Lanzaron nuevo anticonceptivo práctico y discreto, pero caro

De la redacción de El Litoral
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Hace cincuenta años, las mujeres pudieron hacer realidad un sueño: tener la libertad -y ejercer su derecho- de decidir cuándo tener sus hijos y cuántos serían. La píldora anticonceptiva les permitió planificar su vida en este sentido.

A medida que pasaban los años, las investigaciones avanzaron y fueron surgiendo nuevos métodos anticonceptivos, que siempre deben ser indicados por el médico, tras un control de la usuaria: dispositivos intrauterinos (DIU), diafragmas, parches o simplemente los preservativos.

El último producto que se puede conseguir en el mercado fue lanzado recientemente en Argentina, aunque se venía utilizando en otros países del mundo desde 2002. Se trata de un anticonceptivo hormonal que se coloca en la vagina, llamado Nuvaring. Aseguran que esta pequeña bandita elástica, flexible, que se coloca como un tampón, es más cómoda y efectiva pero tiene una contra: su costo (alrededor de 118,43 pesos), aunque también se advierte que podría existir cierta barrera cultural que hace que muchas mujeres se aferren a un anticonceptivo más tradicional.

Por este motivo, El Litoral consultó la opinión de los Dres. Ricardo Bruno, presidente de la Sociedad de Ginecología de Santa Fe, y Samuel Seiref, jefe del Servicio de Ginecología del hospital Iturraspe y secretario de Ciencia y Técnica y encargado del área de Tocoginecología de la Escuela de Medicina de la UNL.

Bruno explicó que “es un anillo de plástico con gran flexibilidad, de 5 centímetros de diámetro, que se coloca en la vagina, adonde hay muchos vasos sanguíneos que absorben rápidamente la dosis de las dos hormonas que la usuaria necesita diariamente”.

Sin embargo, aclaró que “a pesar de que va dentro del organismo no tiene similitud con el dispositivo intrauterino (DIU). Nuvaring tiene dos hormonas, al igual que la píldora anticonceptiva: estrógeno y un progestágeno. Por este motivo se lo denomina anticonceptivo combinado. Es otra diferencia con el DIU, que sólo tiene una (progestágeno). Su función es la misma que la de las pastillas: anovulatoria, es decir, evitar la ovulación”.

De fácil colocación

Respecto a sus ventajas, mencionó la practicidad para su colocación y que es discreto. “Como es un círculo, el anillo se pliega con los dedos y se coloca sin forzar, hasta que haga tope. La vagina es una cavidad cerrada y sólo está abierta en su parte más profunda, adonde está el cuello del útero. Ahí va a quedar depositado el Nuvaring y no va a salir porque la cavidad de la vagina es virtual: las dos paredes están apoyadas y en el fondo queda el anillo”, precisó Bruno.

Y advirtió: “La vagina es muy elástica y en el lugar en donde queda colocado el anillo, la mujer tiene muy poca sensibilidad y produce -en la mayoría de los casos- escasa o nula molestia. Por el contrario, está descripto que es el varón el que siente que hay algo en la vagina de la mujer durante la relación”, planteó Bruno.

Puede colocarse de parada, con una de las piernas levantadas; agachada (en cuclillas) o acostada, el primer día de su sangrado menstrual, y se debe quitar justo a las tres semanas, siempre el mismo día, así se adquiere la costumbre.

Y Seiref agregó que “se lo coloca cada mujer, que tiene que aprender a hacerlo según la indicación del médico. Se puede caer pero no cambiaría nada si la mujer lo ve y se lo vuelve a colocar. Igual que si un diafragma está mal colocado, no actúa como anticonceptivo y la usuaria se podría embarazar”.

En este sentido, Bruno sugirió “si la paciente expulsa el anillo (lo va a notar sólo cuando llega a la entrada de la vulva) debe volver a colocarlo inmediatamente, luego de higienizarlo con agua fría, nunca con agua caliente. Nunca deben pasar más de tres horas sin el Nuvaring colocado porque disminuye mucho la tasa de efectividad”.

Además, “es el método anticonceptivo más discreto: está tan oculto que nadie va a sospechar que se está usando este método anticonceptivo. Además, en cuanto a la satisfacción de la paciente, cumple las mismas características de índice de prevención del embarazo que la píldora, ya que tiene los mismos componentes. Tiene una efectividad cercana al 99%”, según comentó Bruno.

El anillo

Material: círculo de plástico muy maleable, que mide 5 centímetros de diámetro. Al ponerse en contacto con la vagina elimina dos hormonas.

Colocación: es fácil y se debe proceder como cuando te ponés un tampón.

Frecuencia: se coloca un anillo el primer día del sangrado menstrual, durante tres semanas. Se descansa una semana y se introduce un nuevo anillo.

Efectividad: cercana al 99%.

Peligro: puede ocurrir que la paciente expulse el anillo durante la relación sexual, cuando se sacó un tampón o se higienizó. Debe colocarlo inmediatamente (antes de las 3 horas), luego de lavarlo con agua fría.

Costo: 118,43 pesos cada anillo.