Hamas entregó a la Cruz Roja el cuerpo de otro rehén israelí hallado en Gaza
El Ejército de Israel confirmó que recibió el ataúd con los restos de un rehén fallecido, en el marco del acuerdo de alto el fuego con Hamas. Se suma a las entregas realizadas el lunes, mientras persisten los operativos en la Línea Amarilla.
El Ejército de Israel confirmó que el cuerpo del rehén será trasladado por tropas en la Franja. Foto: Reuters
El Ejército de Israel informó este martes que Hamas entregó al Comité Internacional de la Cruz Roja el cuerpo de un rehén fallecido en Gaza. “Según información proporcionada por la Cruz Roja, el ataúd de un rehén fue transferido a su custodia y está en camino hacia las tropas del Ejército en la Franja de Gaza”, indicaron desde Tel Aviv.
Hamas afirmó que los restos fueron hallados al este del barrio de Shejaia, durante tareas de excavación realizadas dentro de la zona denominada Línea Amarilla. Según el comunicado de la organización, la cooperación con la Cruz Roja fue clave para acelerar la recuperación del cadáver y el hallazgo de restos adicionales.
Un vehículo de la Cruz Roja circula entre ruinas en Gaza tras la entrega del ataúd por parte de Hamas. Foto: Reuters
Ya entregaron restos de tres soldados
La entrega se suma a la que ocurrió el lunes, cuando Hamas transfirió los cuerpos del coronel Asaf Hamami (40), el capitán Omer Neutra (21) y el sargento Oz Daniel (19), todos soldados israelíes secuestrados previamente. Las autoridades israelíes aseguran que las entregas son parte del acuerdo de cese al fuego vigente.
Siguen desaparecidos ocho israelíes
Con esta última restitución, Israel mantiene el registro de ocho rehenes cuyos cuerpos aún no fueron devueltos: Itay Chen, Meny Godard, Hadar Goldin, Ran Gvili, Joshua Loitu Mollel, Dror Or, Lior Rudaeff y Sudthisak Rinthalak. Mientras tanto, Hamas exige garantías para sus hombres apostados en túneles en Rafah.
La devolución del cuerpo se produjo en la zona este de Shejaia, dentro de la Línea Amarilla. Foto: Reuters
La entrega de restos humanos en medio del cese al fuego alimenta la tensión en la región, mientras las negociaciones por los últimos rehenes siguen abiertas y los reclamos humanitarios se cruzan con exigencias políticas y militares.