Basile: "Nos tiene que ir bien...porque hay un extraterrestre con la 10"

Darío Pignata / [email protected]

La hermosa excusa fue la invitación de Coca Cola para presentar su ingenioso comercial para el Mundial de Rusia 2018, ése “Volver a Tilcara” que termina con la idea de “creer o reventar”, por la famosa creencia que se le hizo una promesa a la Virgen antes de México ‘86 y que nunca más volvieron para agradecer con la Copa dorada de la FIFA. Y que, en consecuencia, ahí está la explicación de tantas maldiciones y finales perdidas.

El popular Alfio Basile no sólo que es especialista en cábalas, sino que además tiene varias chapas: 1) El “Coco” es el último entrenador que ganó “algo” con la Selección Argentina, como fue esa Copa América de 1993; 2) Es el único entrenador que dirgió a Diego Armando Maradona y a Lionel Messi; 3) Su equipo, el de Estados Unidos ‘94, quedará marcado por siempre: jugaba como pocos y le pasó lo que a nadie: la expulsión de un jugador en medio de la competencia.

Del panel, además del “Coco” Basile, participaron Juan Pablo Sorín —ex capitán de la Selección Argentina— y el reconocido colega Juan Pablo Varsky.

“El que diga que no tiene cábalas miente. A mí me joden con eso del famoso polvito en Boca con el “Panadero”, los cuernitos y ésas cosas. En el fútbol, todos tienen cosas que le traen suerte y otras que no. Lo que pasa es que pocos lo reconocen. Es más, algunos ni hablan del tema porque no quieren descubrir cuáles son sus cábalas”, abrió juego el “Coco” con dos cosas que son un “sello Basile”: esa voz ronca y su pelo blanco.

Se prendió el “Juampi” Sorín con una cábala no conocida ni admitida públicamente en el Mundial de 2006 disputado en Alemania con el equipo de José Pekerman: “Antes de cada partido, además de hablar yo por ser el capitán, la arenga nos la daba Diego Maradona, que venía al vestuario en cada previa. Nosotros lo escuchábamos y salíamos inyectados a jugar‘, indicó el exlateral izquierdo.

Esa cábala se rompió el día de los cuartos de final contra Alemania: “Ese día no tuvimos la charla de Maradona, nos dijeron que ni siquiera había podido entrar al estadio cuando estábamos por salir, así que no nos quedó otra. Es más, me advirtieron a mí como capitán que estaba en tiempo de multas de FIFA”.

Sorín la dejó picando: alguien de la organización local del mundial, que se hizo en Alemania, sabía de la “cábala” que representaba la presencia de Maradona en el vestuario albiceleste y por eso evitaron que Diego pudiera entrar al vestuario para cumplir el ritual.

“Obviamente no perdimos por eso, pero...”, ironizó Sorín. Pero no pudo terminar la idea: “Ustedes no tendrían que haber entrado a la cancha”, lo cruzó el “Coco” Basile en medio de las risas de todos. Hay que recordar que el partido terminó igualado 1 a 1, en el tiempo reglamentario, y Alemania se impuso en la tanda de remates desde el punto de penal, en el partido disputado en el estadio Olímpico de Berlín, y que marcó la eliminación del conjunto argentino.

Las frases del “Coco”
“Tenemos un extraterrestre en la Selección, cómo no nos va ir bien. Para el 99 por ciento de la gente del fútbol Messi es el mejor del mundo... Con él en el equipo podemos soñar”.

— “Si la defensa y el mediocampo está bien, con Messi arriba tenemos que hacer un gran Mundial. Pero falta el medio... Creo que ni el técnico (N.de R.: Jorge Sampaoli) lo tiene porque le falta tiempo de trabajo...casi ni pudo entrenar y por eso son muy importantes estos días, todos juntos”.

— “Lo tuve a Messi de chiquito, tenía 18 años y se notaba que era distinto. Lo único que no hablaba nada, era calladito. Le dije que iba a ser goleador porque se notaba en las prácticas... Más allá de lo que la gente ve en los partidos, hay que verlo en los entrenamientos. Es un moustruo ese chico...todo mano a mano con él era sacar del medio”.

— “Acá hay tres monstruos en toda la historia y nada más. Los dos nuestros, a los que dirigió “Papá”, o sea yo...(risas). Pero es así, no le busquen vueltas: Maradona, Messi y el “Negro” Pelé, a quien enfrenté de rival. Están a varios años luz de todos los otros”.

— “Cuando yo le decía a Messi que hablara, el pibe no abría la boca y me decía “Alfio, mire los jugadores consagrados que hay acá y usted quiere que hable”. Le dije que iba a terminar siendo mucho más goleador que armador. Es decir, más “9” que “10”, es goleador...ponéle la firma. El día de la final en Brasil cuando veo que la pelota se va afuera, me quería morir. No lo podía creer, porque de ahí no falla”.

— “Yo llego para las semifinales, vamos a pasar tranquilos. Y redoblo la apuesta...vamos a jugar las semifinales y vamos a volver a jugar la final de la Copa del Mundo en Rusia. Le pongo la firma. Le tengo mucha fe a la Selección”.