La ministra y senadora electa, Patricia Bullrich, se reunirá este viernes a las 12 con la vicepresidenta Victoria Villarruel, en un desembarco anticipado que busca recomponer, al menos en términos formales, una relación que en los últimos meses transcurrió por la vía del intercambio de imputaciones.
Este viernes a mediodía
Bullrich cara a cara con Villarruel, en vísperas de su desembarco en el Senado
La actual ministra de Seguridad sería el brazo político del gobierno en la Cámara Alta. Buscarán ordenar la agenda y recomponer el vínculo formal, luego de sonados cruces de imputaciones.
Justamente, será la primera reunión que mantengan después de las elecciones del 26 de octubre y tras los fuertes cruces que mantuvieron en los últimos meses. La intención central es coordinar el esquema de trabajo de las sesiones extraordinarias, que comenzarán a partir del 10 de diciembre. Para ese proceso deberán constituirse nuevas comisiones clave: Presupuesto, Trabajo y Previsión, y Legislación Penal, donde se debatirán proyectos impulsados por el Poder Ejecutivo.
Desde el entorno legislativo remarcan que el encuentro no abordará la elección del presidente provisional del Senado. Esa definición, que también se prevé que asuma las características de una “pulseada”, quedará para febrero, cuando la Cámara alta renueve sus autoridades en la sesión preparatoria del 24 de ese mes, tal como establecen las normas internas.
Contexto
La distancia de Villarruel con el gobierno se profundizó en julio, cuando se debatieron las leyes de Movilidad Jubilatoria, Moratoria Previsional y Discapacidad, que fueron aprobadas por el Congreso pero luego rechazadas por el Poder Ejecutivo. Aquella sesión derivó en un fuerte enfrentamiento: Bullrich pidió públicamente que la vicepresidenta no la presidiera, mientras que Villarruel la acusó de haber integrado organizaciones terroristas.
Con este encuentro, ambas buscarán recomponer el vínculo institucional en un momento clave para la agenda legislativa y para la consolidación del bloque oficialista de cara al inicio del nuevo período parlamentario.
Pero a la vez, constituye el desembarco formal anticipado de la actual ministra de Seguridad, que será sobre quien recaiga la responsabilidad de la conducción política del cuerpo, considerando el estado de los vínculos oficiales con la vice.
En la nueva arquitectura política que delineó la Casa Rosada para el Congreso es el tándem Patricia Bullrich–Martín Menem: la electa senadora, designada por el propio Milei como presidenta del bloque en la Cámara alta, y el riojano que continuará al frente de Diputados.
Bullrich ya reunió a los senadores que continuarán y a los que se incorporarán el 10 de diciembre. La apuesta es consolidar un bloque disciplinado y funcional a la agenda del Ejecutivo, a expensas de Villarruel, que mantiene la presidencia de la Cámara pero está marginada del gobierno tras diferencias en las decisiones de gestión.
Roles
Muy activa desde el triunfo electoral y experimentada en el Congreso, Bullrich ya ha tomado también contacto con jefes y referentes de distintas bancadas de la oposición, incluido el kirchnerismo, de cara a lo que viene por delante.
En declaraciones periodísticas, Bullrich reconoció este miércoles que el vínculo entre el Gobierno y la vicepresidenta Villarruel "ha sido distante", aunque adelantó que el oficialismo buscará que la titular del Senado colabore con la agenda legislativa en lugar de obstaculizarla.
"La relación con Villarruel y el Gobierno ha sido de distancia… ahora me toca un rol institucional y lograr que el Senado funcione apoyando las ideas que representamos, las mismas por las que Villarruel ocupa ese lugar. Nuestro pedido será que nos ayude y no nos boicotee", señaló Bullrich.
La funcionaria aclaró que esa falta de cercanía no se limita a ella, sino que "ha sido con todo el Gobierno".
Fuentes parlamentarias señalaron que el Presupuesto se buscará aprobar en el Senado si hay acuerdo el 22 de diciembre y si no luego de la Navidad, pero antes de fin de año. En la reunión con los senadores libertarios, les anticipó que la reforma laboral ingresará por el Senado en diciembre.
Por otro lado, Bullrich ratificó que el oficialismo insistirá con el proyecto de "Ficha Limpia", que busca impedir que personas condenadas por corrupción puedan postularse a cargos electivos.
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