La ciudad de Zárate vive por estas horas una emergencia climática sin precedentes. Con más de 260 milímetros de agua acumulada y calles completamente anegadas, el municipio fue declarado en alerta roja por la Dirección de Defensa Civil bonaerense.

El municipio más afectado del norte bonaerense enfrenta inundaciones severas, evacuaciones y cortes de servicios.

La ciudad de Zárate vive por estas horas una emergencia climática sin precedentes. Con más de 260 milímetros de agua acumulada y calles completamente anegadas, el municipio fue declarado en alerta roja por la Dirección de Defensa Civil bonaerense.
El fenómeno, que afecta a gran parte del norte del conurbano, ya motivó la intervención de fuerzas federales enviadas por el Ministerio de Seguridad de la Nación para tareas de asistencia.
“La situación es complicada y esperamos mucha más lluvia”, advirtió el intendente Marcelo Matzkin, quien pidió a la comunidad no salir de sus casas salvo en casos urgentes y comunicarse con el Centro Operativo de Seguridad (COS) en caso de evacuación.
La ciudad activó su Comité de Crisis, suspendió todas las actividades oficiales y trabaja en operativos de evacuación, cortes de tránsito y asistencia a los barrios afectados.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, confirmó a través de sus redes sociales el envío de un equipo de la Agencia Federal de Emergencias, junto con Prefectura, Policía Federal y Vialidad Nacional, que ya operan en los accesos a Zárate y las zonas más críticas.

“Respuesta rápida ante la emergencia, trabajo en equipo y seguridad a los vecinos”, sostuvo Bullrich, remarcando la gravedad de la situación.
Aunque Zárate es, hasta el momento, el municipio más golpeado, la tormenta afecta a todo el norte bonaerense y parte del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

Localidades como Campana, Exaltación de la Cruz y Capitán Sarmiento también registraron inundaciones, caídas de árboles, cortes de energía y desbordes de arroyos, lo que complica la circulación en rutas clave como la Panamericana y la Ruta 8.
Según datos de Defensa Civil, la mitad del territorio bonaerense está en alerta naranja y el resto, en alerta amarilla. “Las tormentas severas impactan sobre los municipios del norte bonaerense”, señaló el director del organismo, Fabián García, y anticipó lluvias intermitentes al menos hasta el sábado.
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