alto en la categoría. Finalmente, el podio se completó con el chileno Giovanni Enrico y el argentino-estadounidense Pablo Copetti…
En cuanto a los Camiones, la regularidad de Dmitry Sotnikov impuso condiciones. Desde 2017, el ruso ha ganado siempre al menos una especial, por lo que figuraba como claro favorito. El año pasado, su compañero del Team Kamaz, Andrey Karginov, realizó una carrera magistral con siete victorias de especial. En este 43º Dakar, Sotnikov cosechó llos frutos de su regularidad: de las 12 etapas, Kamaz siempre terminó en el podio, con excepción del jueves pasado.
Es el 18º título de Kamaz en la travesía y el quinto consecutivo, igualando así el récord establecido por los camiones azules de 2002 a 2006 y por Mercedes de 1982 a 1986. El checo Martin Macík, ganador de tres etapas en un palmarés pintado casi completamente de azul, seguirá intentando posicionarse para romper la racha.
En tanto, al igual que en 2019, los Vehículos Ligeros fueron dominados por otro latino: el chileno Francisco López, quien en su décima participación, estuvo entre los mejores en cuatro especiales e hizo gala de una enorme regularidad, inclusive, tras sufrir algunos inconvenientes mecánicos.
Mientras que en la división Dakar Classic, con 24 vehículos del siglo XX en su seno en esta su primera edición, se ha disputado una carrera de regularidad en la que se proclamó campeón Marc Douton, al volante de un Buggy Sunhill.