Autoridades civiles y militares conmemoraron hoy en el Pentágono los atentados del 11 de septiembre de 2001, haciendo un minuto de silencio en honor a las 184 personas que perdieron la vida ese día en el corazón militar de los Estados Unidos.
Los actos en el Memorial del Pentágono, ubicado frente a la pared oeste del edificio donde se estrelló uno de los aviones secuestrados hace una década, fueron encabezados por el secretario de Defensa, Leon Panetta, y el vicepresidente, Joe Biden, entre otras altas autoridades.
"Pasaron diez años, pero las heridas están presentes", afirmó Panetta durante la ceremonia, según la agencia de noticias DPA. "Es difícil creer que hace diez años éste fue el escenario de increíble devastación", agregó.
Panetta aprovechó la ocasión para agradecer a los militares estadounidenses, gracias a quienes, afirmó, "hoy somos más fuertes y estamos más seguros".
Por su lado, el jefe de Estado Mayor conjunto, almirante Mike Mullen, recordó a los dos millones de soldados estadounidenses que desde los atentados entraron en combate, "para asegurarse de que un día como ése (el 11-s) no vuelve a suceder nunca", dijo.
Posteriormente, grupos de soldados se desplegaron por el Memorial del Pentágono para colocar una pequeña corona de flores sobre cada uno de los bancos de piedra, que recuerdan a los 125 trabajadores del Departamento de Defensa y 59 pasajeros del avión que perdieron la vida en el atentado.
Panetta recordó la mañana del 11 de septiembre de 2001 como "un momento definitorio para todos los estadounidenses".
"Fuimos desafiados por Al Qaeda y su vicioso odio, trataron de debilitarnos y en vez de ello nos hicieron más fuertes", sostuvo Panetta.
El titular de Defensa declaró que los atentados sólo sirvieron para "reafirmar" los valores de libertad y tolerancia que, diez años más tarde, "son reafirmados".
"Prometemos nunca olvidar al enemigo que hizo que esto sucediera, por qué los combatimos y por qué nunca dejaremos de luchar contra ellos para asegurarnos de que lo sucedió aquí, en Nueva York y en ese campo en Pennsylvania, nunca vuelve a ocurrir", afirmó.
Fuente: Télam