El tifón Saola avanza este sábado por la costa sur de China después de causar múltiples daños en Hong Kong, que evitó el impacto directo de una de las tormentas más fuertes en décadas en la región.
Se emitió el máximo nivel de alerta en la región. Los fuertes vientos causaron numerosos destrozos.
El tifón Saola avanza este sábado por la costa sur de China después de causar múltiples daños en Hong Kong, que evitó el impacto directo de una de las tormentas más fuertes en décadas en la región.
Decenas de millones de personas en esta densamente poblada área alrededor del delta del río de las Perlas se refugiaron en sus hogares en previsión de la llegada del ciclón, clasificado inicialmente como un supertifón.
En Hong Kong, se emitió el máximo nivel de alerta por tifones durante varias horas, una medida que se activó solo 16 veces desde la Segunda Guerra Mundial. En algunos lugares, se registraron ráfagas de viento de hasta 210 km/h en su punto más intenso.
Sin embargo, durante la madrugada, el ciclón fue degradado a tifón severo una vez que pasó por el centro financiero internacional de Hong Kong, dirigiéndose hacia otras áreas costeras de China continental.
Hasta ese momento, no se habían reportado víctimas ni daños tan graves como los causados por el poderoso Mangkhut en 2018.
A pesar de ello, las autoridades instaron a mantener la precaución debido a vientos sostenidos de 145 km/h en el centro del ciclón, tormentas violentas y posibles inundaciones costeras.
En las calles de Hong Kong, se observaron numerosos árboles derribados, andamios caídos y ventanas rotas. Se informó que los vientos arrancaron paneles solares de los techos de los edificios.
Aunque el paso de la tormenta no fue tan devastador como el tifón Mangkhut en 2018, que dejó más de 300 heridos en Hong Kong y seis muertos en China continental.
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