La reunión de la delegación socialista encabezada por el diputado nacional Enrique Estévez con el gobierno santafesino hizo público el reproche, del PS a la Casa Gris, por haber nombrado como secretario electoral a Pablo Ayala, un militante del partido de gobierno que además fue su apoderado.
Poco tardó el oficialismo en recordar que en años anteriores pasaba lo mismo. Es conocido el caso de la socialista Claudia Catalín que alternó la vida partidaria con esa función. Y, desde la otra vereda, se remontaron a los tiempos del fallecido Avelino Lago, que era un militante del peronismo y más adelante fue diputado provincial. Un militante peronista en redes invitó entonces a comparar desempeños, más que antecedentes, muy seguro de salir ganando en la discusión.