La tensión por las demoras en la entrega de las vacunas contra el coronavirus se ahondó este jueves, al punto de que la Unión Europea (UE) anunció la preparación de medidas para vetar envíos ante futuros incumplimientos. A su vez, lanzó una investigación contra la firma farmacéutica sueco-británica AstraZeneca, tras allanar una de sus plantas en Bélgica.
Paralelamente, otra disputa con esta empresa parece abrirse en Alemania, donde el ente regulador nacional desaconsejó el uso de su inmunizante en mayores de 65 años "por falta de información sobre su eficacia", algo que el propio laboratorio y el premier británico Boris Johnson desmintieron.
El bloque europeo afronta una áspera controversia con AstraZeneca, luego de que anunciara el viernes pasado atrasos en el envío de las dosis pedidas por la UE, que pretendía autorizar esta vacuna mañana. "La UE debe tomar medidas enérgicas para asegurar su suministro de vacunas y demostrar concretamente que la protección de sus ciudadanos sigue siendo nuestra prioridad absoluta", dijo el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en una carta.
El bloque prepara un sistema de monitoreo de exportación de vacunas contra el nuevo coronavirus, que permitiría a los estados miembros vetar los envíos fuera de sus fronteras si no son "legítimos", dijeron funcionarios bajo condición de anonimato. "No es una prohibición de exportación", dijo un funcionario, aunque admitió que en "un caso raro podría ocurrir" una negativa a autorizar la venta.
El llamado Mecanismo de Transparencia y Concesión de Licencias para las Exportaciones tiene como fin recopilar información sobre la producción del inmunizante contra la Covid-19 que se enviará fuera de la UE.
Tenés que leerLa Unión Europea obligó a AstraZeneca a publicar los términos del contrato para la provisión de vacunasEl referido mecanismo va a estar basado en una ley europea que fue empleada el año pasado para regular la exportación de equipos de protección personal (como tapabocas y guantes), cuando la pandemia azotó por primera vez a la región. El bloque europeo defendió esta iniciativa, argumentando que invirtió miles de millones de euros en empresas productoras de inoculantes para asegurarse 2.300 millones de dosis de vacunas potenciales.
"No solo se lo debemos a los pacientes de Europa, sino también a todos los contribuyentes", señaló uno de los funcionarios, que precisó que la medida de emergencia no estaba dirigida a ninguna firma en particular. Además de AstraZeneca, el bloque ha sufrido retrasos en las entregas de dosis del gigante estadounidense Pfizer y del laboratorio estadounidense Moderna.
La situación es cada vez más crítica en la UE, donde la falta de suministros ha llevado a la ralentización e incluso a la suspensión de las campañas de inmunización contra la Covid-19, mientras la cepa británica dispara los contagios en la región.
Ante este contexto, las autoridades sanitarias europeas se reunieron el miércoles con la firma sueco-británica, pero la comisionada de Salud, Stella Kyriakides, dijo que "las respuestas de la empresa no fueron satisfactorias hasta el momento", por lo que planeaban mantener un nuevo encuentro.
Mientras tanto, la UE impulsó una investigación contra el laboratorio, tras allanar una de sus fábricas, localizada en el municipio de Seneffe, al sur de Bruselas. Funcionarios belgas ingresaron a la planta y se llevaron documentación y muestras para estudiar si los fármacos producidos allí son desviados al Reino Unido.
Controversia entre Alemania y el Reino Unido
En Alemania, la comisión encargada de la vacunación indicó que recomienda su inoculante solo para las personas menores de 65 años, debido a la falta de información sobre su eficacia en gente de más edad. "La vacuna contra la Covid-19 de AstraZeneca está actualmente recomendada para las personas de entre 18 y 64 años", dijo el Comité Permanente de Vacunación del Instituto Robert Koch en un documento, donde explica que "los datos disponibles hasta el momento no bastan para evaluar la eficacia de las vacunas más allá de los 65 años".
Sin embargo, un vocero del laboratorio subrayó que "los últimos análisis respaldan la hipótesis de la eficacia de la vacuna en el grupo de mayores de 65 años" y afirmó esperar que la Agencia Europea del Medicamento apruebe su uso en los próximos días. También defendió su eficacia el premier británico, Boris Johnson, cuyo país inició una masiva campaña de vacunación, en la que ya inmunizó a más de 7 millones de personas y utiliza esta vacuna para todos los grupos de edad.
"Nuestras propias autoridades dejaron muy claro que piensan que la vacuna de AstraZeneca da un alto grado de protección", dijo Johnson. Ante la tensión y confusión generada el respecto, la canciller alemana, Angela Merkel, convocó para el próximo lunes una reunión con los líderes regionales y los fabricantes de vacunas.
Putin aseguró que en Rusia va todo bien
Mientras diferentes laboratorios tienen dificultades para enfrentar la demanda de inoculantes contra el coronavirus, el presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró que los fabricantes de la vacuna rusa Sputnik V han organizado la producción de la misma de un modo que "se sobrecumplen los planes trazados".
"Se trazaron ambiciosos planes de producción de vacunas y las empresas se adelantan a sus gráficos, según me informó el ministro (Denis) Manturov", dijo Putin durante la inauguración de una reunión con su gabinete de ministros y haciendo referencia al titular de la cartera de Industria y Comercio.
Por su parte, la viceprimera ministra rusa, Tatiana Golikova, informó que el gobierno ruso aspira a vacunar al 60% de la población, es decir 68,6 millones de personas, para alcanzar la inmunidad colectiva.
En Rusia, donde la vacunación masiva se inició el 18 de enero pasado, ya se fabricaron cerca de 8,2 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus, de los cuales 2,7 millones se administraron en instituciones médicas. "La diferencia entre los volúmenes producidos y los accesibles para la vacunación se debe a la necesidad de cumplir oportunamente el procedimiento de control de calidad e inocuidad de las vacunas fabricadas", explicó Golikova.