Nacido el 30 de agosto, se trata del cuarto macho de oso panda gigante (Ailuropoda melanoleuca) de la historia del Zoo madrileño.
A partir de la próxima semana, se podrán seguir en streaming las imágenes de los dos desde el dormitorio interior de pandas a través de la webcam alojada en www.zoomadrid.com, con conexión 24 horas.
El público podrá visitar al pequeño durante los fines de semana, mientras su madre Hua Zui Ba se alimenta y descansa unas horas en el dormitorio interior.
La cría, que ya abre los ojos, se irá habituando, así, de forma gradual, a la luz; mientras duerme plácidamente en la cuna de madera instalada para la ocasión en la pagoda, donde ya comienza a gatear con torpeza.
No será hasta las navidades cuando dé sus primeros pasos y, a partir de los seis meses, cuando su capacidad motora esté más desarrollada y le permita caminar con seguridad.
En las últimas semanas, el macho de oso panda ha experimentado una notable transformación física, incrementando su peso en 50 gramos/diarios.
El osezno que dio muestra de unos potentes pulmones en sus primeras horas de vida, reclama ahora la atención de su madre con fuertes y enérgicas vocalizaciones.
Primeros bocados de bambú
Precisamente, con ella, mantendrá un estrecho vínculo como lactante hasta los dos años; aunque será antes, a los seis meses, cuando aprenda a degustar los primeros bocados de bambú (que se complementarán con la leche materna).
Habrá que esperar al próximo 5 de diciembre para desvelar el nombre elegido por los internautas, al cumplirse los 100 días de su nacimiento, según manda la tradición china, entre las cinco propuestas oficiales: De Mao (gato de Madrid), De Fu (fortuna o regalo de Madrid), Xi Fu (fortuna o regalo de España), De Bao (bebé o pequeño de Madrid) y Xing Bao (tesoro de estrella).
Diez en toda Europa
Con el nacimiento del último oso panda en el Zoo de Madrid, su población en Europa se amplía a 10 donde tan solo existen ejemplares en los zoos de Viena, Beauval, Edimburgo y Madrid.
Se trata del cuarto nacimiento de esta especie en grave peligro de extinción en las instalaciones madrileñas, después del alumbramiento de Chulín (4 de septiembre de 1982) y de los gemelos Po y De De (7 septiembre de 2010).
En la actualidad, quedan menos de 2.000 pandas gigantes en el mundo.
EFE







