Durante una protesta en una concurrida carretera de la ciudad de Maguncia, Alemania, un grupo de activistas medioambientales se pegó con superpegamento al asfalto en señal de protesta.
La manifestación se llevó a cabo en una carretera de la ciudad de Maguncia, en Alemania, y provocó el bloqueo temporal de tráfico. Para liberar su mano, un grupo de obreros de la construcción debieron utilizar un martillo perforador.
Durante una protesta en una concurrida carretera de la ciudad de Maguncia, Alemania, un grupo de activistas medioambientales se pegó con superpegamento al asfalto en señal de protesta.
Sin embargo, uno de ellos quedó fuertemente adherido y requirió de asistencia especial para liberarse de la situación.
Según medios locales, del estado de Renania-Palatinado, de los seis participantes en el acto; cuatro, que pertenecen al grupo Letzte Generation (Última Generación, en alemán), pegaron sus manos al pavimento, provocando el bloqueo temporal del tránsito por la zona.
Al parecer, uno de ellos fue más allá y usó una mezcla de superpegamento y arena, generando una adhesión más sólida. Para liberar su mano, obreros de la construcción debieron usar un martillo perforador y separar un trozo de asfalto de la carretera.
Un vocero de la Policia local señaló que "su mano se pegó tan fuertemente a la calle que no pudimos liberarla por los medios habituales. Por eso, tuvimos que utilizar un martillo perforador. Pudo levantarse finalmente con un pedazo de asfalto en su mano".
Después del hecho, se desconocía en qué estado quedó la extremidad del activista y si pudo ser separada del trozo de pavimento. Según fuentes locales, el mismo manifestante participó este lunes de una nueva protesta en Berlín.