El nombre de Claudio Adrián Martínez, cantante del grupo Labriegos, resonó en oídos de todos esta semana, luego de que su pareja embarazada lo denunciara por atacarla a golpes. Pero la física no sería la única clase de violencia que ejerce el músico, a quien una jueza cordobesa ordenó que se inscribiera en el Registro de Deudores Alimentarios Morosos de dicha provincia, así como en el de San Juan.
Martínez resolvió su conflicto penal de manera rápida, y fue condenado a 1 año y 3 meses de prisión condicional, solo debiendo cumplir con una serie de reglas de conducta luego de que le pegara en el rostro su novia, embarazada de 4 meses. Sin embargo, su ex pareja y madre de su segundo hijo lleva años luchando para que se haga cargo, aunque sea económicamente, de su paternidad.
Catalina conoció al músico en 2010 a través de amigos en común, estuvieron juntos durante 2 tumultuosos años y se separaron cuando su bebé no tenía más que unos pocos meses. "Fue terrible, la pasé muy mal", manifiesta la mujer, que dejó San Juan con un niño de 5 meses después de que Martínez la dejara y se instaló en Córdoba, de donde proviene. Previo al viaje, acordó una cuota alimentaria que el cantante abonó solo "durante 3 o 4 meses", y después se borró.
Pasaron los años y la relación padre-hijo se basaba en que el niño viera a Martínez cuando él viajaba a Córdoba junto a su grupo, ya que jamás lo visitó. "Siempre fui yo la precursora de que existiera un vínculo", sostiene Catalina, "hasta que gracias a la ayuda psicológica entendí que yo no puedo sostener esa relación, tiene que nacer de él".
Aun así, siguió enviándole fotos y videos y manteniendo al músico al tanto de lo que sucedía en la vida de su hijo, aunque del otro lado no le demostraran interés alguno. Ahora, con el niño más grande y debido a la cuarentena impuesta por la pandemia del Covid-19, es el chico quien busca contactarse con su papá de manera directa.
Paralelamente, en 2018 la mujer pactó por segunda vez una cuota alimentaria que Martínez, de nuevo, abonó solamente durante un par de meses. Con ayuda legal, ella inició una demanda y logró que, en 2020, la Dra. Julia Rossi -jueza del Juzgado de Familia de la 1ra Nominación de Córdoba- ordenara "la inscripción de Claudio Adrián Martínez en el Registro de Deudores Alimentarios Morosos" tanto de la Provincia de Córdoba como de la Provincia de San Juan.
Además, la magistrada liberó "un oficio al Centro Emisor de Licencia de Conducir de San Juan EMICAR S.A. a efectos de que tome conocimiento de la presente resolución y proceda a retener el carnet de conducir de Martínez". Un año después, Catalina continúa realizando los trámites tendientes a que esta resolución judicial sea acatada en su totalidad, y a la espera de que el músico se haga cargo de lo que le corresponde.