Luis Verón | [email protected]
El Intendente de San Javier, Ing. Mario Migno encabezó un acto para homenajear al fallecido Teniente 1° Alberto Rolando Ramos, caído en combate durante el conflicto bélico de Malvinas. El mismo fue alumno del Liceo Militar, “General Manuel Belgrano” de Santa Fe y tuvo una destacada actuación en su paso, comprometido con la Patria y el sentimiento nacional. Se descubrió una placa en su nombre, ubicada en la calle que lo recuerda en el barrio Islas Malvinas.
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Estuvieron presentes los Veteranos de Guerra de Malvinas de la ciudad, el Senador José Baucero, el Presbítero Armando Cattáneo, la Presidente del Concejo, Lic. Maribel González, ediles de la ciudad, representantes de todas las fuerzas de seguridad que hay en la ciudad y funcionarios del gabinete. Además, compañeros de promoción N° 23, otros egresados, cadetes que cursan en el Liceo “Manuel Belgrano” y familiares del agasajado post mortem.
Agradeció al Concejo Deliberante por haber aceptado poner este nombre a la calle y sostuvo “podemos concretar este homenaje, justamente a 40 años de la caída de Alberto, quien entregó su vida para defender los valores que le fueron dados, el de la argentinidad sobre todo. Actuó con subordinación y valor, como nos han convocado durante tantas veces”.
El teniente Alberto Ramos, nació el 2 de agosto de 1957 en Santa Fe, Alberto cursó la primaria en el Colegio San José y fue al terminarla, que manifestó su deseo de ingresar al Liceo Militar. Todo se tornó más serio cuando luego de cinco años, al finalizar la secundaria, Alberto fue uno de los únicos tres alumnos de su promoción que levantaron la mano cuando el profesor preguntó quién iba a seguir la carrera militar.
Formando parte de la promoción 108 del Colegio Militar de la Nación, el teniente. eligió el arma de Artillería y ya recibido, contrajo matrimonio con Laura Susana María Dorrego, con quien, dos meses antes de partir a la guerra, tuvo una hija llamada Soledad.
Ya desatado el conflicto, Ramos fue movilizado repentinamente, con el fin de completar al Grupo de Artillería 3 en Paso de los Libres.
«¡Fuegos de iluminación sobre zona oeste y noroeste del Monte Longdon! ¡Esto es un infierno; ¡hay ingleses por todas partes, gritan como locos, muchos caen, pero vienen más! ¡Creo que estamos rodeados!»; fueron las palabras de alerta que usó Ramos desde su posición de observador adelantado, siendo esta su última comunicación con el Centro de dirección, que finalizó con un silencio absoluto.
El teniente Ramos, pese a estar herido, no retrocedió ante el ataque. Por el contrario, permaneció en su posición de avanzada, pero ahora combatiendo con una ametralladora MAG hasta el último minuto de su vida. En ese lugar se luchó cuerpo a cuerpo, posición por posición. Hubo heridos y muertos de bayoneta. El teniente de artillería Ramos mostró la entrega, la valentía, la generosidad y el compromiso que tenía como soldado argentino, y por, sobre todo, su amor a la Patria.
Sus restos yacieron durante más de tres décadas bajo una lápida con la inscripción «Soldado conocido sólo por Dios» y en el 2017 tras haber sido reconocidos en el Proyecto Humanitario Malvinas, logró tener una lápida con su nombre en las Islas. Sus familiares donaron la placa que se hallaba en el cementerio de Darwin, que hoy se encuentra colocada en el Colegio Militar de la Nación en homenaje a Alberto Ramos y a todos los héroes que al igual que él, ofrendaron su vida por la Patria.