El Litoral
DyN - Telam
El ministro de Economía, Axel Kicillof, aseguró hoy que los gremios que salieron a cuestionar el anuncio sobre una reducción en el impuesto a las Ganancias para quienes cobran entre 15 y 20 mil pesos mensuales lo hacen "porque se quedaron sin discurso".
"Era previsible, en la conferencia de ayer, cuando se anunció la medida, traté de dar algunos elementos para que el debate sobre la cuestión sea un poco más basado en la realidad de los hechos. Estas reacciones tienen que ver con que se quedaron sin discurso", aseguró.
En declaraciones a radio Vorterix, el funcionario reiteró que es "mentira" que el cuestionado impuesto "sea un tema que afecta al conjunto de la clase trabajadora", y reafirmó que solo "lo paga el 10 por ciento" de los asalariados.
Kicillof, además, negó que el Gobierno quiera implementar un "techo" a las negociaciones paritarias, pero advirtió que no avalará que empresarios acuerden aumentos salariales "pensando en subir los precios".
"En el marco de la discusión salarial, que es entre cada sindicato y la patronal, la paritaria es totalmente libre. Lo que el Gobierno no va a avalar es que un empresario diga ’bueno, yo aumento los sueldos, total lo llevo a precios después’. Y eso lo escuché yo de algunos empresarios", señaló.
El funcionario aseguró que ese "es un mensaje para los empresarios", y rechazó también que los incrementos salariales sean "a costa de los subsidios del Estado".
Por su parte el jefe de Gabinte, Aníbal Fernández, sentenció hoy que el "tope" de los aumentos salariales que demandan los gremios lo fijará la "economía" y no el Gobierno, al advertir que si los incrementos "se escapan de madre" habría un "impacto en el bolsillo de todos".
Por otra parte, el ministro ponderó la reducción del Impuesto de Ganancias en la última categoría, anunciada ayer, al señalar que "mejora en forma directa el salario de los trabajadores" y que "es un número más que aceptable" el que obtiene a su favor el trabajador en esa escala, luego de mencionar una "desaceleración real de la inflación".
"Las paritarias son libres, se tienen que definir entre ellos (empresarios y trabajadores); el Gobierno no va a poner límites, lo va a definir la propia economía", planteó el funcionario, al realizar declaraciones esta mañana, al ingresar en la Casa de Gobierno.
Al respecto, planteó: "Que ese aumento se traslade a los precios, es entrar en una colisión que no estamos dispuestos a aceptar; si un número se escapa de madre, estaríamos viendo un impacto en el bolsillo de todos" por lo que insistió en que "el límite" a los aumentos "lo pone las posibilidades ciertas de la economía".
El ministro, en esa línea, propició "encontrar el punto en que sea el número más alto" de aumento salarial "y no impacte en el bolsillo de los trabajadores" con un subsiguiente aumento de precios, al negar que el Gobierno impulse un tope del 25 por ciento, como argumentan algunos sindicatos.