En el peor momento político de su gestión por errores cometidos, y visualizada su debilidad la oposición redobló esfuerzos para golpearlo (marchas, paros de la CGT, derrotas legislativas tema Suprema Corte, escándalo no aclarado por las cripto monedas, etc.), nuestro país firma un nuevo acuerdo con el FMI asegurando el ingreso de miles de millones de dólares con 4 años de gracia sumado a la prórroga acordada con China por los 5.000 millones de dólares hasta mediados del año que viene. Excelentes noticias económicas para Milei que fue motivo de gran festejo en Casa Rosada y sirvió para que no se hablara mucho del 3,7 % de inflación en marzo.
Estas concreciones motivaron el anuncio del cese parcial del cepo cambiario. Parcial porque se aplicará a las personas humanas y no a las jurídicas. Pero aún así, es una excelente noticia que termina con las trabas cambiarias luego de 7 años. Milei lo había prometido desde el primer momento de su campaña, pero lo había condicionado al logro de varias metas, entre ellas, llegar a una inflación mensual inferior al 1,5 %. Tuvo que apresurar la terminación del cepo, (¿año electoral, suba del dólar blue y el riesgo país, suba de la inflación, atraso cambiario, etc.?) Es posible que esto sea correcto sumado a otras causas.
Por supuesto, inmediatamente de anunciada la medida aparecieron las críticas, más políticas que técnicas, o algunas técnicas muy livianas y sin la necesaria fundamentación. Milei aclaró que el país no es el mismo por lo que no se repetirán los errores ocurridos durante el macrismo. Sobre todo, porque se corrigieron los principales vicios macroeconómicos (Cero emisión, cero déficit fiscal, baja de la inflación a pesar del último rebrote, etc.)
De la misma manera que la medida fue criticada por el arco opositor, fue aplaudida por la mayoría de los actores económicos. Por supuesto, estos aplausos están condicionados a determinados reparos a tener en cuenta en el futuro cercano. El pueblo en general, la gente, no entiende la importancia de algún porcentaje que se aplique sobre el PBI, o negociar yuanes con los chinos, y no lo afecta directamente ya que no forma parte del sector especulativo que compra o vende dólares. Solo aspira a que se estabilicen los precios, que mejore su capacidad de compra, que mejore la situación de los jubilados en general, que se facilite el acceso a la salud y la adquisición de los necesarios medicamentos, que disminuyan en forma urgente la desocupación, la pobreza y la creciente inseguridad, entre otras cuestiones no menos importantes, que hoy nos golpean. Y mucho.
Milei necesita síntomas y hechos positivos para mejorar su posición frente a los próximos comicios, la oposición necesita su fracaso para lograr lo mismo más recuperar el poder perdido, objetivo supremo para algunos sectores y el pueblo necesita que al país le vaya cada vez mejor porque eso mejoraría la situación personal de la inmensa mayoría de los argentinos. El resultado de las elecciones legislativas nos dará pautas sobre estas cosas, especialmente los resultados en algunos distritos como Capital Federal y provincia de Buenos Aires, peleando en ésta la gran batalla contra el kirchnerismo.
Estos resultados, junto a la eficacia o no de las medidas económicas, determinarán sin ninguna duda el futuro cercano de nuestro país. Cuestión que nos preocupa mucho. No es importante que Milei no se rinda en las cuestiones del armado político. Lo importante es que gobierne para beneficio del país, o sea, todos nosotros.
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