La vuelta de Triferto: la marca santafesina revive en su esquina soñada de Boulevard
La histórica marca santafesina retoma su lugar en una esquina emblemática de la ciudad. Con una fuerte carga emocional y un respaldo popular intacto, la familia Fertonani impulsa el regreso de Triferto, un sueño largamente postergado que vuelve a cobrar vida.
Carlos Fertonani celebró la vuelta de Triferto a la esquina histórica de Boulevard. Foto: Manuel Fabatia
Aunque la empresa continuó activa a través de otros locales —la chopería, Broder, el Costa— el cierre de Triferto en 2020, en plena pandemia, había dejado un vacío. Fertonani explica que la marca siempre estuvo viva: un poco en cada espacio, un poco en cada receta, un poco en cada mesa compartida. Pero faltaba algo esencial: el “otro Triferto”, el original, el ADN.
Ese espíritu regresa en una esquina que tiene un significado profundo en la historia familiar. El sueño comenzó con Guinche, su padre, quien siempre imaginó un Triferto sobre Boulevard. “Decía que las calles chicas nos quedaban incómodas, que molestábamos a los vecinos, que Triferto tenía que estar en Boulevard, donde estuvo siempre la actividad económica”, recuerda su hijo.
En su momento, la familia buscó abrir allí, pero no daban los números. Hoy, en una vuelta inesperada de la vida, ese deseo finalmente se concreta. La reapertura en San Martín y Boulevard no solo materializa aquel sueño, sino que se convierte en un símbolo de continuidad generacional: así como Carlos acompañó a su padre, ahora lo hace junto a sus hijos.
La apertura generó expectativa entre amigos y clientes que celebran la vuelta de Triferto: Foto: Manuel Fabatia
El impulso de la gente y el boom gastronómico
El regreso no fue una decisión improvisada. El punto de quiebre llegó el año pasado, durante los festejos por los 30 años de Triferto. El reconocimiento del público fue determinante: “El cariño, el calor de la gente, cómo querían que vuelva Triferto”, relata Fertonani.
Los santafesinos repetían un recuerdo que se volvió común: “Yo iba a Trifertito”, “Yo iba a la Costanera”, “Yo iba a Triferto”. Pero al mirar alrededor, no quedaba ninguno. La Chopería explotaba todos los días, Brodeer crecía sin freno y el Costa ya trabajaba casi con capacidad completa. Sin embargo, faltaba la insignia, la raíz.
La familia había intentado otra marca en esa esquina hace dos años. Funcionó bien, pero no era “la” marca. “Nuestro eje es nuestra gastronomía, lo que nos gusta a los santafesinos”, sintetiza Fertonani. Y eso volvió a mostrar su fuerza cuando, apenas se colocó el cartel de Triferto, los autos comenzaron a tocar bocina, celebrando espontáneamente el anuncio.
El retorno no es solo un movimiento comercial: es parte de una identidad compartida. Los santafesinos sienten a Triferto como propio, y esa energía —esa fidelidad emocional— aceleró todo.
El liso bien frío, emblema de la tradición cervecera local, vuelve a ser protagonista en la nueva etapa.
Las raíces que sostienen el menú y la tradición
El renacer de la marca también recupera íconos de su gastronomía. Uno de ellos es el “lomo Presidente”, una receta nacida en un bar de la calle Mendoza que llevaba ese nombre. Allí, los fundadores de Triferto trabajaron en sus comienzos y crearon el sándwich con pan de miga en lugar del tradicional pan francés. Con tres capas de lomo, es una de las piezas más queridas del menú.
Otros clásicos también regresan: los voladores, el triple lengua y, por supuesto, el liso bien frío, ese ritual que trasciende generaciones en Santa Fe. “Cuando uno está mareado con lo nuevo —la inteligencia artificial, las tendencias— el cara a cara y las raíces son lo que triunfa”, reflexiona Fertonani.
En ese mismo espíritu, defiende con humor y orgullo otra marca registrada de los santafesinos: “El liso a 500 se banca a muerte. No se va más”. Y recuerda que en 1994 costaba 50 centavos. La frase resume la filosofía de la casa: mantener viva la tradición sin perder de vista la realidad del presente.
La familia también reconoce el valor del vínculo con los medios locales. “Siempre respaldado por El Litoral, un medio de buena gente, que nos permite contar esto a los santafesinos”, agradece Fertonani al cierre de la presentación.
Con inversión, familia, memoria y una ciudad entera celebrando, Triferto vuelve a marcar un hito. Y lo hace donde siempre quiso estar: en la esquina soñada del Boulevard.