Inundaciones en Bolivia: al menos siete muertos y 20 desaparecidos
Las intensas lluvias provocaron el desborde del río Piraí y arrasaron varias localidades del departamento de Santa Cruz. Hay siete víctimas fatales confirmadas, unos 20 desaparecidos y más de 600 familias afectadas. El gobierno activó un operativo de emergencia y continúa la búsqueda de sobrevivientes.
Las fuertes lluvias que azotaron el este de Bolivia han causado inundaciones devastadoras, dejando un saldo trágico de al menos siete muertos y alrededor de 20 desaparecidos. La región más afectada es el departamento de Santa Cruz, donde cientos de familias han sido desplazadas y numerosas comunidades se encuentran incomunicadas.
Las intensas lluvias provocaron el desborde del río Piraí. Crédito: Reuters.
Desborde del río Piraí
El desastre comenzó la noche del viernes 12 de diciembre, cuando intensas lluvias provocaron el desborde del río Piraí, un afluente importante en la región. La corriente creció rápidamente, inundando amplias zonas urbanas y rurales del departamento, en especial las localidades de El Torno, Mairana, Colpa Bélgica y Buena Vista.
Las autoridades informaron que el nivel de las aguas alcanzó rápidamente niveles peligrosos, anegando viviendas y arrastrando vehículos y estructuras.
Las víctimas y los desaparecidos
El viceministro de Defensa Civil, Alfredo Troche, confirmó la trágica cifra de siete muertos hasta el momento, y el número de desaparecidos podría seguir aumentando, ya que aún se encuentran en curso los esfuerzos de búsqueda y rescate. De acuerdo con las autoridades locales, alrededor de 20 personas continúan desaparecidas, y se teme que muchas de ellas hayan sido arrastradas por la corriente.
Más de 600 familias han quedado afectadas por las inundaciones. Muchas de ellas se refugiaron en los techos de sus viviendas o en árboles para escapar de la fuerza del agua. La situación se complica debido a que las intensas lluvias no han cesado, lo que impide la evacuación completa y la normalización de las condiciones en las áreas afectadas.
La respuesta del gobierno
El gobierno de Bolivia ha declarado el estado de emergencia en las zonas afectadas y ha desplegado equipos de rescate, incluidos helicópteros, para asistir a las comunidades en riesgo. El presidente de Bolivia, Rodrigo Paz, instaló una sala de crisis en el Palacio de Gobierno para coordinar las operaciones de emergencia y proporcionar ayuda humanitaria.
La Defensa Civil y otras entidades gubernamentales están trabajando para asistir a los damnificados, entregando suministros básicos como alimentos, agua potable y medicinas. Se han habilitado albergues temporales en las zonas más afectadas, pero las autoridades temen que los recursos disponibles no sean suficientes para cubrir la creciente demanda de ayuda.
El gobierno de Bolivia ha declarado el estado de emergencia. Crédito: Reuters.
Un pronóstico incierto
Aunque las lluvias han disminuido ligeramente en las últimas horas, el pronóstico del tiempo indica que podrían volver a intensificarse en las próximas jornadas. El desborde de ríos como el Grande y el Parapetí podría agravar aún más la situación en otras regiones del país.
Las inundaciones en Bolivia subrayan una vez más la vulnerabilidad del país frente a fenómenos climáticos extremos. Con la temporada de lluvias aún en curso, las autoridades han llamado a la población a estar alerta y seguir las recomendaciones de los servicios de emergencia.
La magnitud del desastre es aún incierta, pero la solidaridad de los ciudadanos y el esfuerzo conjunto del gobierno y las organizaciones internacionales son fundamentales para superar esta tragedia.